10 Errores al comprar vestuario que nos pueden hacer perder dinero y sacrificar el estilo
Cuando compramos prendas de vestir, muchas veces nos dejamos llevar por el colorido de las telas, las siluetas que están de moda o lo atractivo de los precios. Sin embargo, adquirir ropa o calzado nuevo no es una decisión que se deba tomar a la ligera. Por el contrario, hay varios factores que quizá no consideremos al momento de hacerlo, aunque deberíamos. Debido a eso, lo que compramos no siempre es lo más favorable para complementar nuestro clóset ni para optimizar nuestros gastos.
¿Qué estrategias usas para aprovechar al máximo tu dinero cuando compras ropa? ¿Qué tipo de prendas te salvan en esos días en que no sabes qué ponerte?
1. Ir solo a la sección de ofertas
Puede que la zona de ofertas se vea tentadora como una opción para obtener muchas prendas por un precio bajo, pero hay que tener cuidado para que esa ropa realmente sea útil. De lo contrario, podemos acabar acumulando cosas que nunca vamos a ponernos o, peor aún, que vestiremos aunque no sean del todo de nuestro gusto o no nos hagan resaltar.
Es mejor recorrer todas las secciones de la tienda, incluyendo aquellas que no tienen rebajas, y preferir la calidad por sobre el precio.
2. Desconocer tus medidas
Esto es especialmente importante cuando compramos en línea, ya que nos puede ahorrar devoluciones de productos o decepciones al recibirlos en casa. Que la marca tenga una tabla de medidas en su página web puede ser muy útil. Así, sabremos con anticipación la talla que debemos buscar.
3. Comprar abrigos muy ajustados
Si se trata de comprar piezas que nos mantengan abrigados en climas fríos, es importante tener en cuenta que debajo de un abrigo va a haber otras prendas. Por eso, no es bueno comprarlo muy ajustado. Debemos escoger modelos que puedan ajustarse según el volumen de la ropa que vayamos a usar por debajo de ellos.
4. Usar los calcetines equivocados al ir a comprar zapatos
Los calcetines que usemos deben adaptarse al tipo de zapatos que queramos comprar. De esa forma, sentiremos realmente cómo se ajustaría el calzado a nuestros pies en el uso diario. Si usamos un calcetín muy fino, puede que nos llevemos la falsa impresión de que el ajuste es el adecuado, pero que, al ponernos unos más gruesos, los zapatos se sientan incómodos.
5. Comprar piezas sueltas
Comprar prendas aleatorias, es decir, sin tener en mente un atuendo completo con el que podamos usarlas, hace que acabemos luciendo mezclas que no tienen un estilo definido. Es preferible echar un vistazo a lo que tenemos en nuestro guardarropa antes de salir de compras y, con base en eso, escoger aquellas cosas que puedan servir de complemento a lo que ya tenemos o a la imagen que queremos proyectar.
6. No considerar el tipo de tela
En cuanto a la ropa para hacer ejercicio, hay que tener en cuenta las nuevas tecnologías de las fibras, ya que muchas ayudan a que el sudor se evapore más rápido, lo que puede hacer que nos sintamos más cómodos y frescos. Dependiendo de la actividad física que se pretenda realizar, también podemos poner a nuestro favor las telas de la ropa que usamos.
7. Olvidar sentarse al probarse algo
En el probador, es común que juzguemos cómo nos quedan las prendas mientras estamos de pie. Sin embargo, es importante evaluar también cómo se comporta la ropa cuando nos sentamos y qué tan cómodos nos sentimos en ella en esta posición.
8. No prestar atención al ajuste del saco
Conseguir un saco que sea favorecedor para nuestra figura puede lograrse si miramos primero que su ajuste sea adecuado. Para asegurarnos de conseguirlo, debemos ver que la costura de los hombros quede directamente sobre ellos y que podamos saludar con la mano arriba cómodamente.
El dobladillo inferior también debe rozar el hueso de nuestra cadera, y el final de la manga tiene que quedar sobre la mitad de nuestro pulgar cuando estemos de pie con los brazos a los lados.
9. Confiarse solo del espejo
Los espejos de las tiendas de ropa no deben ser la única fuente de la que nos fiemos a la hora de elegir un atuendo. Recurre a la cámara de tu celular y tómate una selfie o pídele a alguien que te tome una foto de cuerpo entero. Así, podrás acercar la imagen para revisar los pequeños detalles que puedan preocuparte.
10. Menospreciar las agujetas
A la hora de escoger zapatos deportivos, aquellos que se ajustan con agujetas son mejores que los que no las tienen. Estos le proporcionan soporte adicional al pie y también logran mantenerlo estable con respecto a la suela del calzado.