Estudio revela por qué estar enamorado causa cambios en nuestro cerebro
El amor no solo cambia la forma en que vemos el mundo, sino que moldea nuestra esencia misma. Experimentamos una metamorfosis sutil, pero poderosa, donde cada latido nos impulsa a nuevas alturas emocionales. En este torbellino romántico, descubrimos que el amor no solo altera nuestro comportamiento, sino que también nos invita a explorar los rincones más profundos de quienes somos. Ahora la ciencia nos resuelve y nos explica qué es lo que causa semejantes cambios.
Una investigación reciente ha profundizado en la comprensión de por qué las personas cambian su comportamiento cuando están profundamente enamoradas.
Hasta ahora, los conocimientos sobre el amor y cómo afecta nuestro comportamiento eran limitados para los investigadores.
Este nuevo estudio confirma que cuando nos enamoramos, nuestra conducta experimenta cambios significativos, y estos cambios se reflejan en el funcionamiento del cerebro.
Para llevar a cabo la investigación, Adam Bode, un estudiante de doctorado en la Universidad Nacional de Australia, y el Dr. Phil Kavanagh, de la Universidad de Canberra y la Universidad de Australia del Sur, encuestaron a más de 1,500 adultos jóvenes que se identificaron como enamorados. Les formularon preguntas sobre sus relaciones y cómo se comportan hacia sus parejas.
Los científicos se centraron específicamente en el sistema de activación conductual dentro del cuerpo (también conocido como el BAS) y cómo responde cuando una persona está enamorada. Se cree que el BAS es un mecanismo que controla cómo ciertos comportamientos son motivados a través de la recompensa y el refuerzo positivo.
El estudio revela que el cerebro opera de manera diferente durante un período particularmente enamorado, con pensamientos cotidianos centrados en la persona amada, convirtiéndose en el foco central de nuestras vidas.
“En realidad, sabemos muy poco sobre la evolución del amor romántico”, comentó Bode en un comunicado. “Se cree que el amor romántico surgió por primera vez hace unos cinco millones de años después de separarnos de nuestros antepasados, los grandes simios. Los antiguos griegos filosofaron al respecto, reconociéndolo tanto como una experiencia asombrosa como traumática. De hecho, el poema más antiguo que se ha recuperado es un poema de amor datado alrededor del 2000 a.C.”
El Dr. Kavanagh sugiere que la hormona oxitocina podría desempeñar un papel clave en los cambios dentro de la mente durante el enamoramiento. “Conocemos el papel de la oxitocina en el amor romántico, ya que experimentamos oleadas de esta hormona circulando por nuestro sistema nervioso y torrente sanguíneo cuando interactuamos con seres queridos”, explicó. “La importancia especial que adquieren los seres queridos se debe a la combinación de oxitocina con dopamina, una sustancia química liberada por el cerebro durante el amor romántico. En esencia, el amor activa vías en el cerebro asociadas con sentimientos positivos.”
Bode y Kavanagh planean ampliar su estudio, explorando como hombres y mujeres abordan el amor de manera diferente, así como los cuatro tipos distintos de parejas románticas.