7 Ejercicios para reducir las arañas vasculares y las várices

Si padeces de arañas vasculares o várices, es probable que tu médico te haya dicho que hagas ejercicio con regularidad. Aunque hacer ejercicio te ayuda a mantener un peso saludable, lo que puede aliviar los síntomas causados por la inflamación de las venas, algunos tipos de actividad física pueden ser tu peor enemigo. Por ejemplo, el levantamiento de pesas impide el flujo sanguíneo entre las piernas y el corazón, lo que hace que la sangre se acumule y dañe las venas. A pesar de que las venas varicosas no se pueden curar de forma permanente sin tratamiento médico, algunos ejercicios regulares pueden prevenir la progresión de esta afección inquietante.

En Genial.guru se nos ocurrió presentar esta colección de ejercicios simples y efectivos que no requieren ningún equipo en particular y se pueden realizar prácticamente en cualquier lugar. No olvides mirar nuestro bono especial para ti al final del artículo.

1. Ejercicio estilo bicicleta

Andar en bicicleta estimula los músculos de las pantorrillas y mantiene la sangre fluyendo en la dirección correcta. Incluso si no tienes una bicicleta o es un día lluvioso y no quieres salir, puedes hacer este sencillo ejercicio en la comodidad de tu hogar.

• Acuéstate boca arriba y levanta las piernas en el aire para formar un ángulo de 90 grados.
• Empieza a mover circularmente tu pierna derecha mientras mantienes tu pierna izquierda flexionada.
• Cambia de pierna y haz el mismo movimiento con la pierna izquierda. Repite el ejercicio con cada una de las piernas.

2. Elevación de piernas

Este simple ejercicio no requiere ningún equipo especial. Cuando se hace con regularidad, puede mejorar la circulación sanguínea en las venas.

• Acuéstate boca arriba.
• Levanta una pierna a la vez.
• Mantén la pierna en el aire durante unos segundos.

• Cambia de pierna y repite.

3. Estocadas

Cuando haces estocadas, estás ejercitando los músculos de las piernas, lo que aumenta la cantidad de flujo sanguíneo al corazón. Como resultado, tu corazón trabaja más duro y ayuda a mantener tus venas en buena forma.

• Párate derecho con los brazos a los costados.
• Da un gran paso hacia delante con el pie izquierdo.
• Comienza a flexionar la pierna izquierda mientras mantienes la espalda recta, los ojos mirando hacia delante y los brazos a los lados.
• Flexiona la pierna izquierda hasta alcanzar un ángulo de 90 grados.
• Mantén esta postura durante 10 segundos y luego vuelve a la posición inicial. Repite con la otra pierna.

4. Elevación de talones

Este ejercicio fortalece los músculos de las pantorrillas y mejora la circulación sanguínea de tu cuerpo. Las elevaciones de pantorrillas no requieren un gran esfuerzo y pueden ser realizadas incluso por personas que no han hecho ejercicio durante mucho tiempo.

• Párate derecho con las piernas paralelas.
• Elévate sobre las puntas de tus pies hasta alcanzar la máxima extensión haciendo tensión con los músculos de las pantorrillas.
• Vuelve lentamente a la posición inicial. Repite la secuencia tantas veces como te sientas cómodo.

5. Balanceo de pies

El balanceo de pies es similar a la elevación de talones, pero con un beneficio adicional: ayuda a mantener el equilibrio.

• Párate derecho con los pies paralelos.
• Ponte de puntillas.
• Al bajar de puntillas, balancéate hacia atrás sobre tus talones.
• Alterna este movimiento de vaivén. Para conseguir más estabilidad, fija tu mirada en un punto determinado. No olvides contraer el vientre y apretar los glúteos.

6. Estiramiento para pantorrillas

La elongación de las pantorrillas es un ejercicio fácil que puedes hacer cuando estás en un descanso en el trabajo o en tu casa.

• Siéntate en la colchoneta o en el suelo con las piernas estiradas.
• Estira las puntas de tus pies hacia delante tanto como puedas y luego hacia atrás.
• Repite esto 20 veces.

7. Poner las piernas en alto

Si padeces de arañas vasculares o várices, los médicos recomiendan levantar las piernas al nivel del corazón o por encima cuando sea posible. Esto ayuda a aliviar las piernas hinchadas o adoloridas y mejora el flujo sanguíneo hacia el resto del cuerpo.

• Acuéstate boca arriba en el suelo o en la cama.
• Levanta las piernas en el aire o apóyalas contra la pared.
• Mantén esta posición durante unos minutos y luego baja las piernas al suelo.

Bono: lávate las piernas con agua fría

Las duchas frías mejoran la circulación sanguínea y hacen que sea menos probable que la sangre se acumule en las venas. Una ducha fría diaria puede ayudar a reducir las arañas vasculares y las várices, ya que la acumulación de sangre hace que las venas se abulten y se hagan visibles debajo de la piel. La mejora del flujo sanguíneo también beneficia tu salud cardiovascular en general.

¿Has probado alguno de estos ejercicios? ¿Conoces otros entrenamientos que ayuden a combatir las arañas vasculares y las várices?