20+ Personas que vivieron coincidencias capaces de ponerle la piel de gallina a cualquiera

Historias
hace 1 año

No es raro que ocurran coincidencias, pero algunas veces nos sorprenden por la aleatoriedad con que suceden. Algunas personas piensan que es el destino, mientras que otras le echan la culpa al azar. Pues ¿cuál es la chance de que padre, madre e hija nacieran exactamente el mismo día? ¿O de que un marido y su esposa tengan padres y abuelos con el mismo nombre? ¿O de que un hombre leyera el nombre de su futura esposa dentro de un grano de arroz hallado en la arena de la playa? Realmente, es muy difícil creer que estas cosas hayan pasado, pero no es más que el mundo manifestando su belleza.

En Genial.guru también creemos en las coincidencias y armamos una lista con algunas de las mayores casualidades vividas por nuestros lectores.

  • Cierta vez, estaba rellenando una ficha en el dentista. Hasta ahí, todo bien, pero cuando la recepcionista me preguntó la fecha en que nací, comenzó la mayor serie de coincidencias de mi vida. El diálogo fue así: “¿Fecha de nacimiento?”. “¡Mi cumpleaños es hoy!”. La recepcionista: “¡El mío también!”. “Pero yo nací en 1976”. “¡Yo también!”. “Pero yo nací en la capital”. “¡Yo también!”. Las coincidencias terminaron en el hospital donde nacimos, que no fue el mismo. Lo que me pareció más absurdo es que esto sucedió el día de nuestro cumpleaños. © José Edson Matias / Facebook
  • En la orilla de la playa, mi esposo encontró uno de esos colgantes con un grano de arroz adentro, que tenía un nombre escrito. Lo tomó y lo guardó. El nombre era el mío, pero la coincidencia fue que nos conocimos 15 años después. Cuando comenzamos a salir, él dijo que estaba escrito, en este caso, en un grano de arroz. 😊🤭 © Denise Cariboni / Facebook
  • Una vez, a mitad de camino a la universidad, encontré un letrero muy bonito que decía “Francisco”. Lo tomé, caminé un rato con él y pensé “no conozco a nadie con este nombre”, así que lo dejé donde estaba. Un tiempo después, descubrí que estaba embarazada y que era un niño. Entonces, mi hermano sugirió el nombre Francisco (siempre me pareció un “nombre de viejo”, pero me convenció). ¿Y no va que encuentro el letrero tirado de nuevo en el mismo lugar, mucho tiempo después? Ni siquiera lo recordaba. Esta vez, me llevé el letrero y lo colgué en la pared. © Aris Damaceno / Facebook
  • Mi mamá tiene una vecina que nació tres días antes que ella, en el mismo hospital. Las dos se llaman igual y tienen la misma profesión. © Cassiana Silva / Facebook
  • Después de 12 años juntos, descubrí que cuando éramos niños, la misma persona que cuidaba de mí cuidaba de él también. O sea, jugamos mucho juntos cuando éramos pequeños y nos reencontramos de adultos. © Thaís Oliveira / Facebook
  • Mi esposo es de un pueblito llamado Santos, hijo de Carlos Alberto, nieto de Mario por parte del padre y tuvo una hermana llamada Cristina. Yo me llamo Cristina, nací en Santos, soy hija de Carlos Alberto y nieta de Mario por parte de mi padre. Coincidencias de la vida. © Cristina Beretta / Facebook
  • Mi esposo y yo no nos conocíamos. Me mudé a la capital en 1999 y él en 2000. Nos conocimos y, después de años, descubrimos que su bisabuela también era la mía. © Cilene Morais / Facebook
  • Tengo una amiga que nació el mismo día que yo. Nos embarazamos y los bebés iban a nacer en días diferentes, en realidad, con un mes de diferencia. Su pequeña se adelantó y tuvimos a nuestros hijos el mismo día 🥰. Yo tuve un niño y ella, una niña 🤩. © Juliani Karolini / Facebook
  • Cuando era pequeño, me lastimé la rodilla y me quedó una cicatriz. Mi esposa también tiene una cicatriz en la misma rodilla. Mi hija de 3 años se cayó, se lastimó y ¿adivinen qué? Le quedó una cicatriz en la misma rodilla que a nosotros. Ahora tenemos a Arthur, de 1 año, vamos a ver si él también tendrá una. 😂 © Thiago Alves / Facebook
  • Mi marido y yo tenemos el mismo apellido, los dos tenemos un hermano que se llama Luis Claudio y nacimos en el mismo hospital. Él el 9 de diciembre y yo, el 10. Su padre se llama Martín y mi padre también se llama Martín. Son tantas coincidencias que da miedo. 😅 © Vanessa Coelho / Facebook
  • Yo era fanática de los soldados y había un muchacho que me gustaba mucho, su nombre era Jhon. Pedí tener un novio soldado con ese nombre, un sueño de adolescente, yo tenía 13 años. Me parece que se cumplió, pues mi marido se llama Jhoncley y en 2014 fue al ejército. Sueño cumplido. © Jessica Isuisa / Facebook
  • Vivo en un condominio, trabajo en una empresa de transportes y mi hijo cumple años el 17 de marzo. Hace unos días, un hombre comenzó a trabajar en la empresa, vive en el mismo condominio y su hija cumple años el mismo día que mi hijo. © Ju Romualdo / Facebook
  • Me compré una tela, me hice un vestido y después vi a una mujer cruzando la calle con un vestido del mismo modelo y color, que yo pensé que nadie más tenía. Mi hija la vio y comenzó a reírse. © Elizabeth Rojas / Facebook
  • Era profesor de informática. Cierta vez, había seis alumnas en el salón y, por una coincidencia increíble, todas se llamaban Tati (abreviatura de Tatiana). Me paré enfrente de la clase y le presenté una Tati a otra, una por una. © Bartolomeu Barroso / Facebook
  • Mi suegra se llama María y mi suegro, Walter. La suegra de mi hermana del medio se llama María y el suegro, Walter. La suegra de mi hermana menor se llama María, pero mi cuñado nunca conoció a su padre y no sabe dónde está. Siempre digo que si lo busca por el nombre de Walter, seguro lo encuentra. © Bruna Hidalgo / Facebook
  • Mi papá adoptó una gata que siempre estaba en los alrededores de su trabajo y la llamó Nina. Poco tiempo después, la llevamos al veterinario y, para nuestra sorpresa, descubrimos que tenía un chip, ¡y que su nombre era Nina! © Carla Campedelli / Facebook

El mundo nunca deja de sorprendernos, ¿no es verdad? En tu caso, ¿cual fue esa coincidencia de la vida que te ha marcado?

Imagen de portada Aris Damaceno / Facebook

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