14 Padres que fueron citados a la escuela de sus hijos con urgencia por razones absurdas

hace 2 años

Cuando se cita a los padres a la escuela, significa que los maestros no están contentos con el niño, con su diligencia o comportamiento. A veces, durante estas reuniones se desarrolla un diálogo constructivo; pero en otras ocasiones, el padre o la madre del alumno escucha las afirmaciones de los profesores y apenas pueden ocultar su asombro, ya que la razón les parece absurda.

En Genial.guru, no pudimos ignorar estas historias a las que no supimos ni cómo reaccionar: si encogernos de hombros o reír. Pero después de leerlas, la verdad es que es difícil percibir las reuniones escolares como una tragedia universal. Y en el bono encontrarás una historia de cuando las afirmaciones están bien fundamentadas, pero aún se pueden tratar con humor.

  • Me citaron porque la escuela se iba de viaje y mi hijo olvidó pedirme firmar el permiso para ello. Así que decidió falsificar la nota. Estaba en primer grado, por lo que su letra era terrible. También firmó por mí, garabateando “Mamá”. © mulletamore / Reddit
  • Me citaron a la escuela. El profesor de Biología de mi hijo me entregó inmediatamente su cuaderno de trabajos en laboratorio, que contenía descripciones, acciones, progreso del trabajo y, al final, la conclusión: “Desperdicié 40 minutos de mi vida por nada”. Me acordé de mí mismo a su edad y decidí no castigarlo. © Bash.im
  • Mi hijo se interesó en la programación. A la edad de 14 años, comenzó a recibir un poco de dinero; a los 16, ya había comenzado a ganar decentemente gracias a ello. Antes de la secundaria, dijo que quería mudarse y alquilar un departamento. Tenía dinero para hacerlo, era un muchacho independiente, así que se lo permitimos. A mediados de año, me citaron a la escuela y me pidieron que trasladara a mi hijo a otro lugar. Ya que, debido a él, los otros niños ahora también querían departamentos propios y, en general, que yo socavaba la autoridad de todos los padres. © Oídoporahí / VK
  • Mi hijo estaba en 1.er grado. Era de día, el trabajo estaba en pleno apogeo, sonó mi teléfono, era la maestra: “Estimada señora..., le pido que venga a la escuela hoy”. Después de clases, entré a la oficina. La maestra me recibió y dijo que otra maestra había traído a mi hijo al aula. Ella lo detuvo en el pasillo porque el niño corría, y luego tuvieron el siguiente diálogo entre ellos:
    —Niño, ¿de qué grado eres?
    —Primero.
    —Está bien, le diré a tu maestra que cite a tus padres a la escuela.
    —No funcionará, es que mi madre está en el hospital hace 3 días y mi padre está de viaje de negocios.
    —¿Y con quién vives?
    —Con mi hermana de 10 años.
    —¿Pero qué comen?
    —Mi hermana me hace fideos.
    Después de tal diálogo, la maestra, por supuesto, fue con el director. Allí decidieron enviar al pobre niño al comedor para que lo alimentaran. Luego pasaron por la oficina de la maestra encargada. Menos mal que ella estaba advertida de que a nuestro hijo le gustaba inventar cuentos. Descartaron el 70 % de lo que dijo, y el 30 % restante decidieron verificarlo. Ella tranquilizó a todos: la mamá está viva y bien, el papá tampoco se fue a ningún lado, todos pueden dormir tranquilos. Pero se me advirtió que la próxima vez, las autoridades de protección de la niñez podrían venir a visitarme. Salí del aula con los pelos de punta. Y mi hijo actuaba como si nada hubiera pasado: “Mamá, lo dije para que no los citaran a la escuela”. © Ibrksy / Pikabu
  • Mi hijo comenzó a asistir a una nueva escuela. Le gustaba y todo iba bien. De repente, me llegó un mensaje: me pedían que fuera con la maestra encargada de la clase. No podía comunicarme con el niño por teléfono, así que no sabía de qué se trataba. Me apresuré y llegué corriendo, con el cabello desaliñado; mi hijo es creativo, pero cuerdo, ¿qué podría haber pasado? Resultó que el director había visto que el niño iba a la escuela no con pantalones, sino con jeans negros, y esa era la última advertencia, ya que era nuevo, pero la próxima vez no se le permitirá entrar a las clases. ¿Era necesario causar tanto lío por eso?
  • A mi prima la citaron a la escuela. A la reunión asistieron una maestra, una enfermera escolar y una psicóloga. Le mostraron un dibujo de un niño pequeño entre la mamá y un papá francamente gigante. “Estamos preocupados por la situación en su familia, claramente hay un desequilibrio, esto puede llevar a serios problemas”. Mi prima comenzó a reír a carcajadas. “Tengo una teoría diferente”, dijo. “Es que mido 1,65 m de altura y mi marido mide más de 2 m”. © Frank Gelly / Quora
  • Una vez, cuando estaba en sexto grado, citaron a mi madre a la escuela para hablar de mi comportamiento; dijeron que estaba peor que nunca. Ella fue, y yo me preocupé mucho. Mamá habló con la maestra de Biología; ella le dijo que yo era inadecuado, incontrolable, que decía malas palabras en el aula, no aprendía nada del material y que era un mal estudiante. Mamá se sorprendió y dijo: “Pero si él va a una escuela de música, estudió teatro durante 6 años, lee libros de adultos”. La maestra no le creyó y dijo: “¿De qué me está hablando?”. Entonces, mi madre se dio cuenta de que algo no estaba bien aquí. Llamó a casa y decidió organizar una confrontación citándome a mí. Cuando llegué, la maestra dijo: “No es él”. Ella estaba hablando del chico que se sentaba a mi lado, y no se podía decir que fuéramos similares en apariencia o que nuestros nombres sonaran parecidos. © valar93 / Pikabu
  • Mi padre fue citado a la escuela donde, indignados, le mostraron el cuaderno de mi hermano, firmado así: “Cuaderno del chico que lucha por el derecho de llevar el nombre de Alexis B”. © Bash.im
  • Una vez, citaron a mi madre a la escuela porque resolví el problema en el pizarrón de una manera diferente. En la opinión de la maestra, la respuesta simplemente coincidió. Pero mi madre simplemente no participaba en las extorsiones habituales y la maestra trataba de intimidarla como podía. © Asiya Chatzidamianos / Facebook
  • El logopeda citó a mis padres a la escuela. Su hija mayor, de segundo grado, estaba aficionada con la astronomía y la ficción espacial de una forma inusual para su edad. Cuando se le pidió que dijera unas palabras con la letra “r”, dijo “Magnetar”, “Andrómeda” y “Cosmódromo”. Durante media hora tuvieron que escuchar que la niña sabía demasiado. © igumin / Pikabu
  • Una vez, a mi mamá la citaron a la escuela y le dijeron que yo les estaba quitando la comida a mis compañeros de clase. Yo era la más pequeña de la clase, flaca, bajita, no podía quitarle un pedazo de pan ni a un pajarito, por eso mi madre no podía creer lo que oía. Resultó que se trataba de la vez que mi amiga-compañera de clase compartió panqueques y mermelada conmigo en el comedor. Ella tenía unos kilos de más y quería perder peso. La maestra encargada de la clase dijo que quien pagaba la comida se la tenía que comer. Y si no la comía, la tenía que tirar.
  • Mi tío le permitía a su hijo mirar South Park con él. Una vez, en 1.er grado, la maestra escuchó al chico susurrar malas palabras. Cuando ella se le acercó para hablar al respecto, él también la maldijo. Mi tío fue citado a la escuela, y cuando la directora le contó lo sucedido, se disculpó, pero no pudo evitar reírse. Entonces, mi abuela fue citada a la escuela. Después de todo, el director era antes el maestro de mi tío, por lo que tenía el reflejo de llamar a la abuela para informar de su mal comportamiento. © lagwagonlead / Reddit
  • Llamó la maestra y me dijo que los chicos de la escuela estaban mirando fotos de mi hija en ropa interior. En sexto grado. Resultó que mi hija se había tomado una foto para su amiga con pantalones cortos de mezclilla y una playera; se había levantado la playera, dejando al descubierto su abdomen, para mostrar los cuadritos que tenía. Y entonces, alguien robó esa foto. Además, la foto era bastante modesta. Pero la maestra, por supuesto, me tensó terriblemente con su expresión inicial. © Marina Anatolievna Topolnitskaya / Facebook
  • Mi amiga es pintora, se gana la vida con eso, en nuestro pequeño pueblo, mucha gente la conoce. Este año, su hijo fue a la escuela. También le gusta dibujar. Cuando había algún tipo de concurso, él se ofrecía como voluntario con mucho gusto. Pintó un hermoso paisaje en acuarela. Lo trajo a la escuela y le dijeron que tenía que pintar él mismo, sin la ayuda de su madre. La citaron a la escuela. Ella miró el paisaje y dijo: “O sea, en su opinión, ¿así es como pinta un artista con 20 años de experiencia?”. © Oídoporahí / VK

Bono: recomendado por papás

  • En sexto grado, después de las vacaciones de fin de año, mi hijo y sus amigos de la escuela volaron el inodoro en el baño de los maestros utilizando los petardos que habían quedado después de las vacaciones. Todos los padres fueron citados a la escuela para escribir notas explicativas. Los papás de esos amigos de mi hijo me llamaron y me dijeron que fuera solo al día siguiente, y ellos reemplazarían el inodoro. Me eché a llorar y les dije: “¡¿En qué tipo de delincuentes se están convirtiendo nuestros hijos?!”. Los padres, en respuesta, dijeron que ellos habrían arrojado levadura en el inodoro; el efecto habría sido aún más interesante. © Olga Zhigulina / Facebook

¿Te han citado a ti o a tus padres a la escuela en ocasiones que resultaron ser graciosas o absurdas?

Comentarios

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No me parece absurdo que te llamen si tu hijo falsifica las notas

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Muy divertida la historia del dibujo de la pareja con gran diferencia de altura XD

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