14 Acciones de los huéspedes que sacan de quicio incluso al trabajador de hotel más paciente

hace 3 años

Todos los huéspedes de hoteles son maravillosos a su manera. Cada uno de ellos tiene un conjunto de características únicas que aportan una vivencia especial a la vida de los empleados de un hotel. Los administradores y los gerentes experimentados pueden determinar fácilmente de dónde llega el huésped y qué “alegrías” se pueden esperar de él, incluso antes de que pronuncie la primera palabra o muestre su pasaporte.

Genial.guru descubrió cómo exactamente puede un huésped romper la configuración básica de cualquier empleado de hotel y sumar miles de puntos negativos para su karma.

“Oh, cometí un error con la reserva”

Muchos huéspedes reservan varias habitaciones de hotel a la vez, y recién un par de días antes del viaje se deciden por aquella en la que finalmente se alojarán. Además, algunos huéspedes simplemente se olvidan de cancelar parte de las reservas, y esto debe hacerse a su llegada.

Otros viajeros reservan la opción más barata, incluso si la que quieren cuesta solo 4 USD más. Como resultado se quejan, suspiran y piden que se los traslade bajo diversos pretextos. Pero en temporada alta sencillamente no hay ningún lugar donde mover a esa gente desafortunada.

  • Una vez, a nuestro hotel llegaron reservas de varias habitaciones a la vez a nombre de la misma persona. Encima, todas las reservas eran no reembolsables. Comenzamos a preguntar a los huéspedes cómo preferían alojarse: unos cerca de otros o no. Y resultó que solo se necesitaba una habitación, el huésped simplemente no podía decidir cuál le gustaba más. Menos mal que nos enteramos de antemano y pudimos cancelar las reservas extras.

  • Las habitaciones más baratas de nuestro hotel eran unos cuartos económicos con dos camas individuales. Estaban ubicados en el segundo piso, encima del bar. Una escalera bastante empinada conducía allí. Escribimos sobre esto en el sitio web. Pero todo fue inútil: la gente simplemente no percibe esta información. Varias veces pude trasladar a los invitados a habitaciones mejores, pero luego llegó la temporada alta, el hotel estaba completamente lleno y una pareja joven con un niño llegó a una de esas habitación. Está claro que era incómodo para ellos quedarse allí, pero no podía ofrecerles otra habitación, simplemente no había ninguna.

“Mientras tanto, dormiremos aquí”

La mayoría de los hoteles tienen una hora de check-in claramente establecida, generalmente a las 2 p.m. Por supuesto que las aerolíneas y los ferrocarriles no ajustan sus horarios a esta condición, por lo que los huéspedes a veces llegan antes. Pero no siempre es posible registrarlos y llevarlos a las habitaciones antes de las 2 p. m. La salida es a las 11 de la mañana, y antes de esa hora los huéspedes deben realizar el check-out. De lo contrario, el servicio de limpieza simplemente no tendrá tiempo para ordenar la habitación antes de la llegada del siguiente huésped.

  • Unos huéspedes llegaron varias horas antes de la hora oficial del check-in. La habitación no estaba lista y les pedí que esperaran en los sofás. No les importó, sacaron rápidamente unas mantas, se acomodaron y se durmieron. Otros huéspedes los miraban de reojo y trataban de hablar en un susurro.

  • Un huésped quiso extender su estadía en nuestro hotel por un día más. No había suficiente saldo en su tarjeta, pero dijo que pensaría en algo. Esperamos a su hija durante un par de horas, pero nunca llegó. Según las reglas, la habitación tenía que desocuparse cuando el hombre salió a algún lugar sin decir ni una palabra. Sus cosas permanecían en la habitación. Las chicas del servicio de limpieza tuvieron que hacer las maletas del huésped. Él regresó una hora después, todavía sin dinero, y nos pidió que pagáramos el taxi. © CanaGeekGurl / Reddit

“Pero si pagué por todo”

En la mayoría de los hoteles, los huéspedes encontrarán accesorios, algunos gratuitos y otros que tienen un costo. Los primeros suelen incluir jabón, champú, té, café, etc. Los segundos son las toallas y las batas. Y aunque la gente paga por su estancia en la habitación, esto no significa que adquiera automáticamente todo lo que hay en ella.

Cuando un huésped se va llevándose todo lo que pueda empacar en una maleta, no solo corre el riesgo de recibir muchos mensajes enojados del hotel, sino también de conocer a la policía local. Si realmente te gustó la bata, siempre puedes consultar su precio y comprarla como recuerdo.

  • Una vez, un invitado trató de llevarse una lámpara grande y una toalla. Hubo que quitarle estas cosas. En el proceso se descubrió que también se había llevado la Biblia del hotel. Le dejé el libro, claramente la necesitaba. © Bill McCaslan / Quora

  • Dos encantadoras damas se quedaron en nuestro hotel durante todo un mes. Todos los días pedían cortésmente a las chicas del servicio de limpieza que les trajeran más botellas de champú y jabón. Como estas pequeñas cosas estaban incluidas en el precio de la habitación, se las dábamos sin ningún problema. El último día de su estadía fui a verlas con pequeños recuerdos, porque las invitadas se habían quedado con nosotros durante mucho tiempo. Y vaya la sorpresa que me llevé cuando vi alrededor de 40 botellas de champú y gel de ducha empacadas en bolsas dentro de sus maletas. No entiendo cómo no les daba pereza arrastrar todo eso a su casa a través de medio mundo.

“Oh, bueno, somos 6 en lugar de 2. Pero todos entraremos”

Cuando, en lugar de la esperada pareja, frente a la recepción aparecen 4 personas, el administrador comienza lentamente a volverse canoso. Por lo general, significa que tendrá una larga conversación con los recién llegados. Los clientes aseguran que no necesitan camas adicionales, que hay suficiente espacio para ellos, que todo el grupo entrará en la habitación perfectamente, por lo que no hay necesidad de pagar un monto extra. Desafortunadamente, ni los muebles, ni la ropa de cama, ni el baño suelen resistir esta clase de invasiones.

  • En lugar de 2 huéspedes vinieron 4. Les ofrecí felizmente una habitación adicional, pero no la necesitaban. “Somos delgadas, todas entraremos”, canturrearon las chicas. Y no importa cuánto traté de explicarles que era imposible que las cuatro se alojaron en una sola habitación, las huéspedes me ganaron por cansancio. Como resultado, tras desocuparse, la habitación parecía haber sido visitada por un huracán.

  • Una vez, una pareja reservó la habitación más grande del hotel. Era una suite con 2 dormitorios y una sala de estar. Por la noche, a su habitación comenzaron a llegar invitados. Creímos que los huéspedes estaban organizando algún tipo de reunión, por lo que no prestamos mucha atención a lo que pasaba. Pero por la mañana resultó que en lugar de 2 personas en la habitación dormían 20, si no más. En sacos de dormir. En el piso. © Rudy / Quora

  • Unos huéspedes se olvidaron de decirnos que habían traído una serpiente domesticada. Como resultado, la mascota se escapó de su habitación y todos los empleados terminaron buscándola. Excepto las mujeres, que se negaron. Menos mal que la serpiente no logró ingresar al sistema de ventilación. © Noel Raphael / Quora

“Pensé que era un trapo”

Algunos huéspedes son indiferentes a la propiedad del hotel. Las almohadas y las colchas se tiran al suelo, los zapatos se pulen con toallas faciales, los toallones de playa se tiran al suelo frente a la puerta y se usan para limpiarse los pies. O para quitarse el maquillaje.

Esto no solo obliga a los hoteleros a gastar más en lavar y comprar nuevos textiles, sino que también deja un regusto muy desagradable.

  • Una mujer ingresó en el hotel y a la mañana siguiente pidió que le cambiaran la ropa de cama, ya que estaba muy sucia. Y de hecho la funda de la almohada estaba cubierta de extrañas manchas anaranjadas. Las chicas del servicio de limpieza y yo intentamos durante mucho tiempo averiguar qué pasaba, porque a la llegada de la huésped todo en la habitación estaba impecable. Hasta que notamos que el color de cabello de la mujer había cambiado misteriosamente de la noche a la mañana. De un cabello castaño, se convirtió en uno rojo brillante. Y las manchas que quedaron eran de tintura. Por supuesto que no fue posible quitarlas de la ropa y hubo que tirarla.

  • Un huésped se alojó en una habitación con 2 perros. Uno de ellos tuvo un “accidente” antes del desalojo, y para ocultar las huellas, el hombre intentó limpiar la habitación con sábanas y toallas. Todos los textiles tuvieron que ser desechados y el huésped tuvo que pagar una multa. © Bodhi Ench / Quora

  • Es sorprendente la frecuencia con la que los huéspedes usan toallas y ropa de cama para limpiar sus zapatos. Estas manchas, por cierto, después no se pueden quitar. Y por alguna razón, a menudo se llevan las baterías de los controles remotos. © Prachi / Quora

“Me siento como en casa”

Mucha gente percibe una habitación de hotel como un segundo hogar. Y los propios hoteleros intentan transmitir esta idea en los folletos publicitarios o en el propio nombre. Esta expresión no es más que una exageración artística. Cuando los huéspedes comienzan a mover muebles, poner clavos en la pared o juntar pilas de platos del restaurante, esto causa una ligera irritación entre los empleados.

  • Una linda pareja se alojó en nuestro hotel y nos pidió una percha. Les prometí llevar unas extra. Los huéspedes dijeron que era una tontería y no era necesario. A la mañana siguiente escuché un estruendo en la habitación. Fui a ver si todo estaba bien. Resultó que el hábil caballero estaba poniendo clavos en la pared para colgar sus cosas.

  • Nuestros huéspedes asaltan los carritos de limpieza para juntar los suministros del baño. También intentan calentar la comida en la caja fuerte, pensando que es un microondas. © Daniel Wilson / Quora

  • Me asombran mucho los huéspedes que llegan descalzos al restaurante del hotel. Y se sienten muy ofendidos cuando se les pide que se pongan los zapatos. © Ren Daniel / Quora

“Bueno, es para hacer un bocadillo”

Muchos hoteles prohíben llevar comida a la habitación, y hay una serie de razones para eso. En primer lugar, pueden aparecer restos de comida tanto en el suelo como en la ropa de cama. En segundo lugar, las migas atraen hormigas y otros insectos, de los que es imposible deshacerse.

Algunos huéspedes prefieren cocinar directamente en su habitación. Las teteras suelen ser las que sufren a causa de estos experimentos. No son adecuadas para cocinar espaguetis, ravioles y camarones. Además, los olores molestan a los demás huéspedes del hotel.

  • Una huésped enojada llega a la recepción y declara que la tetera de su habitación está rota. Le prometo reemplazarla y le pido que me dé la estropeada. Ella me extiende la tetera y veo que dentro hay camarones flotando. Medio crudos. Luego tiene lugar la conversación:
    — Señora, ¿qué hacen los camarones en la tetera?
    — Bueno, decidí cocinarlos para el almuerzo.
    — Señora, pero la función de la tetera no es esa.
    — ¿Y para qué sirve entonces?

  • Sonó una alarma de incendio en una de las habitaciones. Había pánico entre la gente, los huéspedes corrían por todas partes. Me apresuré a comprobar qué pasaba. Una familia estupefacta estaba sentada en la habitación, sobresaltándose nerviosamente con los pitidos. Junto a la cama había un hornillo y encima una sartén con carne friéndose. Durante mucho tiempo intenté explicarles que no se podía freír carne dentro de la habitación. En absoluto.

“Pero estoy yendo a la piscina”

Algunos huéspedes se sienten tan cómodos en el hotel que se mueven por el territorio con lo que consideran la ropa más cómoda. Lo padecen más que nada los hoteles que están junto al mar. Allí los huéspedes deambulan por la zona en ropa de playa, sin ponerse realmente a pensar dónde se encuentran en ese momento: si junto a la piscina o en un restaurante. Esto confunde no solo a los empleados, sino también a otros vacacionistas.

  • Un invitado imponente se alojó en una habitación. Una chaqueta cara, una maleta de cuero, unas botas lujosas. Y temprano en la mañana decidió alegrarnos con un atuendo aún más impresionante. Desfiló a desayunar en un bañador. El resto de los huéspedes incluso dejaron de masticar al ver tanta belleza. Con el mayor pesar, tuve que pedirle que se presentara en lugares públicos un poco más vestido.

“Queremos quedarnos más tiempo, y también sería genial que nos pasaran a una habitación mejor”

A veces, el alojamiento en un hotel para algunos huéspedes se convierte en una emocionante búsqueda llamada “¿de qué otra manera se puede obtener un descuento?”. La disposición del personal para hacer concesiones y ofrecer diversas bonificaciones con tal de satisfacer al huésped, en algunos casos se convierte en un verdadero tormento.

  • Una vez, una señora que se alojaba en nuestro hotel se dirigió a mí con un reclamo. Según ella, encontró el cabello de alguien debajo del televisor. En aquel entonces, las habitaciones tenían modelos de televisores viejos y voluminosos, no las de pantallas planas modernas. Me pregunté para qué aquella mujer necesitaba mover aquel pesado aparato, pero en voz alta solo pregunté cómo podía ayudarla. La huésped dijo que la última vez que había sucedido eso, se le ofreció cubrir completamente el costo de la habitación. Le dije que solo podía descontar una pequeña cantidad de su cuenta. La dama estaba muy enojada. Resultó que había hecho este truco muchas veces, y yo fui el primer empleado que no se había asustado. © Matthew Knapp / Quora

  • Un huésped reservó una habitación por 2 días, pero al día siguiente tuvo que irse a las 7 p .m.. Estaba muy sorprendido de que no le reembolsáramos la segunda noche. Simplemente no lo entiendo. Nadie pide en un restaurante que se le devuelva la mitad del costo de un plato si no ha terminado de comerlo. © kukuboy17 / Reddit

“Traigan un unicornio rosado y un príncipe azul, por favor”

Algunos huéspedes son recordados durante mucho tiempo debido a sus solicitudes inesperadas. Da la sensación de que se van de vacaciones para cumplir todos los sueños secretos y peculiares que no pueden permitirse en la vida cotidiana.

  • Nuestro hotel tenía un edificio principal y varias casas ubicadas a la orilla del mar. Temprano en la mañana, una huésped alojada en un bungalow de este tipo vino con una apariencia demacrada a la recepción. Y con voz trágica me pidió que le bajara el sonido al mar. Porque, ay, el rugido de las olas no la deja dormir. Le dije con pesar que solo podía ofrecerle una habitación más alejada de la playa. Con descuento. Y desayuno gratis. Pero, lamentablemente, no, de ninguna manera podía bajar el sonido del mar.

  • Una huésped pidió un café. No instantáneo, uno de verdad. Le llevé una taza de americano, ella miró con recelo el líquido y dijo: “Pero esto no es café de verdad”.
    — ¿Disculpe, señora?
    — Quiero un café de una máquina de café.
    — Sí, señora, esto es un café y se preparó en una máquina de café.
    — Pero ustedes no tienen una máquina de café.
    — Pero aquí está, señora (había una máquina de café industrial detrás de mí).
    — No, esta no es, hazme un café en otra máquina o devuélveme el dinero.
    — Señora, con mucho gusto le devolveré el dinero, pero primero tiene que probar el café y quejarse del sabor. Porque aquí está la máquina de café, aquí están los granos, y aquí está el café hecho con los granos, en la máquina de café. Lo sostiene en sus manos.

  • La historia no es mía, sino de mi padre adoptivo, que es dueño de un hotel. Un día, a las tres y media de la mañana, un huésped lo llamó y le preguntó si el personal podía comprarle un anillo de compromiso en ese momento. Mi padre respondió que todo estaba cerrado y, lamentablemente, no podía ayudarlo. © Tom Kaiser / Quora

  • En nuestro hotel a menudo se alojaba un huésped que había trabajado durante varios años en las fuerzas especiales. Era un amor, pero con peculiaridades. Por ejemplo, nunca se alojaba en la misma habitación. Cambiaba de lugar todos los muebles de su cuarto. Si pedía comida en el hotel, siempre insistía en que se preparara en su presencia. © Natasha Clark / Quora

  • Una huésped llamó a la recepción y dijo que había unas burbujas extrañas flotando en su inodoro, e inmediatamente se ofreció a traer algunas para que pueda echarles un vistazo. Antes de que pudiera negarme, colgó. Después de 5 minutos, apareció frente al mostrador con un vaso de agua. “Pero algo estaba burbujeando allí hace un minuto”, dijo. © Giorgia Sarnataro / Quora

  • Trabajo en un hotel en Costa Rica. El clima es tropical. Una huésped nos pidió instalar un aire acondicionado en el baño y agregar hielo a la piscina. © John Oroszi / Quora

  • Una dama que había reservado una habitación pensó que tendría una vista de la cascada. Cuando le expliqué que eso era imposible, la señora respondió con la solicitud de mover la cascada para que ella pudiera verla. © Traditional-Anarchy / Reddit

“Vine aquí para descansar”

La gente lleva meses esperando unas ansiadas vacaciones para finalmente poder descansar tanto que sea un momento para recordar durante mucho tiempo. Desafortunadamente, los recuerdos también se pueden regalar a quienes te rodean: otros huéspedes y empleados del hotel. Serán brillantes, pero no necesariamente agradables. En los hoteles hay una regla: después de las 10 o las 11 de la noche, se pide a todos los huéspedes que mantengan el mayor silencio posible.

  • Unos alegres invitados se alojaron en nuestro hotel. Durante todo el día dormían dulcemente en su habitación, antes del atardecer ninguno de los empleados los veía. Y por la noche empezaba la diversión. Las habitaciones vecinas gemían y se quejaban, algunos otros huéspedes quedaban involucrados espontáneamente en la fiesta y no sabían cómo escapar. Como resultado, el día de su partida los muchachos estaban tan cansados ​​de descansar que no podían empacar sus cosas solos y llegaban tarde a tomar el avión. Los ayudamos entre todo el hotel, haciendo sus maletas y al mismo tiempo vistiendo a los propios huéspedes con ropa adecuada. Apenas logramos meterlos en el autobús con todas sus pertenencias y los saludamos con la mano durante mucho tiempo.

“¿Por qué no sirven esto para el desayuno?”

El desayuno es un eterno dolor de cabeza. Casi siempre hay un invitado descontento que se sentirá ofendido por algo durante esta comida. O los platos no sabrán bien, o no habrá suficiente variedad o el horario no habrá sido bien elegido. Incluso la ausencia de este servicio entristece a muchos. Habitualmente, en el sitio web donde la persona realiza la reserva se indica el formato del desayuno y la hora de su servicio.

Por lo tanto, si se te prometió un desayuno asiático de 7 a 11 a la carta, no busques un buffet ni pidas papilla al mediodía. Por lo general, este servicio está limitado por el tamaño del hotel: los establecimientos pequeños no pueden permitirse una cocina profesional y personal adicional. Y la legislación no permite que preparen el desayuno por su cuenta.

  • Una pareja de huéspedes reservó una habitación por unos días e inmediatamente preguntaron si teníamos un desayuno especial para veganos. Les dije que lamentablemente no teníamos uno y enumeré una serie de platos bastante exigua que entraba en esta categoría. Les recomendé otro hotel cercano, donde la elección era mucho más rica. Pero los invitados optaron por no cancelar la reserva. Nuestro desayuno, por supuesto, no resultó de su agrado. Nadie podía servirles leche de soja con el cereal. Había un plato de frutas, pero no un plato de verduras. El caballero, destellando con ojos rapaces, exigía a los camareros pimientos y berenjenas. Y ellos solo podían ofrecerle zanahorias, pepinos y tomates. Los huéspedes estaban furiosos, nosotros sufríamos en silencio. Como resultado, el hotel recibió una crítica horrible y los huéspedes una experiencia de descanso desagradable.

“Oh, ¿para qué necesito el servicio de lavandería? Mejor lo hago yo misma”

La energía para hacer las cosas y la independencia de los huéspedes es algo maravilloso. Pero muchos se esfuerzan demasiado cuando tratan de no causar molestias adicionales al personal. En lugar de usar el servicio de la lavandería, algunas personas optan por lavar las cosas a mano, y luego colgarlas en superficies que consideran adecuadas.

  • Fui a inspeccionar el hotel y de repente noté algo inusual. Eché un vistazo más de cerca. Algo vibraba misteriosamente en el cable de Internet que salía de una de las cabañas. Resultó que eran las cosas recién lavadas de los invitados. Camisetas, pantalones, vestidos y, ya que estaban, la ropa interior. Al no encontrar cuerdas para tenderlo, los huéspedes decidieron adaptar los cables para este propósito. Menos mal que el cable no se rompió.

  • El dueño del hotel estaba muy orgulloso de las 2 hermosas casas que se encontraban justo en la orilla del mar. Decoró los balcones con suntuosos jarrones de flores y colocó allí bonitos sofás de terciopelo. Y el techo estaba hecho de hojas de palma secas. Una vez, me llamó con silencioso horror. Señaló uno de los balcones y vi que los colores de allí habían aumentado considerablemente. Las flores, los sofás y el techo estaban en su lugar. Solo que había sujetadores multicolores y braguitas de todo tipo atadas a las hojas de palma. Y toda esta composición revoloteaba enérgicamente en el soplo de la brisa marina. “Pintoresco”, dije, y me dirigí al lugar para decirles a los huéspedes que quitaran aquella instalación artística.

  • Solo he escuchado esto, pero muchos argumentan que es cierto. Parece que algunos huéspedes lavan su ropa interior en las teteras del hotel. © Astor Tran / Quora

“¿Has visto a mi hijo?”

Es comprensible que los padres sueñen con pasar sus vacaciones en completa dicha y relajación. Y con un niño pequeño a veces es difícil. En este caso, hay que elegir un hotel grande con un grupo especial de animadores y un club infantil. En los hoteles pequeños, este servicio simplemente no estará disponible. Pero ciertamente no es una buena idea dejar al niño en la piscina o en el patio de recreo sin supervisión. El personal simplemente no tendrá tiempo para cuidarlo.

  • Teníamos un pequeño patio de juegos en nuestro hotel. Una casa de plástico, un par de toboganes, nada especial. Una vez pasé por allí y vi que un niño de 5 años estaba sentado en el techo de la casa, y otro, de 7 años, golpeaba las paredes con todas sus fuerzas, tratando de tirarlo de allí. El resto de los niños observaba la acción con moderada curiosidad. Fui en busca de los padres. Estaban disfrutando de tomar un café en la playa. “Lo siento”, dije, “pero sus hijos están rompiendo el patio de juegos. Y algunos de ellos pueden lastimarse en el proceso”. La madre me miró con ojos vidriosos y llenos de desesperación y dejó caer: “Oh, bueno, decidimos dejar que ellos mismos determinaran los límites de lo permitido. Deben aprender de sus errores por sí mismos”. Suspiré y respondí: “Señora, son muy diligentes en determinar sus límites. Pero me temo que tendremos que incluir el costo del nuevo patio de juegos en su cuenta. Y espero que los niños tengan seguro médico”.

  • Una vez, vino una madre con dos hijos. En 2 días, los niños juguetones lograron reprogramar la caja fuerte y encerrar dentro la billetera de su madre, escondieron su celular debajo de un cojín del sofá en el restaurante, enterraron la tableta en la playa y perdieron una serie de prendas de vestir. El personal del hotel nunca había trabajado con tanta concentración.

¿Alguna vez te han molestado otros huéspedes de un hotel?

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