Qué pasaría si vivieras en un mundo de cabeza
Te pones tu traje y te diriges al laboratorio. ¡Pero no tan rápido! Primero, te colocas un arnés y te fijas a los cables industriales para moverte de un lugar a otro. Este mundo en el que vives está de cabeza, con una inmensidad infinita de espacio bajo tus pies. Y justo encima de ti hay una capa sólida y gruesa de roca y tierra.
Cuenta la leyenda que el mundo cambió lentamente y la gente tuvo que adaptarse. Piensa en murciélagos en una cueva, solo que las personas no pueden volar ni agarrarse al techo. Las plantas están bien y crecen al revés sin ningún problema, por lo que hay cultivos, frutas y verduras para alimentar a todos. Y el agua se extrae de depósitos profundos del suelo: hay un océano entero de agua dulce justo encima de tu cabeza.
Tu casa, como la de todos los demás, está atornillada a la superficie sólida encima de ti. Por lo tanto, en el interior puedes caminar fácilmente por tu casa sin ninguno de esos cables y arneses. Pero, en el mundo exterior, caerías a las profundidades de lo desconocido si no estuvieras asegurado. Y después de tantos años de arduo trabajo, investigación y pruebas, finalmente estás listo para hablar con el comité científico y de ingeniería sobre el trabajo de tu vida. Estás a punto de revelar tus próximos grandes inventos que pueden revolucionar la forma en que las personas se mueven. ¡Ya no tendrán que depender del arnés y de las cadenas!
Estás tan emocionado que casi sales de tu casa sin el arnés. Ups. Te lo pones y abres la puerta principal. Tu porche está asegurado con una barandilla para que no te resbales y te caigas accidentalmente. Y la vista es magnífica. Hay un panorama de toda la ciudad frente a ti. Justo en el borde de tu porche hay un cable de seguridad conectado al mundo exterior con un sofisticado sistema de red.
Te lo abrochas y te pones en camino. El sistema de cable se engancha en la superficie sólida y tiene un sistema de barandillas automático como un tren colgante. Abres una tablet en el puerto de acoplamiento del cable, presionas el destino guardado al que deseas ir ¡y listo! El cable te eleva y te mueve. Todos tienen su cable personal y su base para llevarlos a cualquier destino que deseen.
Te diriges al laboratorio columpiándote junto a otras personas. Todos te saludan con un gesto. Te despertaste bastante tarde y no tuviste tiempo para desayunar. Abres la tablet incorporada y eliges la cafetería más cercana. El sistema se desvía y te estaciona donde puede en la estación de acoplamiento. Por suerte no es una hora congestionada, o no habría ningún lugar donde aterrizar. Te quitas el cinturón y entras.
Todos aquí están sin cables, sentados y tomando su café de la mañana. Pides un café y un bagel para llevar. Te acostumbraste bastante a comer y beber mientras estás enganchado a tu cable, viajando a través del espacio vacío debajo de ti. Justo al lado hay un tren colgante para aquellos que no tienen ganas de estar sujetos al cable, o para aquellos cuyos cables necesitan reparación.
Vuelves afuera y te apresuras al laboratorio. Por suerte, en este mundo apenas hay embotellamientos. Cada red de cable es única y está perfectamente trazada, así que es imposible atascarse. Y el sistema está diseñado con sensores especiales que permiten evitar colisiones, así que hasta puedes dormir mientras viajas. Pero en tu caso, solo estás comiendo tu bagel y bebiendo el café.
De repente, tu cable se detiene. Te salpicas un poco de café en el abrigo y miras a tu alrededor, molesto. Tú y todos los demás están flotando en el aire. Todos están suspendidos de sus cables, mirando a su alrededor igual que tú. Entonces, comienza el pánico. Esto nunca había sucedido en la historia. Miras la tablet para ver qué salió mal, pero se volvió loca. Intentas llamar a mantenimiento, pero las redes están bloqueadas.
Como eres uno de los científicos que ideó todo este sistema, puedes anularlo y desplazarte hasta el laboratorio. Pasas junto a personas en shock y les haces señas con las manos para indicarles que todo va a estar bien. Llegas al laboratorio para descubrir que es el único lugar que tiene energía. Te desabrochas y corres al departamento de informática. Algo anda mal. Parece que no hay nadie alrededor. Es si lo hubieran abandonado, y no hace mucho.
Exploras el edificio y tratas de encontrar a alguien que pueda saber algo. Este lugar es la instalación de más alta tecnología de la zona. Pero nada. ¿Es una coincidencia? El día en que estás a punto de anunciar tu revolucionario invento, se detienen todas las redes de cable. Tienes trabajo de detective que hacer. Miras a tu alrededor en busca de pistas y ves algunas de las computadoras desactivadas. Normalmente, siempre están encendidas, a menos que los generadores de respaldo estén apagados.
Te diriges al sótano, que técnicamente está incrustado en la superficie sólida de arriba, solo para descubrir que alguien apagó los generadores. Tú y tu equipo los construyeron, por lo que sabes que es imposible que los respaldos estén apagados a menos que alguien los manipule. ¡Y acabas de encontrar tu primera pista! Unos lentes que pertenecen a tu compañero de trabajo.
Enciendes los generadores nuevamente y regresas al departamento de informática. Revisas todos los monitores que vigilan la ciudad. Nada parece funcionar fuera del laboratorio. Pero tu vista de águila detecta algo. De repente, ves algunos cables moviéndose en los límites de la ciudad. Más allá hay kilómetros y kilómetros de tierras deshabitadas que son inaccesibles por cables. Pero ves gente atracar en lo que parece una nave espacial.
¡Espera un minuto! ¡Esa fue tu idea! Estabas a punto de presentar un prototipo de vehículo volador. Y eso no es todo. Estas misteriosas figuras parecen llevar algo así como zapatos cohete con un agarre similar al de un gecko en la parte inferior para caminar boca abajo. Lo habías llamado proyecto Murciélago. Robaron tus ideas y se escaparon. ¿Pero por qué?
Corres hacia tu cable y te diriges allí a toda velocidad. Pasas junto a decenas de personas que aún siguen atascadas. Avanzas tan rápido como te permite el sistema y llegas justo a tiempo; los ladrones aún no se han ido. ¡Y resultan ser los miembros del comité a los que estabas a punto de presentar la idea! Los confrontas y te dicen que apagaron toda la ciudad como una distracción para que nadie los persiguiera. Quieren tomar el primer prototipo del futuro y venderlo en otra ciudad. Luego, harán que parezca que alguien lo robó durante el apagón. Tener esta nueva tecnología no sería rentable frente al sistema ya construido que estaba generando toneladas de efectivo.
Intentas razonar con ellos para que devuelvan el prototipo y restauren la energía. Pero se ríen en tu cara y se niegan. Mientras suben con dificultades a la nave prototipo, suspiras, sacudes la cabeza con frustración y presionas el botón de transmisión en tu tablet. Las tablets de todo el mundo se encienden, incluidas las de los miembros del comité. Grabaste la conversación en secreto, y ahora todos en la ciudad pueden verla y escucharla. La conmoción en los rostros del comité se convierte en horror. Al no tener otra opción, se entregan y restauran el poder.
Te levantas, te vistes y tomas tu arnés. Lo miras por un momento y vuelves a guardarlo en el estante. Luego te pones los zapatos especiales y te diriges a tu máquina flotante personal que te llevará al trabajo. Después del escándalo del año pasado, fuiste elegido jefe de tecnología, y ahora supervisas el desarrollo tecnológico. La gente te ama y respeta aún más que antes. Vas volando hacia la oficina, mientras la mayoría de la población aún se adapta a la nueva forma de moverse. Algunas personas todavía usan cables y arneses, pero solo como respaldo en caso de que algo como ese incidente vuelva a suceder.
Se ha integrado y aplicado un mapeo completamente nuevo para crear una red de tránsito altamente organizada. Cuando llegas al trabajo, te llevan de urgencia a la sala de conferencias para ver el último gran descubrimiento que ha hecho tu equipo. Te sientas en una silla con una pantalla enorme frente a ti.
No puedes entender qué estás viendo; está completamente oscuro y hay un foco de luz al frente. Entonces, el foco de luz ilumina algunos trastos y otras cosas esparcidas por todas partes. Son las cosas que pertenecían a tu mundo y que cayeron al vacío. Descubrieron que hay tierra debajo de la inmensidad del espacio. El dron aterriza en la superficie sólida e ilumina lo que parece una cueva. Se trata de un dron con patas extensibles y similares a las de una araña. Camina hasta la boca de la cueva. Del otro lado hay un mundo completamente nuevo. Árboles y plantas hasta donde alcanza la vista. Todos en la sala celebran, incluyéndote a ti. Preparas a todos para la siguiente fase de la misión: llegar a esta nueva tierra.