10 Errores comunes que cometemos al decorar la habitación de nuestros niños

Ya sea que estemos esperando la llegada de un bebé, mudándonos o simplemente tengamos deseos de redecorar, la habitación de los niños suele ser un espacio con el que los padres nos ilusionamos mucho. Pero hay diversos factores que debemos tener en cuenta para que este cuarto no sea solamente bonito, sino que realmente pueda ser ideal para nuestros hijos.

Pensando en esto, Genial.guru reunió 10 de los errores más comunes que los padres suelen cometer al momento de planear y decorar una habitación infantil.

1. Considerar que una cuna convertible es la mejor opción

Para muchos padres, la primera y mejor opción son las cunas convertibles, ya que pueden usarlas como cunas al comienzo y luego transformarlas en pequeñas camas para niños. Se debe tener en cuenta que normalmente esta opción suele ser más costosa y ocupa más espacio. Además, los pequeños dejarán esta cama rápidamente, y de todas maneras se deberá invertir dinero dos veces.

Como opción, puedes considerar pasar de la cuna a una cama normal y conseguir barandales removibles. También puedes recurrir a camas a la altura del piso, que les darán mayor libertad a tus hijos, en especial cuando ya empiecen a desplazarse solos.

2. Llenar el espacio con muebles y cosas

Entre su cama, cómoda, ropero, armario, caja de juguetes y, en algunos casos, escritorio o sillas y mesitas, muchas veces nos olvidamos de dejar un espacio suficiente para que los niños puedan jugar libremente y tener su propio lugar dentro de su habitación.

3. No priorizar la seguridad

En un cuarto infantil se debe pensar hasta en el más mínimo detalle para que sea un lugar seguro para los niños. Los cables sueltos y cortinas pueden ser un riesgo si se enredan en ellos o los jalan. Los muebles sin asegurar a las paredes o alfombras sin antideslizantes pueden provocar caídas o golpes, y los cerrojos de ventanas y puertas también deben ser a prueba de niños para que estos no se lastimen o se queden encerrados por accidente.

4. Tener un solo punto de iluminación

La iluminación es clave al momento de ambientar un espacio, y en la habitación de los niños esto no es diferente. Además, las luces pueden ser parte de la decoración. Hay que tomar en cuenta que muchas veces será necesaria una luz tenue nocturna o pequeñas luces que cumplan la misma función. También necesitarán una buena iluminación dirigida a espacios esenciales, como su zona de juegos o estudios.

5. Elegir una alfombra solo porque es bonita

Actualmente existe una infinidad de tipos, colores, formas y materiales de alfombras que las convierten en un elemento versátil e ideal para cualquier habitación. Pero debemos tener en cuenta el tamaño de la alcoba para elegir una correctamente y también si esta tendrá alguna utilidad más allá de la decorativa. Y un consejo esencial: que sea fácil de limpiar o lavar.

6. Dejar las paredes sin protección

Al decorar una habitación, no debemos olvidar que las paredes no solamente deben verse bien, sino que también deberán ser lo suficientemente resistentes a las ocurrencias de un niño. Pinturas vinílicas, papeles tapices lavables o un arrimadero son opciones ideales para que ante cualquier experimento de los pequeños, la limpieza resulte sencilla.

7. Llenar la habitación de colores o con un tema específico

Así como los niños crecen casi a la velocidad de la luz y van dejando tallas de ropa, igual de rápido cambian sus gustos. Por eso no es bueno dejarse llevar y pintar, empapelar o decorar toda la habitación de un tema específico o un color muy fuerte. Lo ideal es mantener las paredes en tonos neutrales y dar acentos de color con elementos como cojines, la ropa de cama o cuadros que luego puedan ser fácilmente reemplazables acorde al desarrollo y gustos del niño.

8. No planificar estratégicamente el espacio para almacenamiento

Además de su ropa, los niños tienen muchas cosas para guardar y acomodar, como libros y juguetes. Por eso es necesario tener armarios, cómodas, canastas o repisas para que cada cosa tenga su lugar y el niño, desde pequeño, tenga sentido del orden. No debemos olvidar que los infantes dejan la ropa muy pronto, y si en un principio parecía que les sobraba espacio en el ropero, esto pronto irá cambiando. Debido a esto, su armario debe poder adecuarse a estos cambios también.

9. Acomodar las cosas fuera de su alcance

Para que un niño realmente pueda disfrutar de su habitación, es necesario que esté pensada para su comodidad y facilidad de movimiento. Siguiendo la metodología Montessori, que incentiva la creatividad e independencia de los niños, lo ideal es que sus juguetes y libros estén siempre a su alcance, esto es, hasta los 6 años más o menos, cerca del nivel del piso.

10. No dejar espacio para la creatividad y gustos de los niños

Como padres, nos emociona el decorar y amueblar la habitación para nuestros hijos, pero no debemos olvidar que este espacio será de ellos y para ellos. Por eso, sus necesidades y gustos deben ser una prioridad. Dejar espacio para el juego y la magia es posible con cosas sencillas como un teepee o unas estrellas colgantes, o tener una pizarra para que los niños desarrollen su imaginación y creatividad, y así se sientan siempre a gusto en su cuarto.

¿Tienes algún otro consejo que hayas seguido al decorar la habitación de tus niños? ¿Hay algún elemento que sea imprescindible para tus hijos en sus habitaciones?