Es una situación de identidad, el tipo quiere borrar todo vestigio de ser un hombre en vida pasada, como si nunca hubiera existido. Pero si existe y hay cuatro hijos de por medio que no podrá borrar nunca
Me niego a quitarme el apellido de mi exesposo aunque él se comprometió de nuevo
A menudo, cerrar un capítulo de la vida puede ser un proceso complicado, lleno de matices emocionales y decisiones difíciles. Las relaciones, incluso aquellas que terminan en buenos términos, pueden dejar tras de sí ecos del pasado que resuenan en la vida cotidiana. La transición de una vida compartida a la individualidad puede presentar desafíos inesperados, especialmente cuando hay lazos familiares que mantener. En medio de nuevas etapas, surgen dilemas sobre identidades pasadas y las dinámicas que se crean en torno a ellas, complicando el camino hacia el futuro.
“Yo (56 años, mujer) me divorcié de mi esposo hace dos años, después de 26 años de matrimonio. Tenemos cuatro hijos, y la separación fue amistosa. Él salió del clóset como gay y ambos acordamos separarnos. Cambiar mi nombre no fue una prioridad; actualizar identificaciones, documentos legales y cuentas bancarias sería un gran inconveniente. Aún utilizo su apellido en documentos oficiales, pero en lo social me hago llamar por mi apellido de soltera.
Recientemente, él se comprometió con un chico maravilloso. He apoyado su relación, pero durante la fiesta de cumpleaños de mi nieto, mi ex de repente me preguntó si consideraría dejar de usar su apellido. Su prometido intervino, diciendo que le incomoda que todavía lo use. Me sorprendió y, en un intento de aliviar la tensión, bromeé que, a menos que quisieran pasar horas haciendo fila en diversas oficinas gubernamentales, no iba a cambiarlo. Mi ex no se rio. Insistió en que se trata de comenzar un nuevo capítulo y que quiere que ’siga adelante’.”
“La situación se sintió extraña. Durante dos años, nunca había sido un problema, y ahora ellos se están uniendo contra mí. Después de la fiesta, mi ex me llamó y argumentó que mantener su apellido dificulta que su prometido sienta que están comenzando una nueva vida. Le respondí que nuestros hijos todavía usan el mismo apellido y que sería extraño para mí ser la única que no lo hace.
Lo que realmente me dolió fue enterarme por mi hijo menor que su prometido se siente amenazado por mi nombre, asumiendo que estoy aferrándome a algún reclamo sobre mi ex. He dejado claro que no tengo ningún interés en reavivar nada, pero parece que me están presionando para borrar una parte de mi identidad. Mi ex admitió que su prometido se siente incómodo porque ve que mantengo el apellido como un ’juego de poder’.”
“Siento que estoy atrapada entre intentar mantener la paz y ser forzada a hacer algo solo porque su prometido está inseguro. Quieren que pase por el inconveniente de cambiar todo por su comodidad. Le dije a mi ex que lo consideraré más adelante, tal vez después de que se casen y se establezcan. Pero ahora está furioso, diciendo que soy mezquina y egoísta.
Mis amigos creen que debería mantener mi posición, pero mis hijos están divididos: uno piensa que debería ceder para mantener la paz, mientras que el otro coincide en que es ridículo cambiarlo solo porque su prometido se siente inseguro.
Estoy frustrada. No entiendo por qué un nombre en algunos documentos legales es un gran problema, pero me están haciendo sentir como la villana. Entonces, ¿soy la mala por negarme a dejar el apellido de mi exmarido a pesar de que se va a volver a casar?”
Algunos consejos
- Reflexionar sobre su identidad: Es fundamental que la protagonista tome un tiempo para considerar lo que su apellido significa para ella. Reconocer que un nombre puede ser una parte importante de la identidad personal puede ayudarla a decidir con claridad.
- Concentrarse en la relación con sus hijos: Mantener la comunicación abierta con sus hijos y asegurarse de que entienden su decisión. Ellos pueden ser una fuente de apoyo y ayudarla a enfrentar la situación.
- No apresurarse a tomar decisiones: Darse el tiempo necesario para evaluar sus opciones. No hay prisa por cambiar su apellido y puede que sea mejor esperar hasta que la situación se asiente.
- Establecer prioridades: Considerar qué es lo más importante para ella en esta etapa de su vida. Si mantener su apellido le brinda una sensación de estabilidad y conexión con sus hijos, eso debe ser una prioridad.
- Hablar con su exesposo: Tener una conversación abierta y honesta con su exmarido sobre sus sentimientos. Intentar abordar la situación desde un lugar de comprensión mutua puede ayudar a aliviar la tensión.
- Considerar la evolución de la relación: Reconocer que, aunque su exmarido está formando una nueva vida, eso no invalida su propia experiencia ni su historia compartida.
Comentarios
Normal y típico de personas homosexuales, se sienten amenazados y se deprimen de cualquier cosa que nos sea de su capricho