Ir a hacerse la manicura una vez al mes se ha convertido en una agradable rutina para muchas de nosotras. Nuestras manos se ven bien y pasamos nuestro tiempo libre aprovechándolo al máximo. Hoy hemos decidido recopilar algunos trucos útiles que harán que tu rutina de cuidado de las uñas sea aún más sencilla y eficaz. En el primer bono, hemos incluido algunos tips originales para que puedas llevar una vida más fácil con las uñas largas, y el segundo bono irá a tu rescate si se te ha estropeado el esmalte de uñas en casa y no sabes cómo arreglarlo.
Cuidar las manos y las uñas es parte de nuestra rutina de belleza; sin embargo, la manicura es una manera importante de expresar nuestra creatividad. Algunos dibujan en sus uñas motivos exóticos y coloridos, mientras que otros prefieren la belleza natural. Sin importar la preferencia de estilo, cada persona tiene una historia que contar a través de la manicura.
Al parecer, hoy sabemos todo (e incluso demasiado) sobre la manicura. Las mujeres modernas y hasta los hombres cuidan mucho de sus manos, asisten regularmente a los salones de belleza y no dudan en experimentar con el color, diseño y largo de sus uñas.
Las heroínas de nuestro artículo saben que incluso una cosa tan aparentemente pequeña como una manicura puede mejorar el estado de ánimo e incluso la autoestima. Y aunque no siempre les salga perfecto, están dispuestas a mejorar sus habilidades. Muchas de ellas pueden dedicar unas horas al diseño de sus uñas o a elegir el color adecuado. ¿Y por qué no?
Algunas dibujan en las uñas patrones increíbles y les piden a los profesionales de los salones que les hagan extensiones largas, mientras que otras abogan por la sobriedad y la belleza natural. Pero, en cualquier caso, cada mujer tendrá un par de historias relacionadas con la manicura: desde el primer esmalte de gel hecho en casa hasta la invaluable ayuda del esposo, que tuvo que dibujar flores.
Cada profesión tiene sus propios secretos. Y no todos los especialistas tienen prisa por revelarlos a la gente común. Realmente no es necesario que sepamos algunos trucos. Pero hay momentos que tienen que ver con la belleza y la salud, y allí ya no nos haría daño estar completamente al tanto. Esta vez decidimos averiguar qué esconden los trabajadores de los salones de uñas a los clientes comunes.
Últimamente, los foros y las redes sociales están repletos de una gran cantidad de historias de horror sobre el hecho de que, durante la manicura, se puede contraer hepatitis o alguna otra enfermedad desagradable. Como resultado, algunas de nosotras incluso decidimos limar nuestras uñas y aplicar la laca con nuestras propias manos, mientras que otras simplemente se dieron por vencidas y continuaron visitando los procedimientos habituales. La verdad, como siempre, está en el medio: debes elegir un salón donde presten atención no solo a la belleza de las uñas, sino también a las normas de seguridad necesarias.
A medida que se van aproximando las fiestas, a todas se nos antoja algo mágico e inusual. Una manicura adecuada no sólo podrá levantarte el ánimo sino también destacar tu personalidad y variar tu rutina.
Las mujeres italianas suelen despertar envidia entre otras mujeres, ya que saben lucir elegantes y con estilo sin importar la edad. Incluso en los calurosos días de verano, cuando todo a su alrededor se derrite bajo el sol, las italianas mantienen una apariencia fresca y llena de energía. Por lo tanto, definitivamente vale la pena tomar nota de sus trucos de moda.
¿Sabes qué? Dentro de 10 años, serás una persona completamente diferente. Bueno, al menos tu esqueleto lo será. Para alcanzar su tamaño adulto, tu esqueleto ha pasado por un proceso llamado osificación, que es el desarrollo del crecimiento y la formación óseos. ¡Además, se regenera por completo una vez cada aproximadamente 10 años! Todo este proceso garantiza que siempre tengas células óseas sanas que puedan mantenerte y proporcionar calcio a tu cuerpo. Hablando de formas en que el cuerpo se regenera: cada segundo creas 25 millones de células nuevas. Haré las cuentas por ti. Eso significa que en unos 20 segundos habrás producido más células que personas hay en los Estados Unidos. Piensa en eso la próxima vez que no te sientas muy productivo.
Leemos sobre la belleza y el cuidado de la piel y el pelo en muchos lugares. Hemos escuchado que cortar el cabello regularmente hace que crezca más rápido, que el acné se debe a la falta de higiene facial, que tomar un poco de sol todos los días nos hará sentirnos bien y vernos fabulosas, entre muchas otras cosas. Mitos, todos mitos que desmentiremos a continuación.
Muchas mujeres estamos dispuestas a someternos a distintos tratamientos y procedimientos para sentirnos más bonitas y estar felices con la imagen que se refleja en el espejo. Uno de ellos es la manicura, y es que nuestras manos dicen mucho de nosotras; por eso, nos creamos grandes expectativas sobre el resultado y esperamos que se cumplan al final de la sesión. Lamentablemente, no siempre es así y a veces preferimos haber ahorrado ese dinerito.
El hábito de ahorrar es maravilloso, pues nos permite llenar el cochinito para comprar ese algo que por años habíamos deseado tener o irnos a esas vacaciones que tanto tiempo habíamos planeado. Lograrlo requiere un gran esfuerzo y privarnos de ciertas cosas que nos gustan o queremos.Desafortunadamente, a veces nos metemos tanto en el propósito que olvidamos invertir en cosas importantes. Por ello, a continuación te compartimos una pequeña lista de cosas en las que —sí o sí— es necesario gastar un poco más de la cuenta.
A pesar de la alegría de ser mamá, muchas mujeres tienen emociones encontradas por su apariencia física y, por lo general, el malestar viene de esos kilitos de más. La realidad es que durante nueve meses, el organismo se preparó para recibir a ese pequeño y, como resultado, las hormonas provocaron que apareciera la celulitis, el acné o la hinchazón. Así que este es el momento de aceptar ese cuerpo imperfecto tan maravilloso y aumentar la autoestima.
A veces, una manicura mal hecha o un corte de pelo tan esperado que ha salido mal pueden arruinar nuestro estado de ánimo durante mucho tiempo. Y mientras algunas personas prefieren quejarse de los problemas exclusivamente con sus familiares y amigos, las más valientes comparten sus preocupaciones con todo Internet.
¡Hacemos todo tipo de cosas para lucir atractivos y jóvenes! Manicura, pedicura, coloración y corte de pelo, tratamientos cosméticos y maquillaje elaborado son solo algunos de los ítems de una larga lista. Y es estupendo cuando todos estos servicios son prestados por un verdadero profesional. Pero, por desgracia, no siempre es así.
A muchas chicas no nos gusta arreglarnos las uñas en casa. Es más fácil confiar las manos a una especialista en manicura que hará todo a la perfección, y no tendrás que temer que el esmalte se quiebre esa misma noche o que la uña termine con una forma que no te gusta. Pero, desafortunadamente, no todas las que trabajan en los salones son unas verdaderas profesionales: algunas especialistas de la industria de las uñas hacen su trabajo de mala fe.
La manicura es una forma de expresarse una misma, igual de importante que la ropa o el maquillaje. A muchas de nosotras nos gusta experimentar con la longitud y el color de las uñas. Y a veces parece que cuanto más largas son, más opciones de diseño se les puede aplicar, pero, en realidad, no es así en absoluto.
Ya sean coloridas o clásicas, para algunas mujeres es imprescindible tener las uñas bonitas. Pero, a veces, en este intento de embellecer la imagen se puede obtener todo lo contrario. Hay chicas que prefieren hacer las cosas ellas mismas y otras que eligen acudir a los profesionales. Sin embargo, sea quien sea que lo haga, puede ser una misión imposible evitar una tragedia de la manicura.
Cada vez que aparece algún nuevo tratamiento de belleza, las celebridades e influencers suelen ser los primeros en probarlo y darlo a conocer. En esos momentos de auge, estos tratamientos suelen ser costosísimos y difíciles de encontrar fuera de las grandes ciudades. Luego, poco a poco, se expanden por doquier y, a medida que pasa el tiempo y van dejando de ser la moda del momento, sus costos bajan, haciéndose cada vez más asequibles.
Seguramente, todas las mujeres han ido al peluquero solo a “emparejar” las puntas y han salido con una sorpresa. O también, en ocasiones, la manicura resulta ser muy diferente de la que se había planeado inicialmente. Ahora bien, los profesionales de la industria de la belleza también tienen historias que son absolutamente imposibles de olvidar. Por ejemplo, un intento de acudir a la estética a las 5 de la mañana, aunque la atención en realidad comience a las 10.
Todos nos esforzamos por lucir atractivos. Por eso vamos regularmente a los salones de belleza y, de vez en cuando, pensamos en pequeños cambios o incluso en un cambio de look. Pero a veces, esos cambios no son más que una decepción. Por ejemplo, decides ir a una nueva peluquería y sales con un peinado que te da ganas de huir de la ciudad. O quieres hacerte la manicura por primera vez con un profesional, y luego te arrepientes 100 veces.
Casi todos los años las tendencias de belleza cambian. De esta forma, si hace poco las cejas con un contorno claro se veían espectaculares, entonces este año las voluminosas y peinadas se han puesto de moda. Las famosas guapas ya comenzaron a llenar su cuenta de Instagram con fotos de esas cejas. Por ejemplo, Rosie Huntington-Whiteley, entre otras.
A veces pareciera que encontrar a un especialista decente en un salón de belleza es más difícil que incorporarse al trabajo después de las fiestas. Por ejemplo, puede que gastes una gran suma de dinero solo para cortar las puntas, y resulta que al final del trabajo, has perdido una docena de centímetros de cabello. Incluso tal vez regreses a tu hogar con unas raíces rojas que definitivamente no habías pedido.
La manicura hecha en un salón de belleza es práctica y bonita a la vez, por lo que a muchas personas les gusta. Sin embargo, no todos reciben lo que esperan, ya que hay gente que se retira satisfecha del salón de belleza, mientras que otras pobres almas salen casi llorando.
A veces parece que es más difícil encontrar un profesional decente en un salón de belleza que un cónyuge digno. Al fin y al cabo, puedes desembolsar una buena suma de dinero y al final obtener una manicura que un niño habría hecho mejor. Y luego volver a pagar para arreglarla. Ni hablar de todo tipo de cortes y teñidos de cabello.
Hay días en los que deseamos un cambio de imagen: teñirnos nuestro cabello de otro color, hacernos una manicura elegante o incluso recortarnos el flequillo. La mayoría busca la ayuda de profesionales, mientras que otros intentan hacerlo todo con sus propias manos. Pero no hay garantía de que no vayan a tener un percance y todo el trabajo se eche a perder.
Parece que tan solo ayer, toda mujer que se consideraba moderna andaba con el ombligo perforado, se extendía las uñas con acrílico y se deshacía del vello no deseado con unas pinzas. Hoy en día, estos estándares de belleza no pueden llamarse de otra manera que detalles anticuados. La moda es cíclica, una tendencia reemplaza a otra, y lo principal en este maratón interminable es no perder la individualidad.
Todo el mundo quiere lucir bien todos los días: esto nos da confianza. Pero es cierto que no siempre funciona. O en la peluquería no te cortan el pelo como pediste, o te maquillan de tal forma que te da miedo mirarte al espejo. Y también sucede que cuando comenzamos a experimentar con nuestra apariencia nosotros mismos, algo nos sale mal.
A muchas personas no les caen bien los gerentes de Recursos Humanos, ya que consideran que son enfadosos y solo buscan un pretexto para hacerles preguntas raras a los candidatos. Pero los solicitantes de empleo frecuentemente provocan a los reclutadores o simplemente no pueden establecer un contacto con ellos, por lo cual reducen sus oportunidades de obtener el empleo.
¿Alguna vez has tratado de calcular cuánto dinero se necesita para arreglarse? El vestido, el peinado, la manicura, y ya tenemos una suma considerable. Pero las protagonistas de nuestro artículo demostraron con su ejemplo que es posible ahorrar bastante en todo eso con un poco de esfuerzo y cosas hechas con las propias manos.
Soy Cata y soy taxista. Solía dedicarme al periodismo, pero cuando mi agencia me dejó a mi propia suerte, tuve que elegir: ir a un pequeño medio de comunicación como corresponsal o inventar algo más. La solución se encontró espontáneamente cuando hablé con un taxista. Parecía que ganaba mucho dinero, así que decidí probar hasta que encontrara algo más.
No hace mucho tiempo, la belleza natural no estaba de moda; las chicas querían mejorar su apariencia y recurrían a varias minimanipulaciones para lograrlo, a pesar de la incomodidad o inconveniencia del procedimiento elegido. Algunas incluso tuvieron que lidiar con personas poco profesionales. Pero hoy, cada vez más señoritas están abandonando las tendencias de belleza que alguna vez fueron populares, eligiendo el cuidado y la belleza naturales. Uñas de plástico brillantes, cara demasiado bronceada (larga vida al solárium): son algunas de las reliquias del pasado, que no reflejan la riqueza y el gusto de una mujer, sino que, más bien, insinúan la ausencia de los mismos.
Mi llamo Julia, y todos mis amigos saben que soy una gastadora terrible. Para hacer que mi vida sea más fácil y agradable, estoy dispuesta a gastar todo el dinero que gano. Pero un día, mi esposo y yo decidimos que era hora de comprar nuestra propia vivienda. Y luego quedó claro que, si queríamos vivir en nuestro propio departamento, tendríamos que cambiar un poco nuestro estilo de vida y no solo ganar más, sino también gastar menos. Analicé nuestros gastos y me di cuenta de que se puede ahorrar en algunas cosas, y, al hacerlo, habrá más beneficios que daños.
¿Alguna vez has contado cuánto dinero gastas en servicios en el sector de la belleza? Cosméticos, cortes de cabello, manicura, pedicura... la lista podría continuar hasta el infinito. Y no olvidemos las prendas que periódicamente necesitan ser renovadas. Al parecer, los personajes de esta recopilación pensaron en eso y decidieron que podrían hacer algunas de esas cosas de manera independiente.
China comparte fronteras con 14 países, pero los habitantes locales conservan su cultura y tradiciones, las cuales pueden asombrar a un turista no preparado. Solo basta con ver la ausencia de excusados, niños con correas, y también la única posibilidad de hacerte un tatuaje y manicura directamente en la calle.