9 Consejos para aquellas que quieren hacerse una manicura segura (Spoiler: corres un riesgo si lo haces en un centro comercial)
Últimamente, los foros y las redes sociales están repletos de una gran cantidad de historias de horror sobre el hecho de que, durante la manicura, se puede contraer hepatitis o alguna otra enfermedad desagradable. Como resultado, algunas de nosotras incluso decidimos limar nuestras uñas y aplicar la laca con nuestras propias manos, mientras que otras simplemente se dieron por vencidas y continuaron visitando los procedimientos habituales. La verdad, como siempre, está en el medio: debes elegir un salón donde presten atención no solo a la belleza de las uñas, sino también a las normas de seguridad necesarias.
Genial.guru intentó averiguar las condiciones óptimas para hacerse la manicura y cuándo es mejor darse la vuelta en la entrada para no arriesgar tu salud.
1. El sobre con utensilios debe abrirse ante tus ojos
El tratamiento adecuado de los utensilios siempre se realiza en un sobre de papel que el especialista de manicura debe abrir delante de ti. En el interior de la bolsa debe haber un pequeño indicador cuadrado. Inicialmente, será gris, y después de permanecer en el horno esterilizador adquirirá un tono rosa oscuro o marrón claro (todo depende de si el tratamiento se llevará a cabo con vapor o aire seco).
Esas acciones de manicurista son una garantía de que su herramienta queda libre de todo tipo de bacterias que quedan después del cliente anterior y es completamente segura de usar.
2. Los palitos de naranjo y las servilletas se pueden usar solo una vez
Todos los consumibles para manicura deben ser desechables. Por lo tanto, asegúrate de ver cómo se reciclan las servilletas y los palitos en el salón de belleza. Los palitos usados deben colocarse en contenedores especiales para desechos (algunos especialistas de uñas incluso parten los palitos).
Sucede que en los salones deciden ahorrar dinero y poner una toalla normal bajo las manos de los clientes la que simplemente sacuden después del procedimiento. De hecho, esto es una violación directa de las normas de seguridad: se supone que la estética de las uñas debe tratarse en una servilleta especial.
3. Una manicura de calidad requiere al menos una hora
Antes de hacerte las uñas, pregúntale a la manicurista cuánto tiempo tomará el procedimiento. Si te dice que “aquí se hace en 30 minutos”, será mejor que busques otro salón. El hecho es que la manicura clásica ocupa aproximadamente una hora, gastando 40 minutos solo en retirar la cutícula y dar la forma deseada a las uñas.
Se requieren unos 20 minutos más para recubrir las uñas con esmalte (desengrasado, aplicación de una base, dos capas de barniz y un fijador). Por supuesto, se puede hacer más rápido, pero en este caso existe el riesgo de que la manicura pierda su aspecto en una semana. Pero una manicura bien hecha se mantendrá bien, incluso cuando las uñas empiecen a crecer.
4. Un profesional de manicura nunca aplicará un esmalte barato
¿Te ofrecen hacer una “manicura de lujo casi gratis”? No dudes en preguntar qué materiales utilizan. La base sobre la que se aplica el esmalte de uñas barato puede resecar las uñas. Debido al alto contenido de ácidos, penetra profundamente la placa ungueal y daña su estructura. Como resultado, después de un par de estos tratamientos, las uñas pueden comenzar a desintegrarse. Por lo tanto, la laca y otros materiales en el salón de belleza deben ser profesionales.
5. El cliente y la manicurista deben estar protegidos de los productos químicos
Muchos materiales para modelar las uñas tienen un fuerte olor desagradable, y el polvo acrílico que se forma al cortar capas viejas de recubrimiento puede ser perjudicial para la salud. Es por eso que cada mesa de manicura debe estar equipada con un sistema de ventilación. Además, cada salón de belleza debe estar equipado con un extractor. Mientras estás esperando tu turno, fíjate en cómo trabaja la manicurista con otras personas: debe usar la mascarilla de respiración y mantener los productos químicos a una distancia segura del cliente.
6. La manicurista debe hacer la manicura solo en manos y uñas sanas
No te apresures a respirar con alivio si te dejaron sentarte en la mesa sin prestar atención a los pequeños rasguños en la piel de las manos y las enfermedades visibles de las uñas. Los salones de belleza que valoran su reputación nunca se arriesgarán a trabajar con las manos en estas condiciones. En tal caso, recomendarán someterte a un tratamiento, y solo después volver para hacer la manicura y modelado.
Deberías prescindir del servicio del salón donde nadie presta atención a la condición de las manos de los clientes. Incluso con el tratamiento adecuado de los utensilios, existe la posibilidad de contraer una infección por hongos u otra enfermedad desagradable.
7. Los especialistas en manicura deben manejar profesionalmente los utensilios y saber trabajar con materiales químicos
Raspador de uñas, recortador, todo tipo de cortadores, e incluso acetona, acrilatos, polímeros sintéticos... Es increíble lo que se usa para hacer que nuestras uñas sean largas y hermosas. Pero no se debe olvidar que un especialista en manicura debe sostener con seguridad en sus manos cualquiera de los utensilios. No dudes en pedirle el certificado de asistencia a los cursos especializados.
Además, todos los empleados del salón están obligados a recibir instrucciones del proveedor de productos sobre la manipulación segura de materiales químicos. Y otro punto importante: antes de usar las herramientas para modelar las uñas debe hacerse una prueba de alergias.
8. El especialista en manicura debe tener una apariencia pulcra y mantener el orden en su lugar de trabajo
Una gran ventaja para la reputación del salón de belleza será la apariencia pulcra y cuidada del personal y el orden en las mesas de manicura. Antes de comenzar a trabajar con un nuevo cliente, cada manicurista debe desinfectar el lugar de trabajo y desechar los guantes usados. Luego debe lavarse las manos con jabón antibacterial y ofrecerle hacer lo mismo a su nuevo cliente. Y no es paranoia, sino una prevención efectiva de posibles enfermedades infecciosas.
9. En el salón de belleza no debe haber un montón de revistas viejas
Suena inesperado, pero la fuente de microbios pueden ser las revistas que los clientes suelen ojear mientras esperan su turno. Debes admitir que es poco probable que se traten con una solución antibacteriana, aunque las páginas desgastadas de estas publicaciones hayan estado en manos de muchas personas. Entonces, si de repente quieres familiarizarte con los últimos consejos de moda, toma solo ediciones nuevas de la pila.
Bono: si recurres a los servicios de un especialista autónomo o deseas hacerte una manicura exprés
- Es mejor acudir al especialista del servicio de uñas autónomo con tus propias herramientas. Estas personas generalmente no tienen dinero para comprar equipos de esterilización costosos. El horno de salón de belleza garantiza la eliminación completa de todos los microorganismos peligrosos, y la lámpara UV, que es utilizada por muchos comerciantes autónomos, no representa una amenaza grave para algunas variedades de bacterias y virus. Lo mismo se aplica a los intentos de eliminar todo lo peligroso bajo el chorro de agua.
- La manicura exprés en los centros comerciales no se puede llamar un procedimiento 100% seguro. A menudo, los especialistas trabajan las uñas apresuradamente y no tienen posibilidad de limpiar cuidadosamente los utensilios de trabajo.
- El deseo de “hacerte las uñas” en los días previos a las fiestas y días festivos se asocia con un riesgo grave. Precisamente en este momento los empleados de salones de belleza se están ahogando en la afluencia de clientes y no siempre tienen tiempo para desinfectar adecuadamente los utensilios.
¿Tuviste que renunciar alguna vez a la manicura porque la apariencia de la manicurista y/o el ambiente en el salón de belleza no te inspiraron confianza?