10+ Razones por las que la obesidad no es sinónimo de enfermedad, según los expertos
El discurso al que a menudo nos enfrentamos las personas con sobrepeso o con cuerpos más grandes es el relacionado con la salud. Lamentablemente, este discurso tiende a centrarse únicamente en nuestras medidas físicas, sin tener en cuenta si realmente padecemos alguna enfermedad o si llevamos un estilo de vida activo. Es crucial desmitificar la creencia errónea de que una persona con sobrepeso siempre está enferma y, a su vez, que una persona delgada es automáticamente saludable. Por ello exploraremos la importancia de alejarnos de estos estereotipos y entender que la salud va más allá de la apariencia física.
Existen una serie de razones para, en primera, evitar mencionar a una persona que debe bajar de peso por su salud, y dos, para asumir que tiene una enfermedad por sus medidas corporales, aquí listamos algunas:
- El estigma que existe alrededor de la gordura es tan grande que, de acuerdo con la nutrióloga Nadia González, cuando una persona gorda acude al doctor, lo primero en lo que se centra la atención es en su peso, incluso antes del malestar debido al que acudió a revisarse.
- La escala con la que se clasifica el peso es el Índice de Masa Corporal (IMC), el cual se obtiene a través de una fórmula que se basa en el peso y la estatura, pero no distingue cuánto del peso es de músculo ni cuanto de grasa. Además, según críticos, estos análisis no toman en cuenta la condición física o actividad que realiza una persona.
- Estudios que toman en cuenta tanto peso como actividad física concluyen que “estar en forma es más importante que la gordura”, esto, según se señala, al menos en las personas con sobrepeso u obesidad leve.
- Continuando con los estudios, estos han comprobado que las personas obesas con altos niveles de grasa también pueden tener una buena salud física. En Estados Unidos se hizo un estudio en el 2012 en el cual participaron alrededor de 40 mil personas, y se encontró que en realidad la diferencia entre las personas obesas sanas y no sanas se centraba en los niveles de condición física.
- Recalcando la situación que ocurre con el Índice de Masa Corporal, se señala que este ha confundido a las personas sobre lo que significa estar saludable. Otro estudio, esta vez realizado en Inglaterra, destacó que una persona con sobrepeso u obesidad que lleva un estilo de vida activo, con actividad física de moderada a alta, tiene más posibilidades de ser saludable.
- Carl Lavie, quien es director médico de Rehabilitación Cardiaca y Cardiología Preventiva del Instituto Cardiovascular John Ochsner en Nueva Orleans, señala un punto relevante: “La gente no intenta engordar. No está tratando de ser obesa. Un mejor mensaje sería decirle a la gente que si logra ser más activa físicamente, puede mejorar su pronóstico, a pesar de tener unos kilos de más. Eso es un mejor mensaje y un objetivo más fácil de lograr”.
- De acuerdo con Lesley Kinzel, autora de “Dos tortas enteras: cómo dejar las dietas y aprender a amar tu cuerpo”, al menos un tercio de la gente obesa no es más propensa a tener diabetes o problemas cardíacos. Sin embargo, recalca, los doctores pueden estar menos dispuestos a escuchar a los pacientes al enfocarse solo en su peso.
- No podemos dejar de lado el hecho de que los riesgos de padecer determinadas enfermedades existen, y pueden aumentar en personas con sobrepeso, no obstante, como David Katz, director fundador del Centro de Investigación en Prevención de Yale menciona: “Para los adultos, un IMC superior a 30 se asocia con un mayor riesgo de enfermedad, discapacidad y muerte. Sin embargo, un factor de riesgo no es una enfermedad, porque cada uno puede ocurrir independientemente del otro”.
- En cuanto a la diabetes, Tracey McLaughlin, profesora asociada en la División de Endocrinología en Standford, afirma: “No todas las personas con sobrepeso y obesidad son metabólicamente insalubres. Solo alrededor de la mitad de ellas tienen resistencia a la insulina, y las consecuencias para la salud relacionadas con la obesidad se concentran en este grupo”.
- Cabe destacar que, según especialistas, al estar recalcando el peso de otra persona y hacerlo sentir culpa o vergüenza, puede incluso promover el aumento de peso, pues es posible que las personas afronten la situación afectando si salud física, que eviten el ejercicio por sentir pena o que su salud mental se vea comprometida.
- Por ejemplo, alguien con un IMC “saludable”, o que se ve delgado, puede que en realidad no tenga buena salud. Del mismo modo, las personas más musculosas, como los jugadores de rugby, a menudo se clasifican con un IMC “obeso”, pero gozan de buena salud.
Bono: Ser delgado no es sinónimo de salud
Un estudio encontró que las personas con bajo peso sin problemas de metabolismo pueden tener mayor riesgo de presentar un derrame cerebral que aquellos que tienen un peso considerado normal, sobrepeso u obesidad y no tienen problemas metabólicos.
Se puede resumir que el hecho de ser alguien físicamente activo es más relevante que el peso, pues, como vimos, se puede tener un IMC alto o bajo, pero este no toma en cuenta cómo es la vida de la persona en cuanto a sus hábitos.
Es relevante hacer énfasis en que señalar los cuerpos grandes solo trae consigo más estigma que puede dañar la salud, y que el hecho de intentar perder peso a como de lugar sin tener un panorama amplio de la situación puede ser algo dañino e ineficaz. También es importante siempre consultar con especialistas para saber cómo se encuentra nuestro metabolismo, más allá de nuestro físico.