16 Maestros ingeniosos cuya creatividad y enfoque no dejará indiferente a nadie

hace 2 años

Los maestros son personas importantes en nuestra vida. Cuando un profesor lleva adelante una clase de manera tan natural como si fuera un pez en el agua, de inmediato nos queda claro que esa es su verdadera vocación. Tal vez transcurran muchos años, pero a ellos siempre los recordaremos: aquella profesora era estricta pero justa, este otro maestro era amable y sabio, y así. Sus viejos alumnos siempre contarán diferentes anécdotas o historias en las que estos inolvidables docentes serán los protagonistas.

Nosotros en Genial.guru pensamos que el trabajo de un maestro no solo requiere un alto nivel de educación, sino también una imaginación infinita, sentido de humor y, por supuesto, amor. En este artículo te preparamos unos ejemplos de maestros que sin dificultad conquistaron el corazón de sus alumnos.

1. Otórguenle el premio Óscar entre los maestros

2. En la escuela a un niño se le cayó su diente de leche y se le perdió. El niño estaba triste porque el ratón de los dientes no le iba a traer nada. Por eso el maestro le escribió una carta oficial

“¡Querido ratón de los dientes! Te escribo para informarte que a N se le cayó un diente hoy. El diente de adelante de la parte inferior. Desafortunadamente, se perdió durante la hora de la comida. Por favor, acepta esta carta oficial como prueba de ello. En persona vi el espacio que quedó en el lugar del diente. Por favor, visita a N y déjale su compensación habitual”.

3. El maestro más sabio

Un día decidí compartir en la clase mis dudas sobre mi voz con mi maestro de canto: “Me parece que después de todos estos ejercicios, mi canto solo empeoró”. Sonrió y me respondió: “No te preocupes. Siempre cantaste así, pero ahora empezaste a darte cuenta”. La verdad, no sabía si reír o llorar. Al haber entendido mis errores, di el primer paso para corregirlos. © Vijayraj Kamat / Quora

4. “Mi maestro de matemáticas tiene un sello con su rostro. Lo pone solo en caso de que el alumno haya hecho bien la tarea”

5. Bueno, es hora de ir sacando los calendarios del 2010

6. “Pero incluso aquí copió todo”

7. Gabriel García Márquez puede esperar un poco

8. “Mi maestro se vistió para la clase como un personaje de anime”

9. El experto en pedagogía

En el décimo grado tuvimos una clase de química. El maestro nos estaba esperando en un aula oscura, sosteniendo una pequeña vela frente a él. Los chicos estaban un poco perplejos. Cuando todos nos tranquilizamos, el maestro nos dijo: “Cuéntenme qué observaciones pueden hacer sobre esta vela”. Parecía demasiado fácil para una clase de química y al final, comenzamos a gritar:
—¿La llama es de color amarillo?
—¡La llama desprende calor!
—¡La mecha está quemándose!
—¡La cera tiene forma cilíndrica!
El maestro levantó las cejas.
—¿Están seguros?
Luego se metió la vela en la boca y empezó a masticarla. Todos nos quedamos mirándolo con atención. Pensé que tendríamos que llamar a una ambulancia, pero el profesor siguió masticando como si no hubiera pasado nada. Al final, nos dijo: “De hecho, tiene un buen sabor”. Resultó que la “vela” no estaba hecha de cera en absoluto. En realidad, era solo una rodaja de plátano con una rodaja de almendras en lugar de una mecha. La última afirmación de un alumno sobre la cera fue en realidad una inferencia y no una observación. Después de explicarnos esto, el maestro encendió la luz y nos dijo: “Quiero que aprendan la primera regla del pensamiento científico: nunca asuman que su mente no puede mentirles”. Y esa es la historia de cómo mi profesor de química de décimo grado se tragó una vela para enseñarnos el primer principio del pensamiento científico. © Hannah Yang / Quora

10. “Mi maestro de matemáticas trajo pizza para la clase, ¿cómo va tu día?”

11. Al parecer, la maestra estaba dando clases en Hogwarts a tiempo parcial

12. “Mi mamá es maestra de música. Significa que periódicamente le mando mensajes de voz por WhatsApp cantándole unos fragmentos de melodías clásicas y luego le pregunto qué es”

13. Se recomienda hacer caso a este consejo

En aquel entonces estudiaba en séptimo u octavo grado. Mi maestra de inglés le pidió a un compañero de clase que limpiara la pizarra. Él tomó un trapo y empezó a limpiarla de izquierda a derecha, y así lo hacíamos casi todos. El polvo se dirigió directamente hacia otro alumno que estaba cerca. Al darse cuenta de esto, la maestra detuvo a mi compañero de clase y le mostró cómo hacerlo de forma correcta, de arriba abajo. Al haber resuelto el problema con la pizarra, se dirigió a los alumnos: “En esta vida tienen que tratar de hacer cosas rutinarias tales como limpiar la pizarra de una manera extraordinaria. Esto hará que su vida sea extraordinaria”. Fue uno de los mejores consejos que he escuchado. © Yash Sanghvi / Quora