Aumenta tu vitalidad rápido y sin mucho esfuerzo

Salud
hace 3 años

A veces mantener una actitud positiva y enérgica no es suficiente. Si llegas agotado al final del día y sientes que tu vitalidad disminuye, este artículo de Genial.guru es para ti.

Masajea la punta de tus dedos

Presiona, entre el pulgar y el dedo índice de tu mano derecha, cada uno de los dedos de tu mano izquierda. Ejerce la presión haciendo pequeños y rápidos círculos.  Luego repite esta operación con la mano contraria. De esta manera activas miles de terminaciones nerviosas cuyas señales resuenan en todo tu cuerpo, activando focos de energía que tal vez estaban dormidos.

Aliméntate estratégicamente

En lugar de tomar una azucarada bebida energizante, consume alimentos que naturalmente contengan ingredientes vitalizantes. Agrega los siguientes a tu lista de mercado: nueces del Brasil, manzanas verdes, jengibre, limón, naranja, guayaba y chocolate. Consúmelos diariamente y sentirás cómo le devuelven a tu cuerpo la electricidad que le hacía falta.

También es importante que comas raciones mesuradas a lo largo del día. No te satures de comida. Cuando haces esto, obligas a tu organismo a concentrar toda su energía en la digestión y entonces sientes que necesitas con urgencia una siesta.

Mueve tus articulaciones

Las articulaciones son puntos clave en el flujo energético de nuestros cuerpos. Podríamos decir que son las bisagras que articulan y unen los canales por donde fluye nuestra energía vital. Por eso mantenerlas rígidas o en la misma posición durante mucho tiempo puede cansarnos bastante. Hacer girar las muñecas, los hombros y el cuello, o estirar las piernas y los brazos, no solo alivia la tensión corporal, también contribuye a darnos un empujón extra de vitalidad.

Agua fría

Si todavía no eres capaz de bañarte con agua fría en las mañanas, al menos lava tu cara varias veces al día. Moja tu cuello y manos. Esto ayuda a activar la circulación de la sangre y despierta funciones básicas de tu cuerpo que te llenan de energía.

Abraza

Cuando abrazas a alguien por más de cinco segundos, además de liberar tensión muscular y sentir la reconfortante sensación de estar en los brazos de otra persona, le permites a tu cuerpo sincronizarse con el de otro ser y multiplicar la energía que hay entre los dos. Así que ya sabes: ¡a dar abrazos que te llenen de energía!

Foto de portada: pexels

Comentarios

Recibir notificaciones
Aún no hay comentarios. ¡Puedes ser el primero!

Lecturas relacionadas