Solo me gustó el del bajo de los pantalones
10 “Hacks” de ropa son puestos a prueba y los desmentimos o los confirmamos
Los trucos, más conocidos en las redes por su nombre en inglés, hacks, son formas de hacer las cosas que en principio nos ahorran tiempo o nos facilitan las tareas. Pero no siempre es así. Hay muchos falsos trucos dando vueltas por internet, a veces más complicados incluso que los métodos tradicionales y con resultados que dejan mucho que desear.
En Genial.guru somos fans de la veracidad, así que pusimos a prueba algunos de los hacks de moda más populares y aquí te contamos qué resultados obtuvimos.
1. Ajustar la cintura de un pantalón sin cinturón
Este es un truco genial para sacarte de un apuro. Llegó el frío y por fin sacaste la ropa de invierno, te pusiste ese pantalón que tanto te gustaba y te quedaba tan bien, pero resulta que ahora, a medio camino al trabajo, te das cuenta de que se te cae y no es nada cómodo tener que estar subiéndotelo a cada minuto.
Esto se puede arreglar con ayuda de un cordón, cuerda, cinta, hilo, o lo que tengas a mano. Se ajusta por detrás, pasando el cordón por las presillas traseras y así no se nota nada por delante. Simple, rápido y efectivo.
Puntuación: 10/10
2. Adaptar un brasier a una camiseta de un solo hombro
Este truco deja mucho que desear; se trata de conseguir un brasier de un solo tirante para poder lucir uno de los hombros totalmente al descubierto. Como se puede ver en la imagen, el resultado es muy malo y sumamente incómodo.
Por más que el tirante que acaba debajo del brazo esté lo más estirado posible, sigue siendo muy pequeño y se incrusta en la piel. Además de ser muy molesto, luego de varias horas de llevarlo así, lo más probable es que acabe dañando la piel por la presión y el roce.
Puntuación: 1/10
3. Acortar el largo de un pantalón sin costuras
No fue fascinante el resultado de este hack, pero tampoco estuvo mal y, depende en qué situación, podría llegar a ser útil. En teoría, se trata de poner una liga de cabello en cada tobillo y meter la tela del pantalón dentro para reducir su largo, dándole un efecto “oriental”, al mejor estilo de Aladdín.
Más corto quedó, pero como se supone que debería quedar, no. Va bien para recogerse los pantalones si los estamos arrastrando, pero desde luego que para salir a la calle o para ir a hacer deporte con ellos así, no.
Puntuación: 4/10
4. Convertir un top común en uno de espalda abierta
Un cambio de estilo a coste cero nunca viene mal. Este sencillo truco promete un top femenino de espalda abierta, y hay que decir que cumple totalmente con lo que ofrece.
Se trata simplemente de pasar un cordón o una cinta por todas las aberturas del top y vestirlo sin meternos dentro. Toda la tela va al frente de nuestro cuerpo, y se ajusta con la cuerda por detrás. Para que quede perfecto, lo ideal sería que lo que se use para amarrarlo atrás y la camiseta sean del mismo color.
Puntuación: 10/10
5. Forma “correcta” de doblar el bajo de los vaqueros
No teníamos ni idea de que hubiera una forma correcta y otra incorrecta de doblar el bajo de los pantalones. Lo que sí sabemos, después de haber probado ambas, es que tanto la forma habitual de hacerlo como la “correcta” cumplen la misma función y son igual de prácticas.
La dificultad para hacerlas y el tiempo que requieren también es el mismo, la única diferencia real que hay es estética, con lo cual, que cada quien doble el bajo de sus pantalones como le plazca, ya sea correcta o incorrectamente.
Puntuación: 7/10
6. Achicar o agrandar un cierre con un gancho de forma exprés
Mover un botón de ojal es muy sencillo y toma apenas minutos, pero los botones de los jeans o los cierres metálicos son otra historia. Este truco es justamente para solucionar de manera provisoria los problemas con los segundos rápidamente.
Consiste en utilizar un segurito o alfiler de gancho para crear un nuevo lugar donde enganchar, ya sea para achicarlo o para agrandarlo, como en el caso de la imagen. Simplemente se coloca el segurito en paralelo al cierre antiguo y se cierra el otro en él.
Puntuación: 10/10
7. Adaptar un brasier normal a una espalda con escote
Efectivamente, con este hack el sostén se adapta perfectamente a una espalda con escote; solo hay un problema, que pierde totalmente sus cualidades de sujeción, ya que las tiras de los hombros no tienen ni la misma fuerza ni el mismo agarre que las de la espalda.
Quizás con una talla más pequeña o con un busto que requiera menos sujeción podría funcionar, pero con una muestra de la talla 90 no lo hemos conseguido. Por otro lado, un pecho pequeño, firme y que no requiera sujeción podría directamente no usar sujetador para lucir una espalda con escote, así que en general este truco no tiene mucho sentido.
Puntuación: 1/10
8. Bolerito usando una camisa al revés
Sería interesante saber quién creó este hack o cómo lo hizo, quizás un día alguien por error se puso mal la camisa y al ver el resultado, pensó: “Oh, mira, no queda nada mal, parece un bolerito”, y lo puso de moda en las redes sociales.
Sea como fuere, se trata de ponerse una camisa dándole la vuelta y dejando el cuello hacia abajo al meter los brazos. Realmente no es un truco con un sentido útil en sí, es solo una forma de darle un toque diferente a cualquier conjunto.
Puntuación: 6/10
9. Nudos para los pantalones de ajuste automático
Se realiza un nudito en cada cordón introduciendo en medio de cada nudito el cordón del otro lado; de esta manera, al tirar de los extremos de los cordones, estos se aprietan solos. Valorar este hack ha sido complicado, ya que tiene pros y contras por igual.
Por un lado queda muy bien y es sencillo de hacer, pero al mismo tiempo es incómodo, porque el cierre ajustable tiene un tope que hace que los cordones no den de sí lo suficiente para pasar el pantalón por la cadera a la hora de ponerlo y sacarlo.
Puntuación: 5/10
10. Convertir un top largo en uno corto
Este es otro de esos trucos cuyos resultados son más estéticos que funcionales. En este caso, la idea es convertir un top normal en uno corto de una forma “discreta”, aunque realmente se notará que el top en sí no es corto.
Se consigue poniéndonos la camiseta tanto del revés (la parte de dentro hacia afuera) como patas arriba (con las tiras para los brazos en la cadera) y el brasier por encima de la camiseta para que no se caiga, luego metemos los brazos de forma normal e igualamos por todo el bajo el doblez inferior.
Puntuación: 8/10
¿Qué otro hack de moda has probado? Cuéntanos qué tal te ha ido con él.
Comentarios
Algunos los desconocía
Voy a intentar algunos
Buenísimo truco el 6