No avisa ni duele: cómo algo común podría dañar tu hígado sin que lo notes y cómo evitarlo

Curiosidades
hace 3 horas
No avisa ni duele: cómo algo común podría dañar tu hígado sin que lo notes y cómo evitarlo

La enfermedad del hígado graso es una afección común que, en muchas ocasiones, puede pasar desapercibida. En ocasiones, puede que no cause síntomas visibles ni dolor y tiene el potencial de afectar tu bienestar a largo plazo. Para cuidar tu salud de forma sencilla y consciente, es esencial conocer cómo se desarrolla y cuáles son los hábitos que ayudan a prevenirlo.

El contenido proporcionado es solo para fines informativos y no pretende sustituir el consejo, diagnóstico ni tratamiento médico profesional. Siempre consulte a su médico u otro profesional de la salud calificado si tiene alguna pregunta sobre una afección médica.

¿Qué es y en qué consiste el hígado graso?

AI-generated image

El hígado graso es la acumulación excesiva de grasa en el hígado y se ha convertido en la causa más frecuente de enfermedad hepática crónica a nivel global. En su fase inicial, esta enfermedad es silenciosa; la mayoría de las personas no presenta síntomas, lo que la hace extremadamente peligrosa. En ocasiones, las únicas señales son un ligero dolor en la zona superior del abdomen derecho, una sutil sensación de fatiga o malestar general.

Sin embargo, estos síntomas pueden relacionarse fácilmente con otras causas. Por lo que, frecuentemente, el diagnóstico se realiza cuando se detectan en análisis ordinarios o en una ecografía abdominal concentraciones altas de enzimas hepáticas.

Un estudio elaborado por la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición, muestra que la prevalencia es preocupante: con porcentajes aún más altos en personas con diabetes tipo 2 u obesidad.

Relación directa con el estilo de vida y factores de riesgo

AI-generated image

El hígado graso está estrechamente vinculado a la resistencia a la insulina, que es el impulsor del síndrome metabólico. La acumulación de grasa en el hígado ocurre por una alimentación abundante en grasas saturadas carbohidratos refinados, así como por un déficit significativo de actividad física. Los factores de riesgo más importantes son:

  • Obesidad: En especial, la acumulación de grasa visceral.
  • Diabetes tipo 2: Más del 70% de los enfermos de esta enfermedad también presentan hígado graso.
  • Dislipidemia: Triglicéridos elevados o colesterol HDL bajo.
  • Hipertensión.

La noticia positiva es que la enfermedad del hígado graso es reversible en sus etapas de esteatosis simple.

Cómo podría revertirse el hígado graso

AI-generated image

En la actualidad, para tratar el hígado graso de manera más efectiva, se requiere un cambio estricto en el estilo de vida. El propósito es doble: perder peso y aumentar la sensibilidad a la insulina.

  • Disminución gradual de peso: Perder tan solo entre el 3% y el 5% del peso corporal puede reducir significativamente la grasa hepática. Los doctores sugieren una disminución de peso más significativa, entre el 7% y el 10%, alcanzada progresivamente durante un año para revertir la fibrosis y la inflamación.
  • Dieta antiinflamatoria: La dieta debe enfocarse en consumir pocos carbohidratos refinados y azúcares añadidos (en particular fructosa), mientras se limita la ingesta de grasas saturadas. Se recomienda encarecidamente la dieta mediterránea por sus efectos protectores.
  • Ejercicio regular: La actividad física de intensidad moderada, como nadar o caminar rápido, realizada por lo menos 150 minutos a la semana, contribuye a que la sensibilidad a la insulina se incremente.
  • Control de comorbilidades: Es crucial controlar y tratar la hipertensión, el colesterol elevado y la diabetes, porque pueden ser factores de riesgo o causantes directos de las enfermedades del hígado.

¿Qué medidas tomas para llevar una vida saludable? ¿Por qué crees que es importante hacer ejercicio cuidar tu dieta?

Imagen de portada AI-generated image, AI-generated image

Comentarios

Recibir notificaciones

La comida grasosa y los carbs son tan ricos, creo que como un gusto una que otra vez no estaría mal. Siempre dar prioridad a comidas sanas sin ser extremo es la clave.

-
-
Responder

Lecturas relacionadas