Este supercontinente cambiará la faz de la Tierra
Como sabes, todos los continentes de la Tierra tienen diferentes climas, ecosistemas y culturas... Pero no siempre fue así. De hecho, esto también cambiará en el futuro. Algún día, nuestro mundo cambiará más allá del reconocimiento. Todos los continentes se convertirán en una gran tierra. ¿Como se verá esto? Bueno, no estaré presente para verlo, pero descubrámoslo, ¿quieres? Echemos un vistazo al mapa del mundo. Hay 7 continentes: América del Norte y del Sur, África, Australia, la Antártida, Europa y Asia. Si sabes esto, felicidades, ¡todavía recuerdas algo de la escuela primaria!
Ahora, ¿alguna vez has notado que sus fronteras se alinean bastante bien entre sí? Por ejemplo, América del Sur y África parecen dos piezas de un rompecabezas. El científico Alfred Wegener también notó esto en la década de 1910. Después de descubrirlo, continuó “armando el rompecabezas” y notó que ¡India y Madagascar se alinean con África igual de bien! Pero eso no era lo único extraño del mundo. Por ejemplo, encontramos los fósiles de los mismos animales antiguos... ¡en continentes completamente diferentes! Ahora, ¿cómo es eso posible? No podrían haberse originado como especie en Japón y en Centroamérica al mismo tiempo. Eso es simplemente absurdo.
¿Podrían algunos de ellos haber cruzado el océano? Eh, eso es poco probable... A menos que sean una especie de nadadores olímpicos. ¿Quizás solía haber algún tipo de puente natural entre estos continentes? Pero a pesar de que ha pasado tanto tiempo, si realmente existiera, habríamos encontrado rastros de este puente. ¡¿Y qué clase de constructor loco haría un camino tan largo?! Había algunas otras cosas extrañas. Por ejemplo, la gente encontró rastros de las mismas montañas tanto en los EE. UU. como en Escandinavia. ¿Qué significa todo esto? Wegener lo pensó mucho y entonces... ¡Se dio cuenta! ¡Un descubrimiento brillante! En 1912, presentó su teoría al mundo. La idea general era que los continentes se movían como icebergs sobre el agua. Están constantemente convergiendo y divergiendo.
Ahora sabemos que estaba 100 % en lo correcto. Pero, desafortunadamente, los científicos de ese momento básicamente arrojaron tomates a Wegener. Carecía de datos y no podía explicar exactamente cómo se mueven estas placas. Sin embargo, Wegener no se dio por vencido. Escribió un libro llamado “El origen de los continentes y océanos”. Y finalmente, en la década de 1930, el geólogo Arthur Holmes llenó los espacios en blanco de la teoría de Wegener. Por fin, el mundo... Oh, no, espera. Tendremos que aguardar un par de décadas más hasta que el mundo se dé cuenta de que esto era cierto. La gente es un poco lenta, ¿verdad? Como fuera, ahora lo llamamos “la teoría de la deriva continental”.
Mientras tanto, los continentes de la Tierra se mueven a lo largo del manto varios centímetros por año. Cada pocos millones de años, chocan entre sí y crean los llamados “supercontinentes”. Los supercontinentes son, como habrás adivinado, ENORMES masas de tierra que constan de varios continentes más pequeños. Todavía no estamos seguros de cuántos de ellos existieron antes. Pero probablemente hayas oído hablar de uno de ellos. Se hizo famoso porque los científicos creían que era el único supercontinente en la historia de la Tierra. Fue nombrado “Pangea”. Porque Afra-Arctica-Euro-Austra-Amer-Asia es demasiado largo para recordar. Es una broma. “Pangea” significa “toda la tierra” en griego. Hermoso, ¿verdad? Este supercontinente existió durante unos 160 millones de años, pero se dividió hace mucho tiempo. Por eso es difícil siquiera imaginar cómo era Pangea y cuántas cosas han cambiado en ella.
Era significativamente diferente de nuestra Tierra actual. Por ejemplo, no había cadenas montañosas como las que tenemos hoy. La concentración de CO2 era 5 veces mayor que la actual, por lo que la temperatura promedio era mucho más alta. Es posible que ni siquiera hubiera hielo en la Tierra, solo bosques tropicales. Esta Tierra podría haber sido un invernadero, e incluso el Polo Norte podría haber estado cubierto de selva tropical. ¡Suena como un lugar agradable! Los dinosaurios fueron testigos de todo esto, pero nosotros no. Los primeros humanos aparecieron hace solo 2 millones de años. Y el primer Homo Sapiens, que básicamente somos nosotros, apareció hace solo 300 mil años. Así que, desafortunadamente, como especie nos perdimos la parte genial de la deriva continental. Pero tal vez algún día podamos ver cómo sería.
Verás, en realidad Pangea no fue el primer supercontinente. Hubo al menos 3 de ellos antes. El más antiguo, Vaalbará, existió hace unos 3600 millones de años. Se convirtió en el “abuelo” de todos los continentes que conocemos hoy. Vaalbará los incluía a casi todos. Luego se separó, como una pareja en una mala cita, y surgieron sus “nietos”: Ur, Kenorland, Nuna, etc. Finalmente, se creó Pangea. Ahora sabemos que se forman cada 600 millones de años. Eso se llama el “ciclo del supercontinente”. ¡Eso significa que un día en la Tierra todo se fusionará de nuevo! Pero, ¿cuándo y cómo sucederá? En primer lugar, tenemos que aclarar algo. Hay un supercontinente, ¿verdad? Básicamente, una isla enorme. Esto significa que el resto del mundo es ahora un superocéano... Excepto por un par de islas pequeñas, tal vez. El océano en la época de Pangea se llamaba “Panthalassa”. Y nuestro genial y misterioso Océano Pacífico es en realidad solo sus patéticos restos. Los otros dos grandes océanos, el Atlántico y el Índico, nacieron cuando Pangea comenzó a dividirse en partes separadas.
Entonces, cuando estos océanos se “cierran”, secándose por completo, se forman nuevos supercontinentes. Y cada vez se cierran poco a poco y muy lentamente. Significa que el Océano Pacífico se está reduciendo de tamaño en este momento. ¡Sí! Pierde unos centímetros al año. Vaya, yo también podría perder unos centímetros al año. Es difícil de imaginar, pero en el futuro se convertirá en un charco ordinario. Desaparecerá junto con el Océano Ártico, y eso es inevitable. Pero cuando suceda, aparecerá un nuevo supercontinente... Amasia. El nacimiento de Amasia fue predicho por científicos de la Universidad de New Curtin en Australia. Hicieron algunos cálculos muy complejos en una supercomputadora. Cargaron los movimientos continentales de los últimos 300 millones de años más o menos. Y luego, con base en estos cálculos, la computadora predijo lo que nos depara el futuro.
Entonces supimos que un día, las Américas, tanto del Sur como del Norte, chocarán con Asia. Y esta colisión creará un nuevo supercontinente... con un nombre muy original. Como ya se mencionó, el Océano Pacífico algún día desaparecerá por completo. Por otro lado, el Océano Atlántico está creciendo en este momento, empujando a ambas Américas hacia el oeste. Entonces, cuando aparezca Amasia, este océano puede convertirse en el nuevo océano más grande del mundo. Y así es como se verá: ambas Américas chocarán con el este de Asia y, aunque es difícil de predecir, algunas fuentes afirman que la Antártida finalmente encontrará su camino hacia América del Sur. Australia también jugará un papel muy importante en esto: puede conectar a América y Asia. Entonces, ¿ya no estará “abajo”? Supongo que no.
Y, si la humanidad todavía existen ese entonces... Podrías caminar desde Francia a Australia o desde Sudáfrica a Argentina sin mojarte los pies. Así que aquí hay una solución: si no puedes viajar ahora mismo, solo espera 300 millones de años. Y no, eso no cuenta el tiempo de espera para pasar por la seguridad del aeropuerto. Los científicos también solían pensar que Amasia se reuniría alrededor del Polo Norte, creando una enorme capa de hielo y enfriando el planeta. Sin embargo, ahora piensan que esto es muy poco probable. Tal vez estará en algún lugar en el “medio” de los polos. Sin embargo, esto no significa que la Tierra seguirá siendo tan amigable como lo es ahora. La Tierra del futuro será radicalmente diferente de lo que conocemos. El nivel del mar será más bajo y la Amasia consistirá en vastas áreas muy áridas con altas oscilaciones térmicas diarias. Sí... Va a estar SUPERCALIENTE.
El ecosistema cambiará por completo, pero es bastante difícil decir a qué conducirá todo esto. Cuantos más datos recibamos a lo largo del tiempo, con mayor precisión podremos predecir el futuro de nuestro planeta. Por el momento, todas estas son solo teorías, y los científicos señalan que aún están lejos de ser probadas. Pero aun así, ¡los resultados del trabajo del equipo son muy impresionantes! Nos dicen mucho no solo sobre el futuro del planeta sino también sobre su pasado. Sería genial si los humanos pudieran estar a la altura de esos tiempos. Podríamos observar desde el espacio distante cómo está cambiando nuestro planeta natal. Es fascinante y un poco extraño al mismo tiempo.