¿Por qué el agua mineral es una fiel aliada para obtener una tez reluciente?

Incluye un par de botellas de agua con gas en tu próxima lista de la compra. Las bellezas asiáticas afirman que esta es increíblemente beneficiosa para la piel. Solo que, para el tratamiento, no será necesario beberla.

Genial.guru estudió las ventajas de lavarse con agua carbonatada y comparte contigo esta nueva tendencia presente en el mundo de la belleza.

¿Cómo surgió la idea de lavarse el rostro con agua con gas?

Tal vez no te hayas sorprendido mucho al enterarte de que un nuevo know-how en el mundo de la belleza nos llegó desde Oriente. Las aguas minerales y carbonatadas son ampliamente utilizadas en Japón y Corea en muchos de los tratamientos habituales de spa. Los cosmetólogos de estas regiones han apreciado sus propiedades y fue entonces cuando llegó el momento estelar para las botellas en las estanterías de las tiendas habituales.

A pesar del hecho de que los métodos orientales de autocuidado, con frecuencia, sorprenden por su escrupulosidad (¿recuerdas aquellos procedimientos diarios coreanos de 10 pasos?). Algunas soluciones de los líderes modernos de la industria de la belleza nos deleitan fundamentalmente por su simplicidad e ingenio. Lavarse la cara con agua mineral con gas es definitivamente uno de estos métodos.

¿Por qué las mujeres japonesas y coreanas aprecian el agua carbonatada?

• No destruye la barrera protectora de la piel.
  
  La acidez de la piel es responsable de su protección contra los impactos de factores nocivos. El pH ideal de la piel del rostro es de 5,5. El agua del grifo afecta significativamente a este indicador, ya que se ve alterado el equilibrio del agua, lo que empeora la condición de la piel.
  
  En el agua con gas, a diferencia de la común del grifo, encontramos el nivel de pH óptimo, por lo tanto, después de recurrir a ella no se tendrá sensación de sequedad ni tensión en la piel.
• Limpia más suavemente el rostro.
  
  El efecto del agua con gas es similar a los efectos de un ligero peeling. La razón de esto radica en su contenido de bicarbonato de sodio, el cual reduce la descamación de la piel y la limpia mejor que el agua del grifo.
• Mejora la circulación sanguínea.
  
  El agua carbonatada aporta a los tejidos de la piel oxígeno y nutrientes, lo que le da un aspecto más saludable y unifica el color de la tez.
• Limpia profundamente los poros.
  
  El bicarbonato de sodio que contiene este tipo de agua elimina eficazmente la grasa y la suciedad que obstruyen los poros. Como resultado, no solo se obtiene el efecto estético, sino que también reduce la probabilidad de sufrir inflamación.
• Ayuda a deshacerse de las cicatrices.
  
  En general, al tener un efecto beneficioso sobre la piel, el agua con gas estimula los procesos regenerativos, hidrata y nutre los tejidos dañados.

“¡Genial! ¡Ahora voy a lavarme el rostro con agua carbonatada cada día!”

No es tan sencillo.

Los expertos no la recomiendan para uso diario, ya que esto puede provocar irritación. Dependiendo de tu tipo de piel, bastará con lavarte la cara con agua con gas de 1 a 3 veces por semana. Puede usarse no solo para lavar el rostro tal cual, sino también para aclarar el gel o la espuma de limpieza facial.

Para pieles normales y grasas: vierte agua mineral carbonatada en un recipiente y sumerge el rostro en él de 10 a 20 segundos. Realiza este procedimiento una vez por semana si tienes la piel normal, y de 2 a 3 veces por semana, si tu piel es grasa.

Para pieles secas y sensibles: mezcla el agua mineral con gas con la normal carbonatada en proporciones iguales (si es necesario, una de las partes puede reemplazarse con agua potable del grifo). Realiza el mismo procedimiento que mencionamos anteriormente. Se recomienda realizar una vez por semana. Puedes aumentarlo hasta dos veces si en la piel no observa síntomas de irritación y enrojecimiento.

Maneras alternativas de aprovechar el agua con gas

La autora de este artículo no pudo resistirse y también comenzó a realizar pequeños experimentos sobre el cuidado personal. Después de este tipo de spray, la piel realmente queda fresca.

• El agua con gas se puede usar como tónico: humedece con ella un algodón y pásalo por tu rostro. O bien, utiliza una boquilla de rociado para convertir una botella de agua en un spray práctico.
• Mezcla agua con gas y té verde en proporciones de 1:1, empapa con este líquido los discos de algodón y aplícalos sobre el rostro durante 10 minutos (¡pero no más!).
• Vale la pena fijarte en los cosméticos que contengan agua carbonatada: las principales marcas asiáticas la han incluido desde hace mucho tiempo en la composición de mascarillas de tela, parches y tónicos.
• Siguiendo el ejemplo de las mujeres coreanas, puedes tomar baños añadiendo agua carbonatada.
• El agua mineral con gas también nutre bien el cuero cabelludo. La cabeza, al igual que el rostro, puede sumergirse en una solución de agua con gas y luego dejar que la absorba.

¿Ya has probado en ti esta tendencia original de belleza? ¡Cuéntanos tus impresiones!