Un texto sincero sobre cómo se puede lucir mal hasta con ropa lujosa y quedar como una reina con prendas de centro comercial
De cada esquina oímos consejos de “cómo lucir lujoso y con estilo”. Tratando de estar a la altura, algunas personas se gastan la mitad de su sueldo en ropa, mientras que otras simplemente se compran falsificaciones. Y aun así, a veces, no nos sentimos seguros de sí mismos, incluso vistiendo las prendas de marcas de lujo.
Me llamo María y toda mi vida he intentado fingir que mi ropa es más cara de lo que realmente es. Al cumplir los 30 años, mi punto de vista ha cambiado. Voy a contar por qué las marcas y las etiquetas de alto perfil ahora no significan nada para mí y que es posible también lucir con estilo con prendas sencillas.
Vestirse con ropa cara no significa tener una imagen lujosa
Desde mi infancia, mi madre nos ha enseñado que la ropa no tiene por qué ser cara. Lo más importante es que las prendas estén limpias, bien planchadas y que se ajusten adecuadamente a la figura. Al crecer, muchas personas olvidaron estas sencillas reglas y se empeñaron a comprar cosas de marcas famosas.
Es una trampa en la que yo también me he caído. Con mi modesto sueldo ahorraba diligentemente para comprar zapatos de lujo, así como caros suéteres de cachemira. Sin embargo, por mucho que lo intentara, incluso con las prendas costosas, no me veía del todo bien. Además, estas cosas no hacían juego, no quedaban bien entre sí. Volvía a actualizar mi vestuario básico, prometiéndome a mí misma que el próximo año, definitivamente, gastaría en algo que podría darle un toque especial a mi imagen. Pero llegaba el año nuevo y no tenía presupuesto para un bolso llamativo, porque tenía que comprarme botas y hacer remodelaciones en mi cuarto de baño.
Entonces empecé a buscar maneras de lucir más “de lujo” gastando el mismo dinero. En las redes sociales aconsejaban comprar falsificaciones, usar accesorios y visitar a un estilista. Pero nada me ha funcionado.
Por ejemplo, intenté llevar una combinación que a primera vista, parecía perfecta: unos jeans azules y una playera blanca. Pero hasta estas prendas tan sencillas deben elegirse correctamente. La playera debe tener una longitud determinada y no ser demasiado ajustada. Y el pantalón de mezclilla también debe ser del estilo actual. Escoger la ropa adecuada era difícil, le dedicaba mucho tiempo y esfuerzo, por lo que acababa agotada.
Para que tu imagen luzca más armoniosa, enriquece tu experiencia visual
Más tarde me di cuenta de que enriquecer mi experiencia visual y estar al tanto de las tendencias y las combinaciones me ayudaría a lucir de primera. Esta habilidad se adquiere gradualmente y se puede desarrollar. Pero ahora entiendo en qué consistía mi error. Por ejemplo, veamos los atuendos de Kate Middleton. En la foto de arriba lleva una chaqueta de Zara. La duquesa viste prendas del mercado masivo, pero tiene un aspecto digno, adecuado a su estatus. Así que lucir como una celebridad, un miembro de la familia real, la esposa de un hombre rico o como una empresaria de éxito no tiene nada que ver con las prendas en sí.
He analizado los conjuntos de Kate, los looks de las famosas, he leído muchos consejos de estilistas y me he dado cuenta de que la imagen depende mucho de los pequeños detalles. Es mejor que el peinado bien hecho parezca un poco descuidado. Y no está bien que se vea que le has dedicado medio día.
Los pequeños detalles pueden ayudarte a lucir de primera
Tomemos como ejemplo a Marilyn Monroe vistiendo un saco de patatas. Incluso con esta “prenda” se ve muy de lujo. Para que una cosa barata parezca más costosa, en Internet recomiendan cambiar los botones, escoger los colores adecuados y cuidar bien la prenda.
Los suéteres de aspecto similar se ven diferentes. A la izquierda, un suéter demasiado ajustado y de longitud indeterminada. A la derecha, su corte inusual, el volumen y la lana natural hacen que el look se vea más interesante.
He aprendido a prestar atención al material. Los sintéticos “abaratan” el aspecto, aunque los hay de todo tipo. Es necesario elegir la ropa interior, preferiblemente sin costuras, que no se vea a través de las prendas que llevas encima. Otra manera de lucir más elegante es llevar los tops y las blusas metidos por dentro en lugar de sueltos.
Creo que estos consejos funcionan, pero aun así no te ayudarán a aparentar una multimillonaria. Porque no se trata del precio de las cosas, sino de cómo quedan y cómo te presentas a ti misma.
No gastes dinero en cosas y accesorios que son difíciles y costosos de cuidar
Mucha gente sabe que los tejidos caros, como la cachemira, por ejemplo, requieren de un cuidado especial. De lo contrario, se convierten rápidamente en un trapo deformado. Lo mismo ocurre con la apariencia. Teñirse de rubia, por ejemplo, y mantener ese color en el estado perfecto es algo que cuesta mucho. Tienes que asegurarte de que el color se mantenga vivo, que no se vean las raíces crecidas y que el cabello no parezca una peluca. Si no tienes tiempo ni energía para conseguirlo, es mejor que evites este “color problemático”.
Además, el esmalte de las uñas que se ha caído y las pestañas postizas a medio caer son detalles llamativos. Un color de uñas neutro no es la solución: la cutícula vuelve a crecer y se ve descuidada.
Creo que es más fácil renunciar a las extensiones de pestañas si tus ojos solo se ven bien durante dos semanas y luego tienes que andar con las pestañas raras durante, por lo menos, otras dos semanas.
Se necesita mucho esfuerzo para crear algo impresionante con una cosa mediocre
Una prenda barata, hecha con un tejido de baja calidad, se estropea rápido, por mucho que la cuides. He aprendido que es muy difícil crear algo bonito de la nada. El ojo entrenado puede detectar, de un solo vistazo, cuánto vale una cosa. Así que, aunque te esfuerces, con un presupuesto limitado no podrás permitirte mucho. A no ser que compres ropa de segunda mano. También puedes revisar las ventas en las redes sociales, prestar atención a las salas de exposición y a las marcas locales.
“Me confeccioné un vestido de novia, inspirándome en las obras de Dior”.
Algunos artesanos pueden incluso hacer algo que te deje boquiabierto (como la foto de arriba). El vestuario básico de mi amiga está compuesto en un 70 % por prendas confeccionadas en nuestra ciudad. Creo que le queda mucho mejor la ropa sencilla, de calidad y bonita, que las falsificaciones con enormes letras de Louis Vuitton en el lugar más visible.
Otra conocida mía persigue la “moda rápida” y compra zapatos baratos. Este calzado se rompe rápidamente, le provoca ampollas y sus pies no respiran bien adentro. Creo que es mejor comprar zapatos de cuero caros y usarlos durante al menos tres años.
Comprar falsificaciones no es la solución
Ahora se puede encontrar falsificaciones para todos los gustos y presupuestos. Algunas de ellas tienen un aspecto francamente barato, mientras que otras son casi indistinguibles del original. Sin embargo, aunque la copia sea cara, es probable que la gente de tu entorno sepa que es una falsificación.
Hay muchas maneras de detectar una falsificación. Lo primero que hay que hacer es prestar atención a las costuras, la calidad de la cremallera y de los accesorios, inspeccionar el logotipo y su ubicación. El embalaje (la caja, la bolsa y otros accesorios) también puede decir mucho sobre el producto.
De todos modos, tus amigos y conocidos tendrán una idea aproximada de cuánto ganas al mes. Por lo que pueden suponer que un bolso original de 200 USD es un gasto inasequible para ti. Una vez, me compré un bolso que no se distinguía del original, si no lo miraras con lupa. Lo llevé al trabajo para presumir, pero una colega desde la puerta me dijo que era falso. Ante mi muda pregunta y una sonrisa culpable, se rio con ironía y se limitó a explicar que había visto mis nóminas.
Aunque los extraños a mi alrededor sí podrían caer en el engaño. Pero, en mi opinión, tratar de impresionar a la gente desconocida que me rodea es lo mismo que golpear el agua con un palo. Es inútil.
Por qué todo el mundo quiere lucir “de lujo”
Tener un aspecto de primera no significa llevar solo las prendas más modernas de las últimas colecciones. Puedes lucir elegante con cualquier estilo. Sin embargo, la ropa es nuestra “tarjeta de visita”. Cada uno decide por sí mismo cómo vestirse y presentarse en sociedad. Pero no olvides las reglas de mi madre que mencioné al principio de este artículo. Una prenda puede tener cualquier precio, siempre que esté limpia y te quede bien.
¿Cómo eliges tu vestuario? ¿Dónde compras la ropa y los zapatos?