Trucos a los que la gente ha recurrido por cientos de años para protegerse del frío

hace 2 años

Los seres humanos siempre han sido muy ingeniosos cuando se trata de su supervivencia. Por ejemplo, la calefacción de piso se inventó hace más de 7000 años y, hoy en día, los suecos están utilizando con éxito la tecnología de Internet para calentarse en sus cómodos hogares.

En Genial.guru, decidimos descubrir qué trucos tenían y siguen teniendo las personas de diferentes países para calentarse durante el invierno, y qué tan efectivos resultaron ser sus métodos para ese propósito.

China — muchas capas de ropa, ventanas hacia el sur y un sistema de calefacción llamado kang

En China, muchos hogares no tienen calefacción central. Las personas adineradas se salvan instalando calefacción y pisos radiantes por su cuenta. La gente de la vieja escuela y los que no tienen suficiente dinero lo hacen a la antigua, se calientan con el método de “vestirse como un cebolla”: se ponen varias prendas a la vez. Y a veces hace tanto frío en las casas que hay que vestirse cuando se llega de la calle, y no al revés.

He aquí otras formas de cómo los chinos calientan tradicionalmente sus hogares:

  • Construyen casas con ventanas y puertas orientadas al sur. Al mismo tiempo, la casa se ubica de tal manera para que el sol no penetre demasiado por las ventanas, pero caliente el hogar.
  • Hasta el día de hoy, en las casas de campo se pueden encontrar sistemas de calefacción hechos de ladrillos llamados kang, que ocupaban al menos 2 metros de longitud, y a veces todo el piso. Para los chinos, el kang era más que una simple estufa: se usaba como mesa, cama, silla. Las ceremonias de boda y otras ceremonias se llevaban a cabo sobre el kang cubierto con esteras. De hecho, el kang que ocupaba toda la habitación cumplía la función de un suelo radiante, que los chinos hicieron hace más de 7000 años.

Una mujer cosiendo sentada sobre el kang.

Japón — yutanpo, kairokotatsu

En Japón, siguen sin tener calefacción central y las paredes de las casas son finas como el papel. El aislamiento tampoco sirve, por lo que el frío penetra por todos lados: sopla desde ventanas, puertas, pisos. El caso es que muchas de las casas se construyen como “desechables”. Su vida útil es de 30 años, después de los cuales las casas se derriban y se reconstruyen. Como resultado, las habitaciones pueden estar bastante frías incluso en inviernos cálidos. Pero los ingeniosos japoneses han encontrado varias formas de resolver el problema:

  • Para mantenerse calientes por la noche, los japoneses usan yutanpo. Esto viene ser una almohadilla térmica o una botella que se llena con agua caliente. Estas almohadillas térmicas están hechas de plástico, aluminio y, con menos frecuencia, de goma. Solo que el yutanpo tiene muchas desventajas: calienta solo una parte del cuerpo, y si no aprietas la tapa con fuerza o lo llenas con agua demasiado caliente, puedes despertar con quemaduras.
  • Los ingeniosos japoneses también llevan consigo kairo: diminutas almohadillas térmicas, que son unas bolsas con gel. Si las sacudes en las manos o arrugas moviendo así el gel, comenzarán a generar calor. Estas bolsas se pueden poner en el calzado o en un bolsillo, y algunas, con velcro, se pueden fijar directamente en la ropa.
  • Y, por supuesto, a los japoneses los ayuda a mantenerse calientes la kotatsu, su favorita mesa; de hecho, solo es una manta que se usa para cubrir la mesa con un calentador. En las noches frías, se convierte en el verdadero centro de la casa, bajo el cual toda la familia se reúne para conversar, ver la televisión o jugar juntos.
Ayer nos entregaron un kotatsu — una mesa bajita con una estufa eléctrica en el interior, cubierta con una manta gruesa y luego la superficie. Y ahora es el centro de toda la vida y el calor en el hogar: dan ganas de trabajar bajo la misma, tomar té, calentar las piernas por las tardes, taparse la cabeza con la manta.

Estados Unidos, Países Bajos y el norte de Alemania — estufa para pies

La estufa para pies era un simple cajón de madera dentro del cual se colocaba un cuenco u olla de cerámica o metal con brasas. En la parte superior del cajón había agujeros por los que pasaba el aire caliente. Poniendo los pies encima y cubriendo el cajón con ropa larga o con una manta, se podría conseguir una gran calidez. En el siglo XIX en los Estados Unidos, estos “taburetes” a menudo se llevaban consigo a los servicios religiosos prolongados para no congelarse después de permanecer sentado durante mucho tiempo.

Los pobres que viajaban en carretas o trineos se calentaban a su manera: llevaban ladrillos calentados o usaban una plancha o papas hervidas como almohadilla térmica.

Israel — sopa caliente y pantuflas a cuadros

Israel es un país cálido, por lo tanto, allí se construyen casas principalmente en estilo de verano. Como resultado, durante los inviernos cortos, cuando hace mucho frío, las heladas baldosas del piso, las paredes de cemento frío y las corrientes de aire eliminan todo el calor que podría haber en el hogar. Pero además de calentadores y aires acondicionados con función de calefacción, la gente ha encontrado algunas formas más sencillas de mantenerse caliente en la estación fría:

  • Instalan chimeneas de leña, gas o eléctricas e instalan sistemas de calefacción por suelo radiante.
  • Toman mucho té y no caminan por la casa sin calcetines calientes o las famosas pantuflas a cuadros.
  • Disfrutan de una sopa de pollo caliente casera con verduras y cuscús.

Finlandia — desde saunas hasta energía de la naturaleza

Durante mucho tiempo, los finlandeses han disfrutado de los saunas. Por otro lado, los saunas no eran solo un lugar donde uno podía lavarse y arreglarse: en invierno servían como vivienda. El sauna era solo un pozo en el suelo sin ventanas en el que un montón de piedras se calentaban con fuego. Después de 6 a 8 horas de calentamiento, el humo se liberaba a través de una escotilla y entonces se podía entrar y disfrutar del calor.

Las casas modernas en Finlandia están bien aisladas y, a menudo, tienen ventanas triples o incluso de 4 a 5 capas de vidrio. Muchas casas están conectadas al sistema de calefacción central, pero el 70 % de los edificios nuevos no muy grandes se construyen con bombas de calor que convierten la energía de fuentes externas (agua, aire). Son de tamaño pequeño y no requieren combustible.

Reino Unido y Estados Unidos — desde almohadillas térmicas de latón hasta mantas eléctricas

Las chimeneas en las películas evocan asociaciones con la comodidad y la calidez, pero en realidad no tenían mucho sentido: la mayor parte del calor se escapaba por el tubo. Incluso si un fuego ardía en la casa todo el día, la temperatura en la habitación no siempre se elevaba por encima del punto de congelación y la comida simplemente podía congelarse. Además, incluso en una casa grande, generalmente solo se calentaba 1 habitación, donde se reunían todos los miembros de la familia. Para no tener frío durante el sueño, los residentes de Reino Unido y Estados Unidos recurrían a muchos trucos:

  • La gente se iba a dormir con gorros y ropa de lana sobre las que se ponían camisones. Tenían que cubrirse con varias mantas a la vez.
  • La cama se calentaba con almohadillas térmicas de latón, similares a sartenes grandes, que se llenaban con carbón caliente o medio caliente y se colocaban entre sábanas de lino.
  • Más tarde fueron reemplazadas por almohadillas térmicas de goma llenas de agua caliente. A principios del siglo XX, fueron reemplazadas por mantas eléctricas. Sin embargo, hasta principios del siglo XXI, dormir cubriéndose con las mismas no era muy seguro: podían provocar un incendio, ya que no se apagaban al sobrecalentarse.
Mi infancia pasó en el Reino Unido después de la guerra. Tuvimos “suerte”: ¡nuestra casa era nueva y tenía calefacción central! Era un caldero de carbón del tamaño de una caja de cerillos que requería los esfuerzos de toda una tripulación de fogoneros del Titanic para alimentar su diminuta boca abierta. Sin embargo, nunca llegaba a calentar por encima de los 2 °C. También teníamos una chimenea en nuestra sala de estar. Era genial sentarse a 15 cm de la misma. Mientras que la cara estaba iluminada por las llamas, la espalda se cubría de hielo: las ventanas eran de metal, tenían huecos por donde soplaba un viento penetrante. Las ventanas del dormitorio se cubrían de escarcha desde el interior. Había que ir a la cama completamente vestido, poniendo una almohadilla térmica de goma con agua caliente sobre los pies. Y cuando finalmente dejabas de temblar debajo de las mantas, era posible, sin levantarse de la cama, ponerse un pijama calentado con la almohadilla térmica y ¡casi milagrosamente!, quedarse dormido.

Suecia — calor generado por las personas y su actividad en Internet

Gran parte de Suecia ha pasado a sistemas de calefacción domésticos respetuosos con el medio ambiente. En muchas casas, la calefacción geotérmica es la que genera una atmósfera acogedora, utilizando el calor natural de la tierra. Aunque es bastante caro instalar un sistema de este tipo, los gastos normalmente se recuperan después de 8 años. Otras formas de mantenerse caliente también son interesantes:

  • Muchos suecos instalan paneles solares y, por lo tanto, se abastecen de calor prácticamente gratis de por vida.
  • Todas las fotos y textos que publicamos en Instagram y Facebook se guardan en enormes almacenes de servidores. Uno de ellos, ubicado en Estocolmo, aporta beneficios reales a las personas: todo el calor que genera se utiliza para calentar las casas de los habitantes de esta ciudad.
  • También se anunció la intención de convertir el calor generado por los pasajeros de los trenes en calefacción para edificios de oficinas más cercanos. El exceso de calor se eliminaría a través del sistema de ventilación y calentaría las tuberías de agua que calientan las oficinas.

¿De qué forma te mantienes caliente en invierno? ¿Tienes alguna comida o bebida favorita que reservas para las noches especialmente frías?

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