Por qué cada vez más personas prefieren tiendas de segunda mano a las boutiques de marca (Y el nivel de ingresos no tiene nada que ver)

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hace 1 año

Drew Barrymore, Zooey Deschanel y Anne Hathaway: esta es una lista incompleta de famosas que compran en tiendas de segunda mano y no se avergüenzan de mencionarlo en absoluto. Porque la cuestión aquí no pasa por no tener recursos económicos o de que a estas estrellas les importe bien poco cómo ellas se ven (todos sabemos que esto no es así). Tienen sus buenas razones para llevar ropa de segunda mano.

Guiados por los mismos argumentos, hoy cada vez más jóvenes pasan por alto las boutiques en los centros comerciales y dan preferencia a las cosas que ya han sido usadas. Hoy, Genial.guru decidió averiguar cuáles son sus motivaciones.

Razón № 1: las cosas usadas no requieren de nuevos recursos

El riego de un campo de algodón.

Según las estadísticas, para cultivar la cantidad de algodón necesaria para producir solo una camiseta, puede llegarse a necesitar 2 700 litros de agua (la misma cantidad que una persona bebería en 900 días). Ahora imagina cuántos recursos se necesitan para equipar a las tiendas de todo el mundo con camisetas, jeans y otras prendas. Como ejemplo, basta con mirar a China: allí se producen alrededor de 300 millones de pares de pantalones de mezclilla cada año.

Razón № 2: los artículos de segunda mano no necesitan embalaje

En esto, no hablamos tanto de las prendas de vestir como de artículos para el hogar y juguetes. Seguro que habrás notado que, al colocar por separado los elementos de embalaje de estos productos y los productos en sí mismos, la primera pila siempre es mucho más grande. Y la mayoría de las veces será de plástico, del que muchos de nosotros simplemente nos deshacemos depositándolo en la basura sin pensar en la contaminación ambiental que provoca.

Esta es la ventaja de los artículos usados: no son empaquetados de nuevo. Lo máximo que puede suceder: te los llevarás en una bolsa de plástico.

Razón № 3: las cosas que se venden en tiendas de segunda mano no contaminan el planeta

Las cosas que llegan a las estanterías de las tiendas de segunda mano adquieren una segunda vida, en lugar de convertirse en otro engranaje más de la rueda del problema de la basura en el mundo.

Solo es necesario pensar lo siguiente:

  • Cada año, en nuestro planeta se producen, de media, 400 mil millones de metros cuadrados de tela.

  • 60 mil millones de ellos se tiran enseguida: son pequeños retales que ya no se pueden aprovechar.

  • El resto se destina a la producción de artículos textiles, entre ellos, 80 mil millones de prendas de vestir.

  • Un tercio de estas prendas acaban en un vertedero al pasar un año.

  • Tres de cada cuatro prendas tiradas no se reciclan (como mucho, las quemarán). Y solo la cuarta acaba siendo reciclada.

Por cierto, esta es una buena razón para no tirar cosas innecesarias, sino llevarlas a tiendas de segunda mano. Por supuesto, estamos hablando de aquellas prendas que no han perdido su aspecto. El resto se puede llevar a centros especiales para su posterior reciclaje.

Razón № 4: comprar artículos usados ​​permite ahorrar en tu economía

A menudo, comprar en tiendas outlet y de segunda mano se convierte en una cacería. Entre los montones de cosas que a un comprador exigente pueden parecerle trastos, los afortunados logran encontrar prendas de marca. Y su precio puede sorprender gratamente: a menudo difiere del establecido por el fabricante en un 50-90 %.

Annie Reneau, madre de tres hijos, una vez escribió en su blog: “Mi vestido de verano favorito es encantador. Tiene flores, pero no demasiadas, la longitud correcta y gira muy bien si doy vueltas. Es ideal. Cada vez que me lo pongo, recibo un montón de cumplidos e inevitablemente al menos alguien me pregunta dónde me lo compré. “En una tienda de segunda mano”, respondo con una sonrisa. “Y por solo 4 dólares”.

Además, según Annie, logró comprar pantalones de invierno Columbia para su esposo por solo 10 USD y una cartera Aldo por 1,49 USD. Un buen ahorro, ¿verdad?

Razón № 5: no es tan peligroso como parece

El argumento principal de los contrarios a las tiendas de segunda mano es el siguiente: “No puedo llevar aquello que otro llevó antes que yo”. Sin embargo, no puedes saber cuántas personas se probaron la prenda que acabas de comprar en una tienda de marca, cómo eran estas personas y si respetaban las normas básicas de higiene.

Muchas tiendas de segunda mano desinfectan los artículos antes de colocarlos en las estanterías. Pero si tu tienda no hace esto, puedes desinfectar las compras tú mismo.

Razón № 6: es una tendencia de moda inteligente

Antes, a las revistas de moda les encantaba escribir sobre lo caros que eran los atuendos que se ponían las famosas. En los artículos salían unas cifras que a un lector normal y corriente le pudiera parecer que incluso si uno se envolviera con billetes saldría más barato.

Pero ahora, cada vez más corresponsales de revistas de moda ponen el acento en lo económico, y al mismo tiempo elegante, de un atuendo elegido por una u otra estrella.

Esto se debe a un cambio en las prioridades en el mundo de la moda. Antes se consideraba prestigioso mostrar cuánto dinero ganabas para poder permitirte una ropa tan cara. Mientras que ahora las personas muestran su inteligencia gastando con sabiduría y luciendo impresionantes con prendas económicas.

Como dijo una vez Zooey Deschanel a los periodistas: “El estilo no aparece cuando te compras todo lo más caro”.

Celebridades que prefieren tiendas de segunda mano

Zooey Deschanel no es la única estrella que compra ropa usada. Drew Barrymore, por ejemplo, una vez caminó por la alfombra roja con un vestido comprado en una tienda de segunda mano. Y la cantante Kylie Minogue, a menudo, es vista haciendo compras en estas tiendas económicas. Por cierto, recientemente, junto a la cantante Billie Eilish, donó un par de sus accesorios a una venta benéfica.

El músico de rock Alice Cooper no solo compra sino que también vende ropa usada. Abrió una tienda de segunda mano en 2014.

La famosa actriz Anne Hathaway se preocupa por el medio ambiente, por lo que tampoco le duelen prendas por ir a comprar cosas a las tiendas de segunda mano. Mira lo linda que se ve esta famosa con un vestido de flores usado comprado por 15 USD.

Sarah Jessica Parker también reconoce su amor por las tiendas de segunda mano, ya que cree que comprar en ellas hace que las compras, no solo sean agradables, sino también muy económicas.

Tal vez esta sea una muy buena tendencia que probablemente nos enseñe a todos a prestar atención primero, no a la ropa que lleva una persona, sino a cómo es la persona en sí misma por dentro.

¿Alguna vez has comprado artículos en tiendas de segunda mano? ¿Recuerdas algunas adquisiciones particularmente exitosas?

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No veo a Sara Jessica Parker comprando de segunda mano...

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