Un hombre formó un gran corazón con árboles para recordar a su esposa

Estar junto al amor de tu vida es algo que, lastimosamente, no dura para siempre. Esto es lo que sucedió con Janet y Winston Howes, quienes parecían tenerlo todo: un matrimonio feliz, un hijo al que amaban y una adorable casa. Pero cuando Janet tenía 50 años, sufrió un paro cardiaco y Winston se hundió en una profunda tristeza. Hasta que halló la forma de hacer que la memoria de su esposa siguiera viva.

Winston homenajeó a su esposa creando un enorme corazón en la tierra

Winston amaba a Janet con todo su corazón. Se casaron en Stroud hace muchos años y se mudaron a una granja de 112 acres, donde fueron muy felices. Pero cuando el destino le arrebató a su esposa, el hombre se sintió muy solo y desolado. Es así como sembró un bosque en forma de corazón cerca de su casa, para no olvidarla nunca.

El corazón verde se veía desde el aire y era un signo de amor eterno. Winston iba al lugar todos los días y se sentía cerca de Janet. Su hijo también se sintió reconfortado por el acto de su padre y juntos pudieron superar el dolor. Ahora el corazón es un sitio sagrado para ellos y para todos los que saben su historia.

“Me pareció una gran idea, fue una chispa de inspiración, sembré miles de árboles de roble”, dijo Winston. “Cuando se terminó, nos sentamos en la colina cerca de donde vivíamos para poder admirarlo. También sembramos robles alrededor del borde y narcisos en el centro”.

El bosque de roble permaneció oculto hasta que lo descubrió un piloto de globos

Tanto él como su hijo sabían que necesitaban una forma que se pudiera ver desde el cielo, por eso escogieron un corazón. Deseaban que Janet pudiera “ver” cuánto la seguían queriendo. Por mucho tiempo fue un lugar secreto hasta que, un día, un piloto de globos llamado Andy Collet sobrevoló la zona y divisó la peculiar forma de los árboles que se veía desde las alturas.

Ante eso, se emocionó al ver la belleza y el amor que emanaba de esa escena. Se preguntó qué clase de historia de amor tan profunda y conmovedora habría detrás de ese gesto romántico. “Tengo mi propio globo y soy un viajero regular, pero esto fue lo más increíble que vi desde el cielo. Era un corazón perfecto, escondido de la vista, no sabrías que estaba ahí”.

El tamaño del corazón es bastante inmenso, dado que mide aproximadamente cuatro mil metros y se encuentra orientado al hogar donde vivía Janet de niña. De esa forma, Winston demostró que si existe el amor eterno y que la memoria de su esposa permanecerá eternamente en los recuerdos de su familia.