14 Personas que solo querían hacer unas compras, pero terminaron llevándose una historia en un millón

En la mayoría de los casos, ir de compras es extremadamente aburrido. Sin embargo a veces, en una tienda, supermercado o centro comercial, presenciamos o participamos en escenas tan divertidas que podrían usarse para escribir un stand-up y representarlo en un “micrófono abierto”.

¿Qué situaciones divertidas, ridículas o extrañas has experimentado durante alguna de tus habituales salidas de compras?

• Estaba parado en la caja en el supermercado comprando algo para el almuerzo. El cajero era un chico joven. Su colega se acercó por detrás de mí y le entregó unos papeles. Naturalmente, no lo vi, y cuando el cajero estiró su brazo para agarrar los papeles, le estreché la mano sin pensar. Él no se sorprendió, sonrió y dijo: “Hola”. Y yo me alejé del cajero en puntillas, como el gato Tom de la caricatura. © Positive.Person / Pikabu
• El otro día, en la tienda, después de pagar la mercancía, me alejé de la caja y el guardia se me acercó de un salto:
  —¡Joven! Por favor, desabroche su chaqueta, tengo la sospecha de que tiene algo escondido debajo de ella.
  No tenía nada que esconder y me desabotoné la chaqueta.
  —Oh, es la barriga... —El guardia asintió con satisfacción.
  ¡El hombre me animó todo el día! © superedward / Pikabu
• Una vez estaba en la fila de la caja y de repente vi a un hombre con un traje de banana de cuerpo entero que pasó rápidamente frente al supermercado. Desapareció en dirección al estacionamiento y luego entró corriendo por otra entrada. Pero lo más sorprendente era que todo el tiempo corría detrás de él un hombre con un traje de gorila gigante. El resto de los compradores ni siquiera se dieron cuenta de esto. © paulipauli / Reddit

• Fui a Japón con un amigo por un tiempo corto. Un día, estábamos haciendo compras discutiendo en voz alta. Otro día, tuvimos una pelea en un supermercado en la sección de verduras. Él me sacó de quicio y le grité: “¡Por favor, ya me cansaste! ¡Si encontrara al menos un hombre de verdad aquí, me iría inmediatamente con él!”. La voz de un joven desde la sección de frutas: “Creo que ya lo encontraste”. Ya llevamos tres años juntos, nos amamos mucho. © Oídoporahí / Vk
• Corrí al hipermercado por una barra de chocolate para la enfermera. Apurada, con la cabeza en cualquier lado. Mientras corría, metí la barra de chocolate en mi bolso y me puse en la cola de la caja. Llegó mi turno, yo miraba al cajero con las manos vacías y el cajero me miraba fijamente a mí. Menos mal que entré en razón antes de llamar la atención del guardia y busqué en mi bolso la barra de chocolate. © A / Genial.guru
• Accidentalmente, mientras estaba haciendo compras, choqué con un maniquí y le pedí disculpas. Y poco después choqué con una persona real y le dije a mi amiga: “Otra vez me topé con un maniquí”. Él se dio vuelta y dijo que en realidad no era un maniquí. © justanotherkirbystan / Reddit

• Recientemente, en un supermercado pagué mis compras en la caja de autoservicio. Pasé todos los productos por el escáner, los puse en dos bolsas y salí tranquila hacia mi casa. Caminé 10 metros, y me parecía que había olvidado algo. Resultó que había olvidado pagar. © Oídoporahí / Vk
• Mi esposa y yo estábamos en la caja. El precio de compra era de 19 USD. Mi esposa le dio a la cajera 100 USD. Diálogo:
  Cajera: “Oh, ¿no tienes 1 USD? Te daría 80 USD”.
  Esposa: “Sí, por supuesto, aquí tienes”.
  Yo: “Cariño, esto es una especie de matemática incorrecta, ella debería darnos 1 USD”.
  Cajera: “¡Claro que es correcto! Usted no entiende”.
  Esposa: “¡Sí, es cierto! Aquí tienes. ¡Gracias, adiós!”.
  Cuando pude explicarle todo a la salida de la tienda, ella se sonrojó, pero no quiso regresar. © yegreS93 / Pikabu
• Empujé a un hombre en la tienda y traté de decir “lo siento” y “disculpe” al mismo tiempo y dije: “LO DISCULPO”. © ankiyara / Twitter

• Una vez, en una tienda, traté de pagar las compras con mi tarjeta de la biblioteca en lugar de mi tarjeta de crédito. © BECKYISHERE / Reddit
• Entré a la tienda y en la sección de dulces por granel había una abuelita con un perro en sus brazos. Ella tomaba un dulce, lo desenvolvía y se lo daba a lamer al perro. Después lo volvía a envolver y lo aventaba al montón de dulces. Y se iba por el siguiente. En ese momento pasó un empleado de la tienda, miró brevemente y siguió su camino. Pues, la abuelita se estaba divirtiendo. © Noconformist / Pikabu
• Fui a una tienda cercana a casa. Delante de mí había un hombre bien vestido. Él pidió unos plátanos de los más feos con manchas negras. La vendedora le preguntó: “¿Tu hija está de visita?”. Él respondió, suspirando: “Sí”. ¡Qué locura! Pensé en ese momento. Cuando se fue el hombre, la vendedora me dijo que su hija estaba obsesionada con proteger el medioambiente. Y que no le gustaba que la tienda tirara un buen producto con un aspecto poco agradable solo porque nadie lo compraría y obligaba a su padre a hacerlo". Estas situaciones también suelen pasar.