Pedro Pascal aún honra al “amor de su vida”, aunque partió hace 23 años

El actor de origen chileno, Pedro Pascal, ha alcanzado gran fama por sus recientes papeles en series como Narcos, The Mandalorian y The Last of us. Y aunque tiene grandes cualidades actorales, buena parte de su éxito se lo atribuye a su mamá y a su memoria. Ella partió hace años, cuando Pedro era joven, pero él no deja de recordarla y dedicarle todo lo que hace.

Pedro nació en Chile, justo en los años en que había problemas políticos. Sus padres, José Balmaceda y Verónica Pascal, decidieron llevar al pequeño Pedro y a su hermana mayor fuera del país. Así fue que terminaron en los Estados Unidos y se instalaron en San Antonio, Texas.

Ahí fue donde su papá le inculcó el amor por el cine. Pascal recuerda que soñaba con ser Christian Bale en el póster de la película Imperio del Sol.

Verónica, su madre, contribuyó a esta fascinación por la actuación y lo inscribió en la escuela de artes de su localidad.

“Mi mamá y mi licencia de conducir me salvaron”, refirió su prima que dijo Pedro a una revista. Un amigo de su madre sufrió un pequeño accidente y, como no pudo ir, le dio a Pedro sus boletos para ver la obra Angels in America. Tras ver el drama, Pedro sintió por primera vez que actuar era más que un hobby: la interpretación podía ser su vida.

Después dejó San Antonio para inscribirse en la Escuela de Artes Tisch de la Universidad de Nueva York. Gracias a eso pudo obtener pequeños papeles en varias series de TV. Apareció en Undressed de MTV y tuvo una breve participación en la cuarta temporada de Buffy, la cazavampiros. El actor aparecía en estos programas con el crédito de Pedro Balmaceda.

Pero un trágico suceso lo cambiaría todo.

En el año 2000, cuando Pedro tenía 24 años de edad, su mamá falleció repentinamente en circunstancias muy impactantes.

En una entrevista, el actor se sinceró: “Las circunstancias de la muerte de mi madre hicieron que nos resultara muy difícil recordarla como la persona que era”. Continuó: “Duele mucho. A veces siento angustia y trato de afrontarlo de la mejor manera posible porque sé que mi madre no querría que lo hiciera de otra manera”.

“Ella fue el amor de mi vida. Pienso en ella todos los días. No rezo, así que no puedo decir que tengo una práctica religiosa para sentirme cerca de ella, pero vivo para ella, aunque se haya ido”, confesó el actor.

Además, compartió: “Perder a la persona más importante de tu vida, descubrir que algo así es posible y que lo que más temes en la vida puede suceder, es un momento inexplicable y permanente. Hay un antes y un después de su muerte”.

Pedro reflejó esto al cambiarse el apellido: a partir de la muerte de su madre decidió usar el apellido materno. Además, estaba contento con el cambio porque era más sencillo decir “Pascal” que “Balmaceda”, que es difícil de decir para muchos estadounidenses.

Su carrera se ralentizó por algunos años, fue encasillado en roles masculinos latinos menores y estereotipados, como pandillero y traficante de drogas. Pero en 2014, después de 15 años de interpretar papeles secundarios en cine y televisión, su gran papel como el Príncipe Oberyn Martell en la temporada 4 de la serie Game of Thrones lo lanzó al estrellato. Así, llegarían los papeles que le darían un alcance global y mediático sin precedentes.

Después llegaron los papeles protagónicos en series de gran impacto como Narcos, The Mandalorian y más recientemente The last of us. Su fama lo ha colocado como el “papi” preferido de internet.

Sin embargo, la fama no lo ha alejado de su familia e incluso acepta que se ha vuelto extremadamente sobreprotector con los suyos. “Podría tener que ver con el hecho de que no tengo mi propia familia, y que mis hermanos y mi familia elegida son donde invierto toda mi energía emocional”, explicó Pascal.

Pedro ha dicho que la reciente atención mundial que ha tenido, lo ha ayudado a darse cuenta de que todavía está en comunicación con su madre. Explicó que habló con ella recientemente, mientras se preparaba para presentar Saturday Night Live.

“Estaba tan asustado esa semana que me puse a hablar con ella”, dijo. Después de los ensayos en los días previos al espectáculo, agregó: “Estaba ese terror esperándome, ese miedo de fallar frente al mundo. Y luego hablé con ella, y fue realmente reconfortante”.

Cuando se le preguntó qué dijo, Pascal respondió: “Te amo. Te extraño. Gracias. Tengo miedo. Me encantaría que me ayudaras a creer en mí mismo, porque sé que lo haces”.

Pedro Pascal es solo uno de los nuevos latinos que están conquistando Hollywood, también tenemos a actores como Ana de Armas, Eugenio Derbez y directores como Guillermo del Toro que ponen el nombre de los latinos muy alto en todo el mundo.