Una mamá se defiende al ser criticada por dormir junto a sus hijos de 10 y 12 años
Hay muchas cosas que uno deja de hacer cuando se vuelve grande. Entre ellas, dormir con tus padres. Cuando eres bebé es normal, y cuando eres niño y tienes pesadillas o te asustan los truenos, uno puede volver a los brazos de mamá y papá para poder dormir a gusto y seguro. Pero, ¿cuándo deja de ser normal? Una mamá de Liverpool parece pensar en seguir esa tendencia hasta que sus hijos se vayan de casa.
El colecho se da cuando los bebés duermen con los padres. Y, generalmente, suelen practicarlo familias con niños pequeños. Es raro que se haga con adolescentes y/o adultos. Sin embargo, una mujer de Reino Unido, Bernie, que vive actualmente en Granada, España, parece pensar que la edad máxima para el colecho es una tontería, y ella sigue practicándolo con sus dos hijos, Frankie, de 10 años, y Caden, de 12.
La mujer, de 49 años, comenta que ambos hijos tienen sus camas propias, así como habitaciones. Sin embargo, los hijos prefieren ir a dormir con su madre. Ella dijo: “Siempre hemos estado juntos en una cama, desde que eran recién nacidos, y no quería dejarlos solos en una habitación diferente. Ellos pueden parar cuando quieran, pero siempre han preferido dormir conmigo”.
Bernie considera el colecho, aun a esas edades, algo muy natural. Su familia de tres es muy cariñosa y dormir por la noche es una parte encantadora de sus días. Normalmente no comen ni cenan juntos, entonces, la hora de dormir es su momento para estar en compañía, abrazarse y hablar de cualquier cosa.
Hay personas que indican que hacer colecho puede hacer que la conexión que uno tenga con los hijos sea mayor. Es lo que Bernie cuenta que tiene con sus hijos, ya que logra hablar sin tabúes de cosas en un momento de confianza.
Bernie defiende su postura. Ella dijo: “La gente me dice que mis hijos serán pegajosos y dependientes si seguíamos compartiendo, pero son todo lo contrario”. Ella ha practicado el colecho desde que sus hijos nacieron, puesto que se le hacía mal dejar a un bebé recién nacido en otro cuarto.
Al compartir que hacía colecho con sus hijos de 10 y 12 años, muchas personas comenzaron a criticarla. Ella respondió: “Puedo entender por qué la gente dice que es raro, porque no es la norma. Creo que todo el mundo tiene derecho a tener su propia opinión”. También mencionó que el vínculo que han desarrollado los hermanos es fuerte y considera que es debido a que duermen juntos.
Su cercanía y buena relación se la atribuye al colecho. Ella comentó: “Para nosotros, es lo más normal del mundo y ninguno de nosotros quiere cambiar. Desearía que otras personas no hicieran comentarios ni pusieran barreras al colecho: la gente hace un juicio automático. Es la razón por la que tenemos un vínculo tan estrecho”.
Según doctores, los bebés que hacen colecho crecen con mayor autoestima, tienen menos ansiedad, se independizan antes, se comportan mejor en la escuela y, por si fuera poco, también se sienten más cómodos con el afecto. Todo esto hace que tengan menos problemas psiquiátricos.
Tal vez Bernie tiene razón, el colecho puede ser una forma de fortalecer el vínculo con los hijos. Al menos, a ellos les ha funcionado. Está claro que no es para todos, pero no se puede juzgar a una familia por mostrar su afecto y compartir los sueños en una cama king size.
Dormir con los padres puede tener beneficios cuando eres niño. Aun así, hay muchos psicólogos que alientan a que comiencen a dormir solos. Y ya es decisión de cada quien escoger lo que mejor les acomode. Entre los famosos que decidieron seguir durmiendo con sus hijos está Alicia Silverstone.