20 Historias creadas por la imaginación de los niños que se convertirían en buenos guiones de películas

hace 3 años

La imaginación es fundamental para el desarrollo infantil, tanto es así que los niños siempre nos sorprenden. Quienes se ocupan a diario de los más pequeños saben que de vez en cuando hay acciones y comentarios superelaborados que los hacen preguntarse: “¿De dónde habrá sacado esto?”.

El equipo de Genial.guru, curioso por la creatividad de los niños, seleccionó algunas historias que salieron de la mente de estos pequeños seres imaginativos, pero que podrían ir directamente a la gran pantalla. ¡A disfrutar!

Mi hijo tenía unos 4 años, me estaba viendo aplicarme crema en la cara y me preguntó:
—Mamá, ¿por qué te pones eso en la cara todos los días?
—Para no envejecer —le expliqué.
Entonces, muy asustado, dijo:
—Mamá, ya no uses esa crema, no... porque si no envejeces, yo no creceré. © Sulamita Soares Eda / Facebook

Un día vino a mi casa un hombre que fabrica muebles de madera, y mi esposo me dijo:
—Amor, este es el señor que te dije que hace los muebles de madera.
Mi hijo de 4 años preguntó:
—¿Haces un armario?
El carpintero dijo que sí.
—¿Haces guardarropas?
—Sí, los hago.
—¿Haces de todo?
—Hago un poco de todo.
—¿Acaso usted pone huevos?
Después de eso, no supe dónde meterme. Más tarde, me reí a carcajadas. © Claudia Campos / Facebook

Mi hija tenía 2 años y 9 meses y estábamos en la ventana del departamento mirando una lluvia ligera. Dijo que esa lluvia era ideal para que la plantación prosperara. Le pregunté cómo se había enterado de esto y me respondió que, de mayor, vivía en un lugar con el mismo campo del tío que habíamos visitado recientemente. © Val Dias / Facebook

Cuando tenía 4 años, mi hijo jugaba con un amigo imaginario al que llamaba Liulim. No me importaba, porque en ese entonces yo pensaba que era el mundo fantástico de la imaginación del niño. Hasta que un día, mientras jugaba con Liulim en el patio trasero, debajo de un anacardo, lo escuché llorar. Mi esposo y yo corrimos porque pensamos que se había caído. Mi hijo mostró su manita mordida por avispas y dijo que había sido Liulim quien le había dicho que recogiera el nido que estaba en una rama baja del anacardo. Así que le ordené a Liulim que desapareciera y mi hijo nunca volvió a jugar con él. © Flor Morena / Facebook

Cuando mi hijo del medio tenía 2 años, recibí la visita de una amiga de mi madre. Él estaba acostado con la cabeza en mi regazo y escuchando atentamente la conversación, cuando mi amiga comentó:
—¡Cómo ha crecido tu hijo... pensar que hace poco estaba en tu vientre!
Rápidamente me miró a los ojos y preguntó:
—¿Mamá, me ’comiste’?
¡Nos reímos mucho! © Mah Martins Santana / Facebook

Mi hija Sabrina me pidió que comprara algo que realmente quería, pero era demasiado caro. Respondí:
—No puedo, hija, papá está tieso.
Ella rápidamente respondió:
—Cuando estés blando, ¿me lo compras? © Paulo S M Carneiro / Facebook

Yo estaba embarazada de mi segunda hija y la mayor estaba siempre llena de preguntas, a los 3 años. Muchos días después de que le respondí cómo iba a nacer el bebé, se le ocurrió esto:
—¿Y si el bebé te muerde al salir?
Le respondí que los bebés no tienen dientes y ella:
—¡Qué asco! —señalando sus propias encías—, ¿solo tienen estos grumos aquí? © Maria Angélica Giudice / Facebook

Mi hijo del medio tenía cólicos y lloraba mucho, lo que nos dejaba muy cansados. Entonces, mi hijo mayor, que en ese entonces tenía 2 años y 5 meses, tuvo una idea brillante:
—¡Vamos a tirar al hermanito a la basura! © Mah Martins Santana / Facebook

Mi hijo pidió una mesada. Acepté darle 3 dólares al mes y él se quedó feliz.
—¿Qué vas a hacer con ese montón de dinero? —pregunté.
—Asuntos personales. No puedo decirte.
Así que mantuvo la confidencialidad de los gastos, prácticamente reclamando la LGPD (Ley General de Protección de Datos). © PrazeresLeandro / Twitter

Cuando era pequeño no sabía qué era “cambio”, pensaba que algunas tiendas nos daban dinero para llevarnos sus productos. Entonces le pregunté a mi madre:
—¿Por qué no vamos solamente a las tiendas en las que nos dan dinero? © ricardo_on_*** / Reddit

Andábamos mi hija de 9 años, que en ese momento tenía 4, y yo en un supermercado detrás de una señora que estaba completamente cubierta con un burka, con solo una rendija en los ojos. Esto es muy raro en mi región, por lo que mi hija nunca había visto a nadie vestido así antes. “Mira, mamá, es un ninja”, dijo en voz alta. © Carcul / Reddit

Cuando mi hermano menor tenía 4 años, siempre comenzaba historias con “cuando yo era un hombre mayor...” y luego hablaba de lo mucho que disfrutaba volar. Nunca había estado en un avión en su vida. © KristinaProbably / Reddit

Soy asistente en una escuela de baile para niños de 3 a 5 años. Tuvimos un calentamiento en el que podíamos “volar” a donde quisiéramos. La mayoría de los niños eligieron lugares como “la tierra de los perros” o “la tierra de los gatitos”, pero una niña insistió en que quería ir a Home Depot (una tienda de artículos para la casa y materiales de construcción) porque era su lugar favorito en el mundo. © kaeamas / Reddit

Trabajo en una tienda de juguetes, así que casi todos los días escucho cosas raras de los niños. Una vez, hubo un niño que afirmó que los dinosaurios no estaban extintos. Tenía mucha curiosidad por comprender su línea de pensamiento, así que le pregunté:
—Si todavía están vivos, ¿dónde están?
El niño hizo una expresión de presunción, como si estuviera hablando con la persona más tonta del planeta, y dijo, con toda la intensidad que un niño de 4 años es capaz de tener:
—Oklahoma. © batmansleftn***le / Reddit

Una vez, estaba en el trabajo y un lindo niño de 3 o 4 años se me acercó con mucho entusiasmo: “¡Cómo te extrañé!”, dijo mientras me abrazaba. Nunca había visto a este chico antes, y sus padres parecían muy confundidos y preocupados por la escena. Solo me reí y les dije que debía parecerme a alguien que él conocía. © kdubbs22 / Reddit