Un nuevo equipo siempre está asociado con el estrés, y no solo para la persona que cambió de trabajo. Es estresante para un niño que ha sido transferido a otra escuela, para un estudiante de primer año, para un adulto que viene a hacer un curso de recapacitación o incluso si se trata de un novato en el grupo de yoga.
El trabajo juega un papel importante en la vida de una persona, y es realmente genial si está haciendo lo que ama. Sin embargo, también sucede que el trabajo es interesante, la empresa es buena, las condiciones son satisfactorias, pero es imposible estar allí porque uno o varios colegas, o incluso todo el equipo, arruinan la vida y los nervios; y los gritos, la agresión y el bullying se convierten en una realidad cotidiana. Y si no se puede renunciar, solo queda encontrar una manera de llegar a un acuerdo con este “serpentario”.
Lamentablemente, algunas personas, sin ningún remordimiento, son groseras con todos a su alrededor, ofrecen consejos no solicitados y hacen preguntas inapropiadas. En resumen, no saben cuándo callarse. A menudo, debido al shock, no sabemos qué responder, y los ofensores se van impunes. Pero los protagonistas de nuestra historia lograron pensar rápido y les dieron su merecido a estas personas descaradas y maleducadas.
Dicen que el amor de madre se hace más fuerte con el paso del tiempo y que, incluso, podemos sentirlo luego de la muerte. Es por eso que muchos de nosotros sentimos una conexión especial con la mujer que nos dio la vida, al punto de querer verla siempre feliz y complacerla en todo. Sin embargo, ¿hasta dónde somos capaces de diferenciar el amor de la dependencia emocional?
Debe ser una de las peores pesadillas de un astronauta: flotar hacia el espacio exterior sin esperanzas de regresar. Imagina que te alejas lentamente de la Estación Espacial Internacional y en dirección a la oscuridad infinita, todo por culpa de un accidente. No hay nada más que un vacío frío. Afortunadamente, aún tienes una oportunidad de sobrevivir. Analicemos en detalle el momento en que esto podría ocurrir. Bien, te encuentras en la Estación Espacial Internacional. Se encuentra a una altitud de unos 400 km, en las capas superiores de la atmósfera. Es importante mencionar que no está inmóvil en medio del espacio. La gravedad de la Tierra la atrae constantemente. Para no caer, debe volar alrededor de nuestro planeta a unos 27 350 km/h. Esa velocidad es suficiente para que la estación se resista a la atracción terrestre.
Te sientes un poco mareado, colgado en el aire 10 pisos por encima del suelo. Lo único que te impide caer es una de las palmas y los pies descalzos. Hay una multitud reunida en la calle. Muy, muy abajo. La gente, diminuta como las hormigas, no para de gritar y señalar con el dedo. Supuestamente, a ti y a tu preciosa carga. La anciana en tus brazos parece frágil y aterrorizada. Y, aun así, sus manos son sorprendentemente fuertes donde sostienen su gato aferrado al pecho. Las llamas se extienden por arriba de tu cabeza, saliendo por las ventanas. Y el humo sigue quemándote la garganta.Todo empezó hace tres semanas. Estás viendo un partido de fútbol y tu equipo va perdiendo. Al cabo de un rato, no puedes aguantar más. Te levantas de tu asiento y empiezas a pasearte frente al televisor. En cierto punto, ¡te agitas tanto que golpeas la pared con la palma abierta! Y... te quedas atascado. Tus primeros pensamientos no son muy coherentes. “Emmm... ¿Qué es esta cosa pegajosa en mi pared?”. Dedo a dedo, despegas tu mano. La examinas. Tocas la pared.
Cada embarazo es único e irrepetible, sin embargo, todas las mamás coinciden en que la llegada de un bebé es uno de los momentos más emocionantes de sus vidas. Además de cuidarse bien, también deben lidiar con ciertas situaciones que las hacen desear aún más tener a sus hijos o hijas en brazos. Nadie dice que sea un proceso fácil, pero quienes lo vivieron podrán contar mejor esta experiencia.
El océano es uno de los lugares más increíbles de la Tierra. No solo es hermoso, sino también peligroso. Todos conocemos a los tiburones, los pulpos enormes, las fuertes tormentas y el Triángulo de las Bermudas. Pero hay algo más aterrador que todas estas cosas. Estoy hablando de olas rebeldes. El yate de cuatro pasajeros “Mignonette” navega por el Cabo de Buena Esperanza en el sur de África. Sopla una tormenta, pero el yate sobrevive con éxito. Por la tarde, el viento ha disminuido por completo. El mar está en calma. El equipo, cansado tras la tormenta, se va a descansar.
Ser madre es mucha responsabilidad y, honestamente, un trabajo difícil. Hay mujeres que de plano deciden no traer a ningún niño al mundo mostrando algunas razones válidas para ello. Sin embargo, también las hay quienes, aun sin querer tener hijos, deciden decirle sí a la maternidad porque su pareja quiere ser padre. Acceder puede ser muy arriesgado, podría terminar siendo la mejor decisión o la peor.
Existen padres que quieren salirse de lo convencional y permiten que sus hijos hagan cosas que, a ojos de muchos, son cuestionables. Una de ellas es dejar que se tatúen a una edad temprana y, por más que sean hechos con pegatinas y plumones lavables, igual se consideran inapropiadas para sus edades. Este es el caso de una mamá que no solo fue cuestionada por su decisión, sino que también fue interrogada por los trabajadores sociales tras las quejas constantes que tuvieron los padres de la escuela a la que sus hijos asistían.
No es algo raro que el equipo que trabaja en nuestras películas favoritas oculte detalles significativos durante su producción, ya sea con frases que indican un giro en la trama o algún objeto que haga referencia a algún personaje de la vida real. En el caso de los diseñadores de vestuario, sucede lo mismo, por lo que algunos usuarios de la web decidieron abrir bien sus ojos y notaron elementos curiosos escondidos en la ropa que se usó en algunos filmes.
Ninguno de nosotros sabe lo que nos deparará el destino, y estos famosos tampoco pensaron que llegarían a alcanzar el estrellato algún día. Si bien nuestra imaginación no tiene límites, nada mejor para mezclar realidades que una inteligencia artificial. Fue así como pudimos poner los futuros alternativos de estos 14 famosos en una imagen.
Hay quien dice que el tiempo que hay que permanecer en un trabajo son 8 meses, mientras que otros piensan que para demostrar profesionalismo, deberíamos estar en el puesto al menos 6 años. Pero la única regla que quizás sea válida para dejar un empleo es que haya dejado de gustarte. A veces, solo se trata de encontrarle el lado positivo. Después de todo, además de servir para agrandar el currículum, la experiencia es aprendizaje... o al menos nos deja alguna que otra situación tragicómica digna de compartir.
Cada artículo que llega a las tiendas ha sido planificado hasta el último detalle, tanto en calidad como en diseño. Y a veces incluye características cuyo verdadero propósito es muy difícil de entender. Pero, por supuesto, existe una explicación perfectamente lógica que nos hace darnos cuenta de que todo lo que nos rodea tiene su propia función especial.
Criar a un hijo no es tarea fácil. Y ni hablar de hacerlo con hermanos. Que crezcan juntos suele aligerar un poco el trabajo, pero esto también puede llevarnos a cometer algunos errores que podrían generar rivalidad, malas relaciones entre pares o que alguno de los dos se sienta dejado de lado. Así sucedió con esta familia, cuyos padres tuvieron un tropiezo que ahora no saben cómo solucionar.
Superar la pérdida de una persona que amamos puede ser una de las pruebas más difíciles de la vida; sin embargo, nunca es tarde para encontrar el amor de nuevo y recuperar la ilusión de construir un futuro con alguien. Prueba de ello es la historia de Humberto Zurita y Stephanie Salas, quienes comenzaron a verse con otros ojos después de casi toda una vida e iniciaron un romance en la madurez.
La celebración de una boda es solo la punta del iceberg. Detrás del baile, la ceremonia y todo lo demás, hay días, semanas o incluso meses de planificación por parte de la pareja que se casa. Sin embargo, por más que los nuevos esposos quieran tenerlo todo fríamente calculado para sorprender gratamente a sus invitados, a veces hay situaciones que se les escapan de las manos y terminan dándoles una sorpresa no tan agradable a quienes los acompañan el día de su festejo.
El empleo es una parte importante de nuestras vidas, por lo que queremos que todo vaya bien con él. Sin embargo, en la realidad siempre hay contratiempos: a veces no se paga la remuneración prometida, mientras que en otras ocasiones se exige que uno haga el trabajo propio ¡y el del compañero, solo por si acaso!
Muchos de nosotros esperamos con ansias llegar a casa, a nuestro propio espacio, si es que hemos tenido un mal día, estamos cansados o simplemente queremos sentirnos más cómodos. Sin embargo, algunas personas que comparten vivienda pueden sentir todo lo contrario, gracias a malos hábitos o excentricidades de sus compañeros.
Según una investigación, las mujeres de entre 25 y 34 años dedican un 51 % más de tiempo a las tareas de domésticas que los hombres de la misma edad. Pero, la cuestión es que esta brecha no solo afecta a las mujeres que no tienen trabajo, sino también a las que sí lo tienen. Y aunque a veces cocinar y limpiar la casa puede ser una tarea satisfactoria que alivia el estrés, otras veces puede ser muy agotador.
Es normal cometer algún error de vez en cuando en nuestros trabajos. Somos humanos y nos equivocamos, más aún cuando somos novatos o acabamos de empezar en una nueva empresa. Pero las historias que te vamos a contar hoy van mucho más allá. No se trata de pequeñas equivocaciones o malentendidos, sino que hablamos de errores garrafales, los cuales, en muchos casos, podrían haberse evitado si cualquier persona hubiera usado la lógica.
El mundo en el que vivimos no siempre está lleno de brillo y lentejuelas, y es muy poco probable que sucedan cosas como las de los cuentos de hadas. Sin embargo, de vez en cuando, podemos ser testigos de algo aún más maravilloso: la benevolencia y el sacrificio personal por alguien o por una causa que nos emocione. Por ejemplo, un abuelo que insiste en enviarle una tarjeta de puño y letra a su nieta cada día de los enamorados. Estos momentos únicos son una cálida caricia para nuestros corazones, tal como lo puede ser el abrazo de nuestra propia abuela. Además, nos invitan a comportarnos de igual manera.
Trabajar en un ambiente laboral armonioso influye de manera muy positiva en nuestro rendimiento, ya que sentir que formamos parte de un equipo donde hay respeto, donde se nos valora, puede inspirarnos a ser cada día mejores y a alcanzar con mayor efectividad nuestras metas. Para ello, siempre tendremos un líder o jefe que nos impulse y nos guíe. Pero ¿qué pasa cuando esa persona hace todo lo contrario y no nos trata de la mejor manera?
La mayoría de nosotros nos hemos metido en alguna situación en la que se malinterpretó lo que queríamos decir. Este artículo te ofrece consejos sobre aquellas frases que es mejor evitar, para que tus palabras nunca se interpreten como duras o poco profesionales. Incluso la situación más desagradable puede volverse a tu favor con la elección correcta de palabras.
Pasamos la mayor parte del tiempo trabajando, por eso es muy importante sentirnos cómodos en ese ambiente. Incluso a veces estamos dispuestos a conseguir un empleo con un salario más bajo, pero con un buen equipo. Sin embargo, algunos colegas logran arruinar todo y, muchas veces, lo hacen sin querer. Hay quien comienza a cocinar un pescado en el horno de microondas en medio del día laboral, otro se adueña de tus logros y por último siempre está el que se queja de los demás con los jefes.
No hay nada que la gente no tire por falta de uso: una computadora portátil que funciona, una casa nueva para el gato, una bicicleta eléctrica, incluso una armadura. Y es bueno que haya quienes no tengan miedo de sacar todos esos objetos buenos del vertedero y darles una segunda vida. Al fin y al cabo, lo que es basura para una persona puede ser un verdadero tesoro para otra.
Algunos, para sentirse felices, lo único que necesitan es renunciar al trabajo. A veces ocurre que uno se acostumbra tanto a la rutina que no se da cuenta de lo mal que lo está pasando. Pero siempre puede haber un empujón o una señal para que la gente se diga a sí misma: “Ya no se puede vivir más así”.
El público simpatiza con los personajes encantadores, y no importa si sus acciones son moralmente correctas. Uno de los ejemplos podría ser Loki, del Universo Cinematográfico de Marvel. Según la trama, no es para nada bueno e inocente, pero es tan carismático que muchos se enamoraron de él, y no del positivo Thor.
Detrás de una película o serie, hay un gran equipo de especialistas de distintas profesiones, incluyendo directores, consultores y guionistas. Cuando la trama se trata de astrofísica, psicología, coreografía u otros ámbitos limitados, se invita a expertos a asesorarlos. Aun así, al ver un filme, los espectadores a veces se preguntan: ¿por qué nadie les dice a los cineastas que algunos trucos y acciones en el set se han vuelto obsoletos y se ven bastante ridículos?
Se suele decir que el amor no entiende de clases sociales, culturas, idiomas, etc., y así es: cuando nos enamoramos, poco importan esos “detalles”. Pero no es lo mismo estar simplemente enamorado/a de alguien que construir con ella o con él una relación sólida, próspera y a largo plazo. Es en esa labor donde realmente se verán todas esas diferencias entre las realidades y costumbres de uno y de otro. Probablemente haga falta mucho más que amor para poder superar todos esos obstáculos.
A simple vista, la natación artística es una disciplina que combina la gimnasia con la danza y el nado. Y sus atletas van más allá de ser una cara bonita con atuendos coloridos y brillantes. Además de caracterizarse por realizar movimientos al ritmo de la música dentro del agua, las nadadoras también requieren de resistencia, fuerza y flexibilidad, y muchísimas horas de entrenamiento para lograr una máxima coordinación entre las integrantes del grupo.
Uno va a trabajar todos los días y no se da cuenta de que está rodeado de gente interesante. Pero en la fiesta de fin de año, los compañeros se revelan en todo su esplendor y aprenden mucho unos de otros. El tímido ingeniero resulta ser un bromista y un animador, la callada enfermera baila alegremente en el escenario, y el director general se da cuenta de que no parece caerle bien a nadie en el equipo.
Una entrevista laboral puede ser la puerta para conseguir el trabajo de nuestros sueños, pero también suele ser un momento de estrés y nervios. Todos tratamos de causar una buena impresión y de convencer al reclutador de que seríamos perfectos para el puesto. Sin embargo, a veces podemos lograr todo lo contrario con ciertas actitudes y sabotear nuestra gran oportunidad.
Todos aquellos que han tenido una entrevista al menos una vez en su vida saben que este es un acontecimiento extremadamente emocionante, por lo tanto, el resultado siempre es impredecible. Tanto para quienes buscan empleo como para los reclutadores. Algunos pueden encontrar que las preguntas del gerente de contratación son demasiado inadecuadas, mientras que otros pueden presenciar un comportamiento extraño por parte de un candidato justo en medio de una entrevista.
En promedio, una persona trabaja más de 90 mil horas en su vida. De acuerdo, eso es mucho, y el trabajo se convierte casi en un segundo hogar para nosotros: en ocasiones pasamos más tiempo con los colegas que con la familia. Y, naturalmente, de vez en cuando en el trabajo hay situaciones que se recuerdan durante años.
Los amigos son compañeros con los que decidimos pasar nuestros buenos y malos momentos. Entre los animales también pueden surgir estos lazos, cuando ellos encuentran algún camarada con quien compartir sus locuras. En ocasiones, esas amistades ni siquiera tienen que ser de la misma especie para convertirse en un gran equipo.
