Risa

Es muy difícil verter algo de una taza porque tanto el aire como el líquido tienden a fluir a lo largo de una superficie. Este fenómeno se llama el efecto Coandă. Hace que las moléculas del líquido que estás vertiendo sean atraídas hacia la superficie de la taza. Otra razón es la tensión superficial. Las moléculas de un líquido tienden a adherirse unas a otras en lugar de al aire. Entonces, el agua se mantiene unida y fluye por el costado de una taza en lugar de ir a donde tú quieres.

¡Tienes un sexto sentido! (No, no ves personas muertas). Te dice dónde están las distintas partes de tu cuerpo en el espacio. Gracias a él, puedes subir un tramo de escaleras o tocarte la nariz incluso con los ojos cerrados. Tus cuerdas vocales solo producen un zumbido. Tu nariz, boca y garganta determinan cómo sonará tu voz. Si tienes una voz profunda, tus cuerdas vocales son más gruesas y tus cavidades son más grandes del promedio, lo que permite que el sonido resuene.Para cuando te despiertes, habrá olvidado el 50 por ciento de tu último sueño. Después de 10 minutos, no recordarás el 90 por ciento. Cuando te sonrojas, el revestimiento del estómago enrojece junto con la cara. Sucede porque tu sistema nervioso simpático provoca un aumento del flujo sanguíneo en todo el cuerpo. Tus folículos pilosos tienen los mismos receptores que tus conductos nasales. Es por eso por lo que tu cabello también puede detectar olores. El sándalo puede ayudarte a desarrollar ese superpoder.De 5 millones de folículos pilosos en tu cuerpo, solo 100 000 están en tu cabeza. Un ser humano promedio come 35 toneladas de comida a lo largo de su vida. Eso es como tres autobuses escolares. No importa cuánto lo intentes, nunca podrás hacerte cosquillas. Es porque tu cerebro prepara el cuerpo para las cosquillas y te ayuda a evitar la típica reacción de risa (risa), lo siento... Un cabello humano es tan fuerte que puede contener hasta 100 g de peso. Si el cuero cabelludo fuera igual de fuerte, podrías sostener el peso de dos elefantes con tu pelo.

Los perros son capaces de comprender que alguien se ríe de ellos. Son animales muy empáticos; así que, cuando escuchan la risa graciosa de un bebé, se sienten atraídos e imitan esta reacción. Puedes darte cuenta de que tu perro disfruta la risa de un bebé por su boca abierta, su adorable respiración agitada y sus ojos brillantes. Comprar campanas de viento no solo llenará tu hogar de sonidos placenteros, también de acciones bonitas por parte de tu mascota. Muchos perros adoran el sonido de las campanas y los sacudidores, y algunos incluso cantan con ellos. Los cláxones clásicos de autos y las cornetas de aire suelen llevar a los perros a ladrar, a mover la cola y hasta a saltar juguetonamente hacia la fuente del sonido. Sin embargo, algunos perros podrían estresarse, así que ten cuidado.Los perros aprenden a asociar el timbre con la llegada de un familiar. Por eso se entusiasman y ladran cada vez que escuchan el timbre, los golpes a la puerta o el ruido de las llaves. Los sonidos que emiten los gansos y los patos atraen a los perros y despiertan sus instintos de persecución, así que son una buena opción si quieres hacerle una broma al tuyo. Muchos perros perciben el beatboxing como una invitación a saltar a los brazos del artista y lamerle la cara. Algunos dueños de perros incluso afirman que sus mascotas pueden aprender a hacer beatbox si practican juntos. Silbar es un recurso clásico para llamar la atención de un perro. Si usas un silbato especial, asegúrate de no soplarlo muy fuerte ni muy cerca de su cabeza; esto podría dañar sus oídos sensibles.

A veces podría parecer que nuestros hermanos fueron diseñados solo para sacarnos de nuestras casillas y hacer que nos metamos en problemas por sus travesuras, pero ¿qué haríamos sin esos momentos que se transforman en la historia más graciosa de recordar? Da lo mismo que las fechorías hayan sido en la infancia o en plena adultez, al final nos ayudan a entender que la vida con hermanos sí es más divertida.

Existen personas con una facilidad innata para aprender idiomas que logran hablarlos sin equivocación; pero también estamos los otros, los simples mortales a quienes las palabras nos confunden. Cambiamos sonidos o frases coloquiales, perdiendo todo el sentido de lo que queríamos decir. A estos usuarios de Reddit les sucedió algo similar mientras intentaban demostrar sus nuevashabilidades lingüísticas.

Con las prisas y el estrés, no es de extrañar que a veces los adultos perdamos un poquito la cabeza. Eso, sumado a la poca capacidad que tienen algunos niños de estar quietos, puede acabar en extravíos y confusiones. Hoy vamos a conocer algunas historias protagonizadas por padres e hijos; aunque tuvieron un final feliz, el pánico reinó por unos momentos. Nunca quedará claro si quienes se pierden son los hijos o los padres, pero no hay dudas de que el reencuentro siempre es una gran satisfacción.

Todo el mundo ha escuchado que “el amor no tiene edad” y esto no puede ser más cierto, ya que a veces llega cuando alguien menos se lo espera. No se deja de sentir con el pasar de los años, uno necesita compañía y gente con quien pasarla bien, ya sea en forma de amigos o de pareja, y en ocasiones ese lazo logra ser tan intenso como cuando se tenía 20 años.

Los niños tienen una gran capacidad de observación y aprendizaje. Pero, a veces, esa inteligencia termina por jugarles en contra a los adultos, que se ven sorprendidos y descolocados al recibir de un niño pequeño una respuesta que no esperaban, llena de ingenio y creatividad.

El matrimonio está lleno de altas y bajas, están los momentos románticos, las discusiones y, por supuesto, los instantes graciosos. Podemos llegar a decir que una pareja que convierte sus dificultades o sus malos entendidos en pequeños chistes hace su relación un poco más fuerte, ya que la risa se traduce en felicidad.

“¿Viste cómo da la manito? Se lo enseñé yo” es una frase que el dueño de una mascota puede lanzar, completamente lleno de orgullo. Pero esa misma persona que infla el pecho y sonríe cuando su animalito hace algo bien puede desentenderse por completo cuando su perro hace alguna de las suyas repentinamente. Decir “No, eso no se lo enseñé yo” incluso puede ser la respuesta que afloje la risa de la sala. Para intentar contagiar este humor más allá de la pantalla, juntamos varias evidencias de más de un amo que se puso rojo por el accionar de su compañero peludo.

Enamorarse no es tan fácil como se ve en las películas; normalmente uno no encuentra el amor verdadero a primera vista, ni le alcanza con solo ver a alguien un par de veces para tener la certeza de que se halló al compañero de vida indicado. Y por eso las citas son tan buena idea, porque nos permiten conocer en profundidad a las personas para saber si el afecto puede ser mutuo. Pero hay ocasiones en las que por mucho que estemos buscando vivir un momento romántico, alguna de las partes vuelve la situación toda una comedia o un thriller psicológico.

Suele suceder que durante los momentos de extrema ternura, sentimos emociones o deseos que parecen contradictorios. Vemos a un bebé e inmediatamente nos viene a la cabeza la famosa frase “es tan adorable que quisiera morderlo”; o bien, algo nos ocurre que nos da una repentina felicidad y nos entran ganas de llorar. En diversos estudios se ha investigado cuáles son las causas que se esconden detrás de estos impulsos que, a pesar de que suelen avergonzarnos, son de lo más normales.

Dicen que cuando te levantas con el pie izquierdo, pueden pasar muchas cosas malas durante el día. Aunque esta es solo una creencia popular no verificada, hay personas a las que la varita de la mala suerte las tocó en el hombro y tuvieron el peor día de la historia. Sin embargo, lograron tomárselo con humor, y con el tiempo, al recordar esos momentos, se les dibujó una gran sonrisa en el rostro.

Mientras los adultos debaten sobre si deben decir siempre lo que piensan, los niños responden a la misma pregunta con un claro “sí”. Y así lo hacen. Seguramente todos los padres se han visto en una situación en la que una declaración de su hijo los ha hecho sonrojarse y palidecer.

A veces, pareciera que los niños tienen un sexto sentido para decir cosas que nos dejan con lágrimas en los ojos, ya sea de risa o de dulzura. Por eso, algunos usuarios de la red quisieron contar cuáles fueron las palabras que, aunque no se lo esperaban, conmovieron sus corazones y les demostraron que, a los pequeñitos, lo que no les falta es el ingenio.

Los niños son una fuente inagotable de pañales, ropa sucia y ternura. Con sus ocurrencias nos enseñan que incluso en los ratos de mayor cansancio, es mejor ver el mundo con alegría y saber reírnos de nuestros errores, o de los de ellos. Y esta vez son los papás quienes se llevaron la última risa con las ocurrencias de sus pequeños.

No hay nada que alegre más el día de un padre que la risa de su hijo. Ver la felicidad en sus ojos y escuchar el sonido de la risa de su pequeño es como música para sus oídos, y ningún otro sentimiento puede superarlo. Sin embargo, algunos expertos creen que las risas incontrolables no son tan divertidas como parecen, sobre todo en lo que concierne a los más pequeños.

Cuando éramos pequeños, nuestras abuelas y mamás nos decían que no era bueno ser curioso. Sin embargo, recordamos su consejo muy tarde. Por ejemplo, una simple limpieza en el armario puede revelar secretos ajenos que no queríamos conocer. Y si los buscas a propósito, entonces puedes olvidarte de llevar una vida tranquila.

Las bodas suelen ser ocasiones en las que las personas se emocionan por ver a sus seres queridos unirse a quienes aman. Sin embargo, algunas veces, las lágrimas con las que se llenan sus ojos no son por emoción, o ni siquiera son por la consumación del vínculo. Es que hay situaciones tan inesperadas o singulares, causadas por los invitados o por los propios novios, que hacen que los demás estallen de risa, incomodidad o ternura con sus ocurrencias, o simplemente por su personalidad.

Como sabes, una remodelación no puede terminarse, solo puede detenerse. Siempre siguen apareciendo nuevos defectos que uno quiere arreglar, y la única manera de salir de esto es tomarse las cosas con sentido del humor.

El sentido del humor puede actuar como un mecanismo de defensa cuando nos encontramos en una situación estresante. El hecho de reírnos y de hacer bromas en ciertas circunstancias nos ayuda a ver las cosas de otra manera, incluso cuando estamos atravesando un mal momento. Por eso queremos incentivar a nuestros lectores a ser siempre positivos y a intentar ver las situaciones negativas desde un ángulo diferente.

Nuestro día a día es emocionante y, a veces, tenemos experiencias que son un poco diferentes de lo que estamos acostumbrados, y que nos agarran desprevenidos. Sin embargo, muchos de estos desenlaces suelen ir acompañados de una pequeña risa, y cuando los recordamos, sonreímos y nos sentimos felices, lo que repercute positivamente en nuestra vida.

Los miembros más pequeños de las familias tienden a hacer y decir tonterías, lo que siempre provoca escenas divertidas. En otras familias, en cambio, son los adultos quienes se convierten en comediantes y cada reunión familiar termina siendo un espectáculo de comedia. Afortunadamente, la risa ayuda a reavivar los vínculos entre las personas y mantiene alejado al aburrimiento.

Algunas veces, los objetos de imitación son verdaderamente audaces. No solo “solucionan” un problema como lo haría un artículo de marca, sino que además intentan parecerse tanto a él que en verdad logran confundirnos. Y entonces terminamos comprando, tal como dice la frase, “gato por liebre”.