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En uno de los surrealistas errores burocráticos de España, un funcionario consiguió pasar desapercibido por presuntamente faltar al trabajo durante al menos seis años, hasta que los funcionarios municipales intentaron concederle un premio. Lo que siguió fue un proceso judicial, una cuantiosa multa y la revelación de que el hombre podría haber pasado su tiempo no ocioso, sino inmerso en la filosofía de un pensador del siglo XVII.
Un hombre ha sido multado con el sueldo de un año entero tras descubrirse que no acudió a su puesto de trabajo durante al menos seis años, según los informes.
Joaquín García, de 69 años, ocupaba el puesto de ingeniero supervisor en la Junta Municipal de Aguas de España. Sin embargo, al final de su carrera dejó de asistir al trabajo. El tribunal determinó que García no había puesto un pie en su oficina durante los últimos seis años de su empleo y no realizó ningún trabajo entre 2007 y 2010.
Ahora jubilado, el Sr. García afirmó que había sido maltratado en el trabajo y que, como castigo, lo enviaron a realizar un trabajo para el que no estaba contratado. Pero cuando llegó, descubrió que no había ningún trabajo esperándole.
En lugar de plantear su preocupación, temiendo que pudiera afectar a sus perspectivas laborales, optó por abandonar el trabajo en silencio, llevando al extremo el “abandono silencioso” y dejando de trabajar por completo.
Mientras tanto, la confusión entre departamentos hizo que su ausencia pasara desapercibida: la Junta del Agua asumió que estaba bajo la supervisión del Ayuntamiento, mientras que el Ayuntamiento creía que dependía de la Junta del Agua.
El teniente de alcalde, que había contratado originalmente a García, solo descubrió su larga ausencia cuando el ayuntamiento se disponía a honrarle con una medalla por 20 años de servicio. “Todavía estaba en nómina”, recuerda el teniente de alcalde Jorge Blas Fernández. “Pensé: ¿dónde está este hombre? ¿Sigue ahí? ¿Se ha jubilado?”.
En cuanto a cómo pasaba su tiempo libre, los informes dicen que se convirtió en “un ávido lector de filosofía” y se especializó en las obras de Spinoza.
Así que, en lugar de recibir una mención de honor, García se enfrenta ahora a una multa de 30 000 dólares, el equivalente neto de un año de salario.
Los lugares de trabajo pueden ser impredecibles, llenos de momentos inesperados y encuentros extraños que no creerías a menos que los vieras tú mismo. Los compañeros de trabajo pueden hacer que el ambiente sea más divertido, pero también un tic nervioso con algunas de sus bromas. Mientras tanto, aquí van algunos candidatos que se quedaron atónitos con las preguntas que les hicieron los entrevistadores.