15 Trucos astutos de los padres que funcionan incluso con los niños más traviesos

Crianza
hace 4 años

La habilidad de volver locos a los padres en solo un par de minutos viene “configurada de fábrica” en cada niño y estos la desarrollan durante años hasta que alcanzan la perfección. Pero contra sus rotundos “No”, “No quiero” y “Pero cómpramelo”, los padres también cuentan con un as bajo la manga al cual recurrir en caso de emergencia.

Genial.guru encontró tácticas de crianza de los padres más ingeniosos de Internet. Aprovéchalas.

  • Cuando llega la hora de irse del parque o salir de la piscina, en vez de decir “ya es hora de irnos” o “te quedan 5 minutos”, utiliza una escala de tiempo que sea comprensible para un niño de 4-5 años. Yo digo: “¡Enséñame cómo saltas al agua! Siete saltos más y nos vamos”. A veces, este número es mayor, pero nunca es menor de 5. Si es menor, los niños empiezan a quejarse: “¿Puedo una vez más?”. Siete o más es un número que permite al niño prepararse para el hecho de que hay que irse. © sardineclub

  • Tengo 3 hijos con poca diferencia de edad. Una vez, repartí entre ellos los días de la semana (a cada uno le tocaron dos, el domingo no cuenta). No importa de qué estén discutiendo (a quién le toca primero columpiarse, quién se baña primero), siempre respondo con la siguiente pregunta: “¿A quién le toca hoy?”. En su día, cada niño tiene derecho a hacerlo primero. Esta regla me ayudó a evitar muchas discusiones. © Governmentman43

  • Le dije a mi hija que la mentira se puede identificar por la lengua. Si pienso que me está mintiendo, le pido que saque la lengua. Si de verdad ha mentido, apenas la muestra, y si fue honesta, la saca toda con valentía. © Anonredditguy100

  • Vivo en una casa privada, así que las arañas no son un fenómeno paranormal, sin embargo no tengo moscas ni mosquitos. Un día, me visitó mi hermana con sus hijos. Mi sobrino (de 6 años) me gritó: “¡Hay una araña! ¡Tengo miedo! ¡Mátala!”. Yo, con total indiferencia: “Pero si es Kiko”. Al instante se calmó y me dijo: “¿Kiko? ¿Puedo verlo?”. Y corrió hacia la araña. Cinco segundos, me gritó: “¿Puedo acariciarlo?”. Parece que en este mundo desapareció una persona con fobia a las arañas. © shelomitsky2011

  • Si mi hijo se caía o se daba un golpe, a la primera, siempre me miraba a mí. Y yo comenzaba a reírme (por supuesto, si no parecía una lesión grave). Por eso, él también se reía en vez de llorar. En la mayoría de los casos, los niños simplemente necesitan tu reacción para evaluar la gravedad de la situación. © LeanderD

  • En nuestra casa, está prohibida cualquier arma. Cuando mi hijo tenía 9 años, con su dinero de bolsillo se compró en secreto una pistola que disparaba con bolitas de plástico. En la calle, durante un “tiroteo”, por accidente, le dio a otro niño con una bala en la ceja, hasta provocó que le saliese sangre. Yo estaba aterrorizada porque el chico podía incluso perder un ojo, pero no empecé a gritar ni a regañar a mi hijo. El castigo fue el siguiente. Le vendé un ojo con una venda, le prohibí quitársela durante 5 horas y le dije: “Debes entender cómo se sentiría ese chico si la bala le hubiera dado un poco más abajo”. Se deshizo de la pistola. © Annypooh3

  • Mis padres una vez me jugaron una broma. Teníamos un libro en el estante, que me estaba estrictamente prohibido leer. Un día, durante las vacaciones, me quedé solo en casa y, agarrando este libro, leí la mitad de golpe. Era un libro de texto grueso sobre los 5000 años de la historia de China. © LeanderD

  • En mi infancia, cuando me negaba a levantarme por la mañana, mi madre siempre me pedía que le jugara una broma a mi padre: me vestía, me escondía debajo de las sábanas y fingía que estaba durmiendo. Cuando mi papá venía a despertarme, saltaba de debajo de las sábanas, completamente listo para salir. ¡Este método ha funcionado durante años! © mfiggfi

  • La frase “Apuesto a que no pueden...” siempre funciona. Mi petición de recoger los juguetes, mis hijos, simplemente la ignoran, pero en cuanto digo “apuesto a que no pueden colocar estos juguetes en su lugar”, inmediatamente, comienzan a recoger soltando una mirada de indignación. © LeanderD

Bono

Y tú, ¿tienes algún truco o estrategia de padres que funciona en tu arsenal de crianza? Compártelo con nosotros en los comentarios.

Imagen de portada Annypooh3

Comentarios

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A la mía le digo que terminó más rápido de juntar juguetes,y para bañarse le digo que sus juguetitos me llaman y me voy al baño , ella me sigue,y por competencia recoje sus juguetitos en su canasto ,así camina rápido o come todo lo de su plato,si se cae le hacemos bulla si no es grave y dice en respuesta: ay, nena

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Muy buena la madre que dice que el brócoli es comida de dinosaurios

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Yo lo que hacía cuando mi hija me hacía rabietas le decía que al llegar a la casa me recordara para corregirla en ese instante se calmaba jajaja

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Mis hijas siempre dicen que tenía unos castigos muy originales.

La función del castigo no es punitiva, si no formativa.

Con 8 y 6 años respectivamente, les ponia hora de llegada, cuando iban a jugar al parque.

La mayor siempre muy puntual. La pequeña, todo lo contrario.

Así que cuando la pequeña llegaba 10 minutos tarde, se los descontaba al día siguiente. En vez de llegar a casa a las 7 de la tarde, tenia que llegar a las 6:50. Y así, sucesivamente.

A la mayor, le regalaba minutos adicionales por cada día que llegaba puntual. Así que al final de la semana acumulaba hasta media hora más.

El castigo que se llevó la palma fuél el del corte de manga.

Íbamos caminando a casa de mis padres. Aún faltaban como 200 metros para llegar.

La mayor tenia 7 años. Se enfadó y me hizo un corte de manga.

Le dije: tanto te gusta hacer cortes de manga? Pues ahora los vas a hacer hasta que te diga que pares.

La niña empezó a hacerlos. Llegó un momento que ya estaba cansadita.

Le obligué a seguir haciendolos.

Empezó a llorar.

Al cabo de 15 minutos le dije que podia parar. Mano de santo! Nunca más! ??

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cuando voy a la tienda con mi hijo y él quiere que le compre algo, yo le digo adios ya me voy a la casa ya no hay dinero y él por no quedarse hay solo, se viene conmigo eso si sin quitarle los ojos encima siempre lo vigilo con cautela jajaja y me siempre funciona

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total, yo tambien hago lo mismo, me rio eso si no es grave y el niño calmado, pero cuando los demás se asombran y se adustan se pone a llorar como si no hubiera un mañana

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Cuando había una tormenta eléctrica y los rayos sonaban muy fuerte, le decía a mi hija: "Escucha!! Las nubes están discutiendo! Vamos a ver qué le dice una a la otra! Y le decía que entendía lo que se estaban reclamando. Obvio tenía que ver con alguna otra cosa que tenía que ver con ella. Así era doble lección. Nunca ha tenido miedo a los relámpagos ni a las tormentas, incluso sonríe cuando las escucha.

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