10 Juegos para estimular la mente de tu perro hiperactivo y ayudarlo a calmarse

Los perros con exceso de energía o hiperactivos requieren actividades que combinen estimulación física y mental. Estos 10 juegos y juguetes están diseñados para transformar su vitalidad en aprendizajes positivos, mejorando su comportamiento mientras fortaleces el vínculo que tienes con tu mascota. La constancia en su aplicación es clave para obtener resultados duraderos.

1. Búsqueda del tesoro con premios

Es normal que un perro hiperactivo destruya tus muebles, tu ropa y tus zapatos, incluso. Con esto, tu perro solo te está diciendo que necesita más actividad física y mental. Desarrolla su olfato y concentración mediante escondites estratégicos. Comienza con premios visibles en zonas abiertas, como jardines, parques o patios. Luego, lleva el juego hacia lugares más creativos, como cajas o debajo de la cama. Sesiones breves pero frecuentes son más efectivas que actividades largas y esporádicas.

2. Alfombra olfativa casera

Fabrícala con materiales sencillos como una toalla y tiras de tela. Esconde croquetas entre los pliegues para estimular su instinto de búsqueda y su olfato. Supervisa siempre para asegurar que no ingiera materiales no comestibles durante el juego.

3. Circuito de obstáculos improvisado

Crea un recorrido seguro usando muebles y objetos cotidianos. Inicia con dos o tres elementos básicos como túneles con sillas o saltos bajos para que tu perro entrene y entienda cómo superar estos obstáculos. Debes considerar el físico de tu perro en el diseño de este recorrido, qué tan ágil y qué tan pesado es. Aumenta gradualmente la complejidad según su progreso, premiando cada logro. Con esta actividad, tu perro podrá desarrollar su agilidad y su coordinación, lo que es importante para su salud.

4. Juego de los vasos para memoria

Usa tres recipientes idénticos y un premio escondido. Muéstrale a tu perro claramente dónde colocas la recompensa al principio, luego aumenta la dificultad. Este ejercicio fortalece su capacidad de atención y memoria a corto plazo.

5. Paseos enriquecidos con desafíos

Al pasear con tu perro, incorpora cambios de ritmo, paradas para órdenes básicas, como “siéntate”, “quieto”, “al suelo”, etc. Además, prueba con diferentes terrenos. Varía las rutas regularmente para exponerlo a nuevos estímulos olfativos y visuales. Estos elementos mantienen su mente activa durante el ejercicio físico.

6. Sesiones de juego estructurado

El clásico “tira y afloja” enseña autocontrol cuando estableces reglas claras. Tu perro tiene que soltar cuando le des la orden y morder cuando le des la orden. Limita las sesiones a 10-15 minutos y usa siempre juguetes diseñados para este fin. Termina el juego mientras aún está interesado para mantener su motivación.

7. Caza de burbujas seguras

Usa burbujas especiales para perros en espacios abiertos. Elige fórmulas no tóxicas, asegúrate de que sean para perros. Supervisa siempre para evitar que ingiera el líquido de las burbujas en exceso durante la actividad.

8. Entrenamiento de obediencia básica

Dedica 5-10 minutos diarios a reforzar comandos como "sentado" o "quieto". Usa premios de alto valor y mantén las sesiones cortas pero consistentes. Este entrenamiento mejora su capacidad de concentración.

9. Juego de escondite interactivo

Escóndete en otra habitación y llama a tu perro para que te encuentre. Comienza con escondites evidentes y aumenta gradualmente la dificultad. Este juego fortalece la conexión que tienes con él/ella mientras ejercita sus habilidades de búsqueda.

10. Actividades de estimulación sensorial

Crea experiencias táctiles con diferentes texturas bajo sus patas. Usa superficies como alfombras, cartón o plástico con burbujas bajo supervisión. Estas actividades lo ayudan a procesar estímulos de su entorno de forma controlada.

Implementar estos juegos de forma regular puede transformar significativamente el comportamiento de tu perro hiperactivo. La combinación de estimulación física y mental, adaptada a su nivel de habilidad, proporciona el equilibrio perfecto para canalizar su energía. Recuerda ser paciente y celebrar cada pequeño progreso en su aprendizaje.