Cómo identificar constelaciones en el cielo nocturno
Aunque la mayoría de los observadores se limitan a dejar que sus ojos se pierdan entre las salpicaduras estelares, cada vez son más los aficionados que van más allá y se interesan por identificar las constelaciones con el fin de comprender mejor el cielo de nuestro planeta y disfrutar de las historias que estas figuras nos cuentan. Estas son agrupaciones de estrellas cuya unión imaginaria forma una silueta reconocible en la bóveda celeste. Nacieron de la imaginación de nuestros antepasados, quienes las utilizaban para contar leyendas, elaborar sus calendarios y orientarse durante largos viajes. A la fecha, La Unión Astronómica Internacional ha reconocido 88 constelaciones en total.
Si te interesa reconocer las constelaciones pero te sientes abrumado al ver tantos puntitos desparramados por todos lados, no te preocupes más. Hoy, Genial.guru junto a Ángel Molina, Secretario de la Agrupación Astronómica de San Fernando, en España, y autor del portal web El Diario del Astrónomo, te guiarán en esta travesía estelar para que logres identificar los grupos de estrellas como un experto.
Preparando la observación
“¿Por dónde empiezo?”. Seguramente te hiciste esa pregunta cuando intentaste definir cuál de esos cientos de tríos de estrellas era el cinturón de Orión. ¡No te desesperes! Debemos ir por pasos. Antes de sacar el mapa estelar que descargaste y salir corriendo por la noche al sitio más alejado que conozcas, es importante que sigas algunas instrucciones y tomes varias precauciones que facilitarán tu velada y te ayudarán a evitar inconvenientes.
El cielo perfecto, la noche perfecta...
De nada sirve preparar toda la indumentaria y herramientas si planificas la observación durante una noche lluviosa en el patio de tu casa. Según Ángel Molina, el cielo que necesitas debe estar libre de contaminación lumínica (muy lejos de la ciudad), debe carecer de humedad, y tiene que haber un clima no demasiado cálido. Es importante que, antes de ejecutar tus planes, mires el pronóstico del tiempo y ubiques terrenos tranquilos lejos de las metrópolis en donde puedas instalar tu observatorio.
La Luna no está invitada
Aunque es hermosa y también digna de admirar durante horas, la Luna es una enemiga para aquellos que tienen como objetivo la observación estelar, puesto que su intensa claridad oculta muchísimas estrellas y objetos celestes. Molina recomienda salir a cazar astros durante las noches de Luna nueva.
Equipo y provisiones
Sabemos que lo más importante son unos ojos curiosos y mucha emoción, pero si deseas disfrutar a pleno la experiencia, Molina recomienda equiparse con unos prismáticos, mapa estelar o planisferio, ropa abrigada, mantas, comida alta en carbohidratos (como galletas, pan y patatas), bebidas azucaradas con cafeína, mucha agua, una silla y, por lo menos, un acompañante que te ayude a armar el campamento y disfrute del momento contigo.
Aunque es probable que en el terreno no haya cobertura, es posible realizar llamadas de emergencia, por lo que, en el portal web El Diario del Astrónomo, recomiendan llevar un teléfono móvil cargado, unas linternas (de luz roja preferiblemente) y un botiquín de primeros auxilios. Antes de salir, cuéntales a personas de confianza qué harás esa noche y déjales anotada tu ubicación exacta.
Una vez terminada la espera, cuando te encuentres en el sitio y hayas montado tu equipo, es necesario que prepares tu visión. Deberás esperar entre 10 a 15 minutos para que tus ojos se adapten a la oscuridad. No uses el móvil, ¡relájate y permite que tus pupilas se dilaten por completo! En un artículo publicado en El Diario del Astrónomo, recomiendan utilizar gafas oscuras y evitar salir en horas de Sol durante dos días previos a la observación.
¡Vamos por las constelaciones!
¿Ya está listo el observatorio, el equipo instalado, la noche despejada y los ojos adaptados a la oscuridad? Pues... ¡manos a la obra! Aunque puedes utilizar un planisferio o mapa estelar, Molina recomienda descargar en tu pc o teléfono móvil una aplicación llamada Stellarium, herramienta que permite ubicar a través de dispositivos electrónicos todas las constelaciones, planetas y objetos celestes a tiempo real con tan solo introducir tu ubicación. Además, es muy sencillo utilizarla.
Sin más que añadir, ¡empecemos a cazar constelaciones!
Constelaciones Boreales o Septentrionales
Las constelaciones Boreales son aquellas que están ubicadas en el hemisferio norte del planeta tierra. Algunas no pueden verse desde el hemisferio sur, así que si vives en la zona indicada (encima del ecuador), presta atención a las siguientes constelaciones, ya que seguramente serán las que encuentres con mayor facilidad.
1. La Osa Menor
Según un artículo publicado en la web Space.com, la Osa Menor es una constelación con forma de cuchara ubicada en el hemisferio norte. Está conformada por 7 estrellas principales y es un excelente punto de partida para comenzar, ya que en la punta del mango de la figura está ubicada Polaris, la estrella del norte. No es la más brillante ni la más bonita, pero tiene la particularidad de estar siempre en el mismo sitio, justo encima del polo norte. Por lo tanto, no gira como las demás a lo largo de la noche. Dependiendo de qué tan cerca estés geográficamente de este punto, podrás ubicarla por encima de tu cabeza. Mientras más lejos estés, la verás más cerca del horizonte. Ayúdate con Stellarium o un mapa para hallarla.
2. La Osa Mayor
Justo debajo de Polaris, dibujando una línea diagonal imaginaria que cae hacía la izquierda, encontrarás otro cucharón igual a la Osa Menor, pero más grande y mirando en sentido contrario. Se trata de La Osa Mayor o Carro Mayor, debido a la forma que dibujan sus 7 estrellas principales. ¿Verdad que parece un carrito de compras?
A diferencia de la constelación que mencionamos antes, esta es muy fácil de identificar, ya que está bien definida y sus estrellas son muy brillantes (además es visible durante todo el año). En la punta de la cuchara encontrarás a Dubhe, y en el mango, a Alioth. Ambas estrellas son muy brillantes, así que te servirán de referencia.
3. El Dragón
Si te fijas bien, entre la Osa Menor y la Osa Mayor se encuentra una línea de estrellas serpenteando. Se trata de Draco, o el Dragón, una constelación conformada por 15 estrellas. Tiene forma de “S” al revés, con la cabeza formada por 4 astros más. Es muy sencilla de identificar, puesto que separa las dos constelaciones que mencionamos antes.
4. Casiopea
En la parte diametralmente opuesta a la Osa Mayor, nos encontraremos con Casiopea, una constelación en forma de M, W o zigzag conformada a simple vista por 5 estrellas principales. Está ubicada al noroeste de Polaris. Al ser tan fácil de identificar, usualmente es utilizada para ubicar el norte en caso de no poder localizar a la Osa Menor.
5. Cefeo
Entre la Osa Menor y Casiopea podrás encontrar una constelación con forma de casa al revés, llamada Cefeo. En la punta de su tejado se encuentra Errai, ubicada arriba a la derecha, muy cerca de la estrella Polar.
6. Orión
Está situada muy cerca del ecuador, por lo que puede ser vista desde ambos hemisferios, según un artículo publicado en Space.com. Posiblemente, esta sea la constelación más popular de todas. Sus tres estrellas principales alineadas la hacen muy fácil de identificar. Si te cuesta trabajo encontrarla, ubica al trío de estrellas que esté más próximo a Sirius, el astro más brillante del cielo, el cual forma parte de la constelación del Can Mayor.
Constelaciones Australes
Son aquellas que están ubicadas en la bóveda celeste del hemisferio sur del planeta. Si vives en esa zona (abajo del ecuador), ¡presta atención!
1. Cruz del Sur
Así como en el norte tienen a La Osa Menor, con la estrella polar apuntando hacia ese punto cardinal, las tierras australes cuentan con la preciosa constelación de la Cruz del Sur, que apunta al sur si prolongas cuatro veces y media en línea recta el eje principal de esta, partiendo de Acrux, su estrella más brillante. Está conformada por 4 estrellas que dibujan un rombo o cometa. La Cruz del Sur es tan representativa para el hemisferio que aparece retratada en las banderas de Australia y Nueva Zelanda.
2. La Liebre
Justo al sur de Orión y a la derecha de Sirius se encuentra La Liebre, o Lepus, un conejito cósmico que atraviesa los cielos nocturnos. Es una constelación sencilla de identificar debido al trapecio que conforman sus 4 estrellas principales. Según un artículo de Space.com, es fácil localizarla justo debajo de Orión después de las 9 de la noche.
3. Musca o Mosca Boreal
Justo abajo de la Cruz del Sur se encuentra una constelación menor conocida como La Mosca. Está conformada por 6 astros principales que hacen la forma de un trapecio, del que sobresale una cinta de tres estrellas en su vértice superior derecho. ¿La has visto alguna vez?
4. Centauro
El Centauro es una constelación extensa y muy vistosa. Está situada arriba de la Cruz del Sur, y en el límite norte de la Vía Láctea. Este grupo de astros forma una de las figuras estelares más grandes y llamativas que ofrecen los cielos del hemisferio sur. Tiene su máximo apogeo en el mes de abril.
Bono: cómo identificar planetas en el cielo
Es sabido por muchos que los planetas se diferencian de las estrellas en el cielo debido a su brillo, ya que a diferencia del de los astros, este es uniforme, más fuerte y no titila. Según un artículo publicado por Gonzalo Esteban López, Licenciado en Astrofísica por la Universidad Complutense de Madrid, no todos los planetas son visibles a simple vista. Solo Mercurio, Venus, Marte, Júpiter, y Saturno lo son, es decir, nuestros vecinos en el sistema solar. Si quieres aprender a diferenciar uno de otro, ¡sigue leyendo!
Mercurio
Este planeta es muy brillante, pero debido a que es el más cercano al Sol, su órbita es muy pequeña, por lo que verlo puede ser difícil. De hecho, según un artículo publicado en Space.com, en algunos círculos de aficionados se le conoce como “El planeta difícil de alcanzar”. Si te gustan los retos y estás decidido a ver a Mercurio, puedes intentar localizarlo en el horizonte cerca del Sol, justo antes del amanecer. Su brillo es blanco amarillento.
Venus
Le llaman “Lucero de la mañana” debido a que se ve muy brillante a primeras horas del día, y también es el primer punto luminoso que vemos antes del anochecer. No obstante, esta regla no siempre se cumple: se debe tomar en cuenta la posición de la Tierra en su órbita y la de Venus en la suya. Te será muy sencillo encontrarlo, ya que es tan brillante que resalta en el cielo y siempre se ubica muy cerca del Sol.
Marte
Marte está muy cerca de nuestro planeta y posee un brillo rojizo que le hace inmensamente sencillo de identificar. Según un artículo publicado en la web del Canal Trece, solo debes observar a la derecha de la Luna: seguramente encontrarás un punto rojo o naranja que brilla y no centellea.
Saturno
Debido a lo distante que se encuentra de la tierra, Saturno es difícil de identificar. No obstante, no es imposible hallarlo. En un artículo publicado en la web de turismo astronómico astroandalus.com, se explica que es recomendable verlo durante las noches despejadas de verano, y que este se encuentra hacia el sur, justo al lado de la vía láctea, como un pequeño lucero de brillo pálido azulado.
Júpiter
Según un artículo publicado en el portal web de La Nasa, este es el planeta más grande de nuestro sistema solar y el quinto más alejado del astro rey. Es tan enorme que le toma 12 años terrestres orbitar alrededor del Sol. Júpiter tiene 79 lunas conocidas; no obstante, sus 4 más grandes pueden ser vistas durante una noche de observación si se dan las condiciones apropiadas. Es posible ubicarlo después del atardecer, cuando esté oscuro al oeste en el horizonte. Se identifica por su brillo y por los cuatro puntitos brillantes que lo acompañan (sus lunas). ¡Ayúdate con unos prismáticos para que disfrutes del esplendor de este gigante gaseoso!
“Un viaje de autodescubrimiento y aprendizaje”
“Para el astrónomo aficionado, la observación es un viaje de autodescubrimiento y aprendizaje”, cuenta Ángel Molina durante la entrevista realizada por Genial.guru, en la que afirmó que todos los seres humanos debemos observar lo que ocurre en el cosmos para entender cómo funciona el universo en el que vivimos.
Aunque algunos se dedican a observar las estrellas por placer, cada vez son más los aficionados que se encargan de contribuir a las investigaciones científicas. Molina añade que existen menos observatorios que astrónomos aficionados, por lo que, a menudo, la comunidad científica acude a los observadores para que estos les suministren la información recopilada durante sus sesiones de Stargazing.
Muchísimos descubrimientos se han hecho gracias a astrónomos aficionados, pues al haber tantos y estando repartidos por todo el planeta, siempre hay alguien mirando hacia el cielo. ¿Quieres convertirte en un astrónomo aficionado? ¿Conoces otras constelaciones sencillas de encontrar? ¿Has identificado alguna vez algún objeto extraño en el cielo?
Si aún tienes dudas, puedes visitar El Diario del Astrónomo y compartir tus experiencias con otros observadores a través de su comunidad de Facebook. No olvides seguir las cuentas de Genial.guru para continuar disfrutando de contenido tan sorprendente que va más allá de las estrellas.