14 Personas que necesitan una dosis urgente de generosidad en grandes cantidades

Esta es una colección de historias sobre personas realmente sorprendentes, que a veces ahorran en lo más insignificante o se aprovechan descaradamente de los demás. La avaricia no solo se trata de una madre que regala migajas en la boda de su hijo. A veces, las personas despilfarran el dinero de sus seres queridos en diversión sin sentir ni un ápice de culpa.

• Pensé que había alquilado mi apartamento a gente decente. Una familia respetable: el esposo es ingeniero en informática, la esposa es maestra, y tienen dos hijos. ¡Pero qué agotadores resultaron ser! Me llaman por cualquier cosa, incluso si se les funde un foco, esperan que se los lleve personalmente. Siempre les digo que puedo transferirles dinero para cubrir el costo de lo que se estropee, pero no voy a cruzar toda la ciudad por algo tan trivial. Sin embargo, insisten en llamarme y pedir que vaya. ¿En serio hay un hombre de 35 años en esa casa que no puede cambiar un simple foco? Y lo más reciente: me llamaron para decirme que se les rompió el cepillo del inodoro. ¿De verdad esperan que vaya a comprarles uno nuevo? Les transferí el dinero sin decir nada, pero aún no puedo creer que me hicieran semejante petición.
• Mi hermano se quejaba recientemente de que gastar en su novia le está saliendo demasiado. Prepárense para su lista de gastos “excesivos”: una segunda almohada con su funda, un limpiador para el baño, y una aspiradora. No ha pasado ni un mes de vivir juntos y ella ya quiere limpiar profesionalmente el sofá. ¡Qué horror!
• En el primer año de nuestra relación, le regalé un anillo de oro y una pulsera. En el segundo año, un teléfono y adornos desmontables para la pulsera. En el tercero, una tablet y una laptop. En el cuarto nos casamos. Luego, en el quinto año, le regalé un conjunto de muebles especiales para su trabajo de manicura, un curso, y una cadena con una piedra. En otras ocasiones, nunca faltaron flores. Ella, en cambio, me ha regalado (en orden): una gorra, calcetines, un cargador portátil, y una bicicleta. Amo a mi esposa, pero no puedo evitar sentir que hay algo de injusticia.

• Durante un vuelo a Dubái, pagué por un asiento prémium, ya que el vuelo duraba catorce horas. Un hombre sentado a mi lado me pidió cambiar de asiento con su esposa, que estaba en su luna de miel. Le pregunté dónde estaba ella sentada. Señaló la parte trasera del avión, en clase económica. Le dije: “Está bien, pero me tienes que pagar 600 dólares”. Él respondió: “No puedo, tenemos un presupuesto limitado para el viaje”. Por supuesto, me negué. Empezó a insultarme, y le respondí que la culpa era suya. Debería haberle cedido su asiento o haberse sentado con ella desde el principio. Le conté todo a mi esposa, pero ella cree que debería haber cedido. Cabe destacar que ella odia volar en clase económica, así que sé que ella no se habría cambiado. © UsualSuccess7450 / Reddit
• Mi esposo y yo acordamos que mis pagos por licencia de maternidad se acumularían en mi cuenta, como un ahorro personal. Él se encargaría de mantenernos a mí y al bebé. Estaba emocionada, pensando en ahorrar para un abrigo de piel, algo que siempre había deseado, aunque mi esposo siempre decía que no lo necesitaba. Pasó un año y medio, y había ahorrado una cantidad considerable. Mi esposo cumplió su promesa a medias: me daba dinero, pero registraba meticulosamente cada gasto. A menudo me reprendía por comprar productos demasiado caros, y casi no me daba dinero para mí, diciendo que no necesitaba lucir bien para nadie. Recientemente, me pidió que entregara todos mis ahorros de la licencia de maternidad porque su coche necesitaba una reparación. Discutimos, y no le di el dinero. La situación llegó al punto en que me señaló la puerta. ¡Estoy en shock! ¿Echarme a mí y a nuestro hijo por dinero? He cambiado mi forma de verlo y estoy muy decepcionada.
• Vivo con mi mamá, mi hermano mayor y mi padrastro. A menudo horneo, pero el problema es que mi hermano se come todo sin preguntar. Ayer hice galletas para mi mamá. Hice 30 galletas medianas. Yo comí 3, mi mamá 5, y mi padrastro 2. Mi hermano se comió el resto mientras todos dormíamos. Y no siente ni una pizca de vergüenza. © Worldly-Mechanic-903 / Reddit

• Llevo 20 años casada. Mi esposo siempre ayudó a su madre económicamente, pero desde que nos casamos, gasta más en mí y en nuestro hijo. Mi suegra intenta manipular la situación. Recientemente, habló con nuestro hijo de 14 años y le pidió que le dijera a su papá que no tiene suficiente dinero. Esto no es cierto, ella está bien económicamente. La conversación fue por altavoz, así que escuché todo. Luego llamé a mi suegra y le pedí que controlara sus apetitos. Le recordé que nos regaló 10 dólares en nuestra boda. © NotaKarennamedKaren / Reddit
• Tengo dos hermanos mayores. Ambos tienen trabajos estables, e incluso uno es copropietario de una empresa. Sin embargo, solo llaman a nuestro padre y a la abuela cuando necesitan dinero. ¡Ni siquiera los felicitaron en Año Nuevo! Yo, en cambio, nunca les pido dinero, siempre me las arreglo sola. Mi papá se hartó de la situación y les dijo a mis hermanos que dejaran de sacarle dinero. Además, decidió comprarme un coche, aunque no es nuevo. Cuando mis hermanos se enteraron, se enfurecieron, diciendo: “¿Por qué ella recibe todo y nosotros nada?”. Les recordé rápidamente que papá les compró coches a ambos. © MidnightBallad / Reddit

• Renuncié a mi trabajo porque ya no soportaba el ambiente. Estoy buscando otro (llevo menos de una semana). El hombre con el que vivo empezó a “bromear” diciendo que debería apurarme en encontrar trabajo, “o terminarás viviendo a costa mía”. Y eso que durante casi un año he estado comprando toda la carne, alimentos y productos para el hogar. Cocino, limpio, lavo... hago todo. Él paga el alquiler, las facturas y el internet (vivimos en una región donde el alquiler es bajo). Cuando nos mudamos juntos, dijo que el dinero no sería un problema, que él se encargaría de todo. Pero ahora parece que, si no lo alimentara, nuestra relación no existiría.
• Mi hermana tiene un buen salario y sabe ahorrar. Y ahorra en todo lo que puede. Paga las facturas en el banco que no cobra comisión. En las tiendas, busca productos y ropa en oferta. Eso está bien, supongo. Pero también encontró una tienda donde venden alimentos ligeramente caducados a precios ridículos. En ese momento, pensé que ese nivel de ahorro ya era demasiado.

• Pronto me voy a casar. Mi prometida y yo habíamos acordado que viviríamos en su apartamento y alquilaríamos el mío, obteniendo así un buen ingreso. Sin embargo, una vez que nos mudamos juntos, ella comenzó a insistir en que vendiera mi propiedad y usara el dinero para la boda y hacer una remodelación. Le expliqué que, en caso de perder mi empleo, el alquiler nos ayudaría a mantenernos. Pero ella no quiere ni escuchar. Esto provocó una gran discusión: mientras yo busco ahorrar, ella parece más interesada en gastar. Le recordé sus deudas con las tarjetas de crédito, lo que solo la enfureció más. Intenté reconciliarme, pero ella seguía insistiendo en la venta. Al final, recogí mis cosas y me mudé a casa de mis padres, quienes ni siquiera se sorprendieron. © realestate_reptile / Reddit
• La familia de mi esposo se dedica al negocio de la joyería. Recientemente, tuvimos un hijo, y mi esposo le hizo un hermoso collar. Una pariente lejana, llamada Karla, no paraba de criticar el collar, diciendo que era de mal gusto. En realidad, ella es una prima lejana, hija de la sobrina de mi padrastro. En una cena familiar, Karla anunció que también quería un collar para su hijo, pero gratis, por supuesto. Mi esposo le respondió que solo podía ofrecerle un descuento. Karla se enfureció tanto que su madre me llamó para decirme que, ya que había encontrado una “mina de oro” en mi esposo, debería compartirla. Estoy asombrada por la avaricia de esta familia. © jewellersbaby / Reddit
• Cuando era estudiante, trabajaba como niñera en las tardes para una familia encantadora. Pero cuando la madre del niño empezó a trabajar desde casa, ya no necesitaron mis servicios. La esposa de mi tío, al enterarse de mi experiencia, decidió que yo podía cuidar a sus tres hijos. Pensé que podría manejarlo, pero...

• Cuando era joven, salí con un chico extremadamente tacaño. No era pobre; había terminado una prestigiosa universidad en la capital y sus padres lo habían colocado en un buen puesto en nuestra ciudad natal. Su salario en ese entonces era el equivalente a lo que yo ganaba en seis meses. Yo era bastante joven y muy tímida, incapaz de decir lo que me molestaba. Recuerdo que me invitó a una cita al cine una noche. El clima era terrible, así que le pedí que me recogiera, pero se negó, diciendo que no tenía tiempo. No quise parecer exigente, así que fui por mi cuenta. Me recibió en la entrada sin flores y de inmediato quiso besarme, lo cual me resultó desagradable. Cuando llegamos a la taquilla, ocurrió algo digno de un chiste: compró un boleto solo para él. Me dijo el asiento y la fila para que comprara mi propio boleto junto a él, y luego se apartó. Por despecho, compré un boleto en el otro extremo de la sala. Ya con sus palomitas en mano, me sugirió amablemente que yo también comprara las mías. Su sorpresa fue mayúscula cuando me dirigí a mi asiento lejos de él. Luego hizo como si estuviera ofendido y se fue sin despedirse. En ese momento pensé: “Qué suerte que esta relación no llegó a más, se mostró tal como era a tiempo”.

Además, tenemos un artículo sobre 12+ Expertos en el arte del engaño que entienden este mundo a la perfección