19 Historias de bodas más dramáticas que una telenovela brasileña

Historias
hace 2 meses

Una boda es uno de los acontecimientos más románticos de la vida. Sin embargo, a menudo detrás de la bella imagen hay todo un drama, cuyos participantes pueden ser tanto familiares y amigos de los recién casados, como los propios celebrantes. Algunas situaciones causan risa nerviosa, otras, una ráfaga de emociones, y hay algunas que simplemente ponen en un estado de estupor.

  • Nuestra querida madre se distinguió en la boda de mi hermano. En lugar de felicitar con lágrimas en los ojos a su hijo mayor por su boda, pronunció tal discurso que toda la sala se rio a carcajadas. Mirando al novio, y luego a mi hermana y a mí, dijo: "¡Andrés, por fin te has independizado de mí! Ojalá se independicen todos de mí de una vez ya". © Oído / VK
  • Hace poco estuve en la boda de unos viejos amigos y presencié una situación de lo más incómoda. El maestro de ceremonias se paseó por la sala, eligió invitados al azar y les pidió que hicieran un brindis y entregaran su regalo. Se acercó a uno y le dio el sobre, y a otro también. Pero entonces el maestro de ceremonias decidió abrirlo por alguna razón, y resultó estar vacío. El tipo, por supuesto, fingió que era una broma, rápidamente encontró dinero en la cartera, lo metió, todos se rieron. En ese momento fui sigilosamente al baño y también metí el dinero en el sobre vacío que había traído conmigo. © Cámara 6 / VK
  • A mí, siendo novia, según la tradición, me querían "secuestrar". Pero al final solo permití que me robaran un zapato antes del baile. Y fue muy divertido. El mantel de la mesa de los recién casados era corto, así que todos los invitados vieron cómo mi hermano pequeño gateó por debajo de la mesa, me quitó el zapato, pasó a gatas cerca de los pies del novio, salió a gatas de debajo de la mesa por el extremo opuesto, se sacudió y se fue con el "botín". Solo mi esposo no se dio cuenta de nada. Como "rescate", cada uno de los amigos del novio brindó por turno, y el zapato fue devuelto. © Taisia K / ADME
  • Mi boda se celebraba en mi ciudad natal: a mis ancianos padres les resultaba difícil viajar lejos. Llegaron mis suegros y empezaron a quejarse abiertamente de todo. La catástrofe ocurrió en el registro civil. El encargado del registro estaba dando un discurso, y entonces la madre del novio saltó hacia mí como una loca e intentó arrancarme algo del cabello, diciendo: "¿Dónde te habías metido? Tienes ramas en el pelo". Me quedé estupefacta: "Es una rosa viva, un adorno para el peinado. La peluquera me la puso". El encargado nos miró con ojos abiertos de par en par. Mi suegra se desanimó y murmuró: "Son raros en esta ciudad. No nos ponemos esas cosas en el pelo".
  • Fue uno de los días más estresantes de mi vida. Fui dama de honor en la boda de una amiga. Se podría pensar que sería genial. ¿Qué podría salir mal? Pero uno de sus familiares me dijo de repente: "¿Has preparado un programa? Sabes que el trabajo de la dama de honor es entretener a los invitados, ¿verdad?". Cuando se enteró de que no lo sabía, me regañó, me pasó una bandeja y me obligó a ir a pedir dinero a los invitados. Y los invitados eran 20 personas que ya habían hecho sus regalos. Todavía me estremezco cuando lo recuerdo. © Oído / VK
  • La madre de mi marido estaba locamente celosa de mí. Y cuando me enteré de que se había comprado un vestido blanco para nuestra boda, y largo hasta el suelo, me enfadé mucho. Mi marido intentó hablar con ella, pero le dio un berrinche. Así que me rendí y me compré un vestido naranja brillante. No tenía por qué ir de blanco, pero quería destacar. Lo hice y mi suegra estaba furiosa. © Overheard / Ideer
  • El comportamiento de la madre del novio en la boda fue sencillamente atroz. Llegó a la ceremonia con un vestido verde. Resultó que una invitada llevaba exactamente el mismo. Así que la madre arrinconó a esa señora y le dijo que se cambiara. "No tengo nada que ponerme. Acabamos de llegar", balbuceó la chica. "Pues vete de aquí. Lo digo en serio. Soy más importante que tú. Soy la madre del novio", dijo. Por suerte, todo quedó en un altercado verbal, pero el ambiente quedó enrarecido. © persondude27 / Reddit
  • Fui dama de honor en una boda. Salí del baño de la cafetería y los chicos que estaban al lado se rieron mirándome. Resulta que conseguí meterme el vestido hasta el suelo parcialmente dentro de las medias por detrás. Solo me di cuenta cuando sentí una brisa en los muslos. Y mientras arreglaba el vestido, vi que tenía medio metro de papel higiénico pegado al tacón. Solo cuatro años más tarde le conté a la novia esta catástrofe. Se partió de risa. © tremmy2 / Pikabu
  • Fuimos muy felices en nuestra boda, solo el fotógrafo la estropeó. Refunfuñó durante mucho tiempo, intentó poner a todo el mundo en una fila protocolaria y hacer tomas del estilo de "la novia abraza un árbol" y "el sol en la palma de la mano". La gota que colmó el vaso fue que empezó a criticar mi traje y puso como ejemplo a una novia "normal" de otra boda con un vestido voluminoso. Mi padre, mi suegro y el hermano de mi marido le pidieron que se fuera y no arruinara la celebración. Acabamos con un montón de estupendas fotos hechas por los invitados. © Overheard / VK
  • Hubo un incidente muy extraño. El primo de mi marido se casó. En la boda, estábamos sentados en una mesa con un pariente que era una famosa estrella del pop. Durante su discurso, el padre de la novia se pasó unos 10 minutos hablando de este cantante. Además, dos tías ocuparon literalmente el baño y se enzarzaron en una pelea. © Lucy Hendrickx / Quora
  • Nos invitaron a una boda en el campo. Nos costó un poco llegar. La ceremonia fue muy larga y los padres del novio llegaron tarde. Había tres veces menos convites que invitados. Ni siquiera había un simple supermercado cerca. Todo esto duró 7 horas, casi me desmayo de hambre. Lo mejor que me pasó ese día fue que me comí una hamburguesa en un sitio de comida rápida. © Val879 / Quora
  • Mi amiga es una tacaña empedernida. La invité a mi boda. Pusimos la mesa modestamente en casa e invitamos solo a nuestros seres más queridos. Mi amiga nos regaló las copas más baratas del supermercado y me dijo: "De todas formas, no me has invitado a un restaurante". Todos los invitados se quedaron boquiabiertos y yo me sonrojé. © Overheard / VK
  • Una vez estuve en la boda de un colega. Llegamos puntuales. Todo parecía muy costoso y lujoso. Pero cuando la novia caminaba hacia el altar, su vestido se rompió de repente. La pobre sollozó y se le corrió el maquillaje. Pero eso no fue lo peor. Cuando el novio estaba dando su discurso, de repente declaró que solo se iba a casar con ella por dinero, se dio la vuelta y se marchó. © Alicia Imona / Quora
  • Un primo me invitó a una boda. En cuanto entré, la novia se me acercó volando y empezó a quejarse de que yo no llevaba mi cámara de fotos. Vi a esta chica por primera vez. Resulta que mi primo mencionó una vez que yo era fotógrafo, y esta señorita pensó que vendría con equipo y empezaría a hacer fotos a todo el mundo. Así que no contrató a nadie. Pasé una velada estupenda: no me reí con los chistes del maestro de ceremonias, sino con la cara de mala leche de la novia. Lo más jugoso es que soy fotógrafa animalista, suelo fotografiar perros. © Overheard /Ideer
  • Nos invitaron a la boda del primo de mi marido, y el día antes de la celebración nos encargaron una tarea. ¡Resultó que íbamos a ser meseros en la fiesta! Me asignaron servir bebidas y aperitivos. Me quedé de piedra. Y algunos de los invitados se portaron fatal. Mi esposo y yo tuvimos que comer en la cocina. © Bobbi Lum / Quora
  • En nuestra zona hay una famosa pandilla de mujeres que acuden a todas las bodas con un montón de vástagos, ocupan una mesa de la esquina y llenan los platos de comida hasta los topes. Y el resto lo echan en sus bolsos, en los que meten bolsas de plástico. Barbacoas, salsas, kebabs, panes, postres y ensaladas: todo ahí adentro. Intenté reprenderlas, pero no me hicieron caso. El principal fiasco es que estas mujeres son parientes mías. © Neman Ashraf / Quora
  • Fui con mi esposo a la boda de unos amigos. La boda duró 2 días. El segundo día no nos dejaron entrar porque no habíamos pagado la entrada. O mejor dicho, no habíamos pagado lo suficiente. Llevábamos poco dinero en efectivo, queríamos hacer la transferencia sin efectivo, pero no hubo conexión. Los recién casados nos dijeron: "No sabemos nada, tienen que pagar ahora. Deberían llevar más dinero con ustedes". ¿Y no importa que habíamos metido una cantidad decente de dinero en el sobre de regalo? Me cabreó tanto que di media vuelta y me fui. © Overheard / Ideer
  • El día de la boda. Mi novio llega tarde. Faltan 20 minutos para el registro. Creo que iré al baño mientras el novio está de camino. Hago mis necesidades y salgo lentamente del baño. Y ahí están el fotógrafo, el novio, los testigos, los invitados... y yo con mi vestido metido en la ropa interior. Adivina qué se capta en la primera foto. © Overheard / Ideer
  • Mi suegra nos regaló 3 500 dólares por la boda. Pensábamos añadir este dinero al pago inicial de la vivienda. Una semana después de la boda, nos pidió que le diéramos este dinero prestado. Han pasado cinco años. Compramos un departamento nosotros mismos. Me enteré por la hermana de mi marido de que mi suegra se gastó el dinero en unos cursos de "éxito exitoso". Y eso que en la boda me dijo: "¡No despilfarres este dinero!". © Podsushano / VK

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A mi me revienta esa gente que se cree con derecho a decidir como organizar tu boda, se quejan porque lo que tu has decidido hacer no es de su agrado y hasta te la boicotean por celos o envidia.

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