16 Historias cortas sobre el hecho de que el amor y el cuidado se manifiestan en cosas pequeñas

Pareja
hace 3 años

El amor es un asunto delicado. Paso a paso, construímos la relación con nuestra media naranja, y muchas veces nos equivocamos pero aprendemos de nuestros errores. Con el tiempo, muchas cosas se borran de la memoria pero los recuerdos más importantes permanecen con nosotros para siempre.

En Genial.guru estamos seguros de que las acciones de una persona hablan de sus sentimientos mucho más que cualquier palabra. Y como prueba, decidimos compartir contigo algunas historias de situaciones cotidianas que se han convertido en vivencias inolvidables en la vida de los enamorados.

1.

Mucha gente conoce el chiste de que necesitas conseguirte el animal en cuyo año naciste: una rata, un mono, un cerdo. La broma consiste en que alguien tiene que buscarse un dragón y, en comparación, hasta un caballo no parece tan terrible. Le conté a mi novio que nací en el año de esta criatura y por ende, no puedo encontrar la mascota adecuada. Pensé que él solo sonreiría, pero dijo que lo hallaría y desapareció durante 2 semanas. Después regresó con un dragón de un metro y medio de arcilla polimérica que había esculpido para mí. Así supe dos cosas: la primera, que es un increíble escultor, y la segunda, que es la persona a la que estoy dispuesta a dedicarle toda mi vida.

2.

Siempre creí que un hombre no debe correr detrás de una chica, no tiene que permitir que una mujer lo controle, no debe dejarse manipular, y siempre tiene que ser el líder, el jefe, el fuerte. Eso pensaba... y luego me enamoré. Ya hace un año y medio que estoy dispuesto a cualquier cosa por mi novia: puedo correr a su primera solicitud a buscar chocolate o helado en medio de la noche, le hago un masaje de pies todo el tiempo, la ayudo a cocinar, siempre lavo los platos, le regalo enormes ramos de sus flores favoritas y otros regalos, y hasta tolero su impuntualidad sin siquiera sentirme irritado.

3.

Salimos con mi novia desde el colegio y durante sus estudios, tuvo grandes problemas con el inglés (el único seis en el diploma). Ahora tenemos 20, y en el último año se ha dejado crecer el pelo (solía usar siempre un "Bob"), perdió 9 kg y aprendió no solo ese idioma, sino también polaco, alemán y francés. Dijo que solo quería cambiar algo. Me inscribí en el gimnasio y comencé a estudiar sueco. Ella me enseña a vivir y respirar a todo pulmón, es mi ideal y mi incentivo.

4.

Me gustan mucho todo tipo de cosas hechas con la técnica patchwork: edredón cosido de trozos de diferentes materiales, falda al estilo gitano, juguetes hechos a mano, etc. Hace poco noté que mi novio tiene todos los dedos llenos de pequeñas heridas. A mis preguntas no hacía más que agitar la mano, diciendo que son tonterías, que no les prestara atención. Ayer regresé a casa del trabajo, y en mi cama había un gran corazón hecho de cientos de trozos de telas de colores. Medio torcido, un tanto inclinado, pero en cuanto me imagino a mi amado haciendo para mí esta belleza, empuñando una aguja torpemente hasta lastimarse los dedos, entiendo que este es el regalo más increíble de toda mi vida.

5.

Con mi novio peleamos periódicamente. Después de las discusiones él siempre se acerca primero. No tengo muy buen carácter y el enojo tarda mucho en irse, sin embargo, trato de trabajar en mí misma, de borrar este orgullo en nombre del amor. Hace poco, peleando de nuevo, no quería ir primera a arreglarme. Tenía miedo a los chistes como "Ah, bueno, solo miren quién vino", pero exhalé y fui. Hubieran visto esos ojos sorprendidos y felices. Nada de bromas, ni malicia. Solo dijo gracias y me abrazó. Me di cuenta de lo importante que es superar el orgullo y cuanto lo amo.

6.

Mi novia es una azafata de alto rango, y cada vez que nos acercamos a nuestra casa en auto, reduzco la velocidad, me cambio al carril derecho, y ella me mira y dice su eslogan: "Damas y caballeros, nuestro avión comenzó a descender, asegúrese de que el respaldo de su asiento, los cinturones de seguridad y las cortinas... están en la posición correcta...", y yo en este momento me siento como piloto de un "Boeing" que está a punto de "pegar" la nave al suelo. Después, lentamente y con cuidado, dejo el auto en el estacionamiento mientras ella sigue balbuceando algo sobre que los pasajeros no se levanten hasta la parada completa de la aeronave. La amo locamente.

7.

Muchas de mis amigas me cuentan sobre las cosas hermosas que sus caballeros hacen por ellas: les regalan grandes ramos de rosas, les dibujan mensajes en el pavimento, les escriben poesías y se trepan hasta sus ventanas. Mi novio no hace nada de eso. Él solo arregló todas las cosas que estaban rotas en mi casa y me ayuda con mi carrera. Estoy estudiando para ser diseñadora, así que tengo que dibujar, hacer y pegar maquetas. Como no me alcanza el tiempo, él las pega para mí, con torpeza, pero diligentemente. Me da su último dinero para que pueda comprar un regalo de cumpleaños para mi mamá, y en estos momentos, soy la chica más feliz del mundo. Nadie me amó tanto antes. Mis compañeras dicen que necesito muy poco para ser feliz.

8.

Amo a mi esposo. Tenemos muchos intereses en común, pasamos divertidas noches en la cocina, conversamos interminablemente. Pero a veces me cierro en mí misma, dejo de sonreír y contesto a sus preguntas ambiguamente. Entonces él simplemente recoge su computadora portátil, un par de calcetines y calzones, me besa en el cuello y se va a la casa de su madre por un par de días. Y yo abro una botella de vino, preparo la cena para una persona, enciendo mi película favorita y comienzo a amarlo aún más.

9.

Estoy internado y comparto la habitación con una abuela nacida en el año 1945. Su marido, todas las tardes le envía mensajes de voz a su smartphone (¡!), pero los escucha en altavoz porque no sabe cómo hacerlo de otra forma. Y él le dice todos los días: "Buenas noches, mi querida...". Llevan casados 54 años.

10.

Mi esposo es piloto, no tiene horarios, hay vuelos a cualquier hora del día o de la noche (generalmente en este último turno); y yo tengo la jornada laboral estándar de cinco días, de 9:00 a 18:00 hs. Siempre me levanto para darle un beso y saludarlo por la ventana. Me quedo en el pasillo, somnolienta, con un desastre creativo sobre la cabeza, envuelta en una bata de felpa gruesa con un gato igual de desaliñado en brazos... En fin, todo un espectáculo. Pero hace poco, me dijo que es en esos momentos cuando él entiende más que nunca lo mucho que me ama.

11.

Hoy, en el autobús, vi una escena bonita. En una de las paradas subió una pareja de ancianos; la abuela se sentó en un asiento vacío y el abuelo se quedó parado junto a ella. Me levanté para darle mi lugar y cuando le ofrecí sentarse, el hombre sonrió muy dulcemente y dijo: "Gracias, hija, quédate tranquila, no me alejo mucho de ella, no quiero perder a mi amada". Y sonriendo, acarició el cabello de la señora. Casi lloro allí mismo.

12.

Era mi cumpleaños. Mi novio, como de costumbre, a las 23:50 hs se fue a la parada del autobús disculpándose por no poder felicitarme primero, diciendo que enviará un SMS. A las 00:00 hs me llega un mensaje de él con el texto: "FC". Estaba escribiendo una respuesta igual de conmovedora cuando escuché un golpe en la puerta. Abro, ¡y entra con un montón de globos! Se queda así en el medio del pasillo, leyendo un poema, con voz temblorosa, nervioso. Me recordó a un niño diciendo por primera vez un texto en un acto escolar. Y es lo más dulce que he visto en toda mi vida.

13.

Estaba lavando los platos en la casa de mi novio. Mientras secaba una taza, se me escapó de las manos y se cayó al suelo. Pensé que él me diría algo, pero me levantó del piso, me llevó por sobre los fragmentos, me sacó de la cocina, luego recogió todas las piezas y limpió el lugar con la aspiradora. Dijo que solo era una taza, que no importaba.

14.

Mi novio es, como se dice, un armario: 205 cm de altura, y una expresión del rostro absolutamente pétrea. Todos lo consideran poco sociable y duro, y solo yo sé que más que cualquier otra cosa ama los abrazos, aunque su tamaño lo complique. Mi altura es de solo 165 cm, pero puedo pararme mil veces al día en un taburete y abrazarlo para ver su alegría sincera y esa sonrisa de satisfacción.

15.

Con mi marido compramos un automóvil a crédito. No somos muy amantes de los préstamos y decidimos pagarlo lo más rápido que nos fuera posible: en un año. El monto de las cuotas era bastante alto, pero abonamos todo de cualquier forma. Lo malo fue que no quedó nada para las vacaciones de verano. Llegó el momento y mi esposo me entregó pasajes aéreos a las montañas diciendo que serán vacaciones de bajo presupuesto, que tiene solo 40 mil y encontró una pequeña cabaña por 15. Había estado haciendo trabajo extra durante los últimos meses para ahorrar, y fueron las mejores vacaciones del mundo, superiores que las de Italia y las de Goa. Nadamos en los lagos, cocinamos, fuimos a las montañas. ¡Regresé embarazada y feliz!

16.

Mi esposa está embarazada y corro como un loco con ella. Un día, llego del trabajo y ella está sentada en el sofá, comiendo anchoas con cebollas junto a... fresas bañadas en chocolate. No me sorprendí, ya estaba acostumbrado. Pero de repente me invitó a compartir la comida con ella, porque "Querido, ¡pruébalo! ¡Es tan delicioso que no se puede creer!", y cuando le dije que me sería físicamente imposible ingerirlo, estalló en lágrimas diciendo que nadie la entiende ni aprecia. Me asusté tanto que comí esa mezcla con ella y ni siquiera me atraganté.

Se diga lo que se diga, es de estas cosas pequeñas que se forma nuestra vida. Y está en nuestro poder hacer que el ser amado conserve tantos recuerdos felices como sea posible. Por cierto, si en alguna de estas historias te has reconocido a ti mismo, o si quieres compartir tus emociones con nosotros, no dejes de escribir. Estaremos encantados de leer tus comentarios.

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