Deja de cargar tu celular en la cama, ¡esto podría pasar!

Si te has olvidado de tu osito de peluche hace ya mucho tiempo y lo reemplazaste con un smartphone, al menos no lo dejes debajo de la almohada. Puede provocar un incendio, sobre todo si está cargándose. El calor queda atrapado ahí; el celular se calienta más y más, y ya sabes qué sucede cuando hay demasiado calor.

¡Podrías terminar con una cabeza humeante! Además, los teléfonos, las tablets y otros dispositivos liberan ondas y microondas electromagnéticas. En general, el grosor de tu cráneo evitará que lleguen a tu cerebro, pero el riesgo sigue existiendo. Si te preocupan especialmente las microondas y hasta te da miedo hablar por teléfono, usa auriculares. ¡Los altoparlantes, el chat de voz y los mensajes de texto son otras buenas maneras de comunicarse! Las fundas también son una opción: al menos crean una especie de barrera entre tu cuerpo y la emisión electromagnética. Además, los auriculares son muy útiles para las selfis. Puedes tomarte una foto no solo con el botón de volumen, sino también apretando el mismo botón en tus auriculares. ¡Este truco funciona para los usuarios de iPhone y para muchos Android! Recuerda que suele funcionar con auriculares originales.

Otro lugar en el que no deberías cargar el celular es el auto. Y olvídate de hacer algo así en un auto rentado. Su puerto USB es prácticamente público, piensa en tu ciberseguridad. Para que tu carga sea más segura, puedes usar una batería externa o esperar hasta encontrar un enchufe seguro. Y no solo es algo inseguro para tu batería: revisar el teléfono y estar pendiente del USB mientras conduces es una terrible idea.

No cargues el celular en una cafetería, el robo de información también es un problema allí. Es más, la capacidad del puerto USB tampoco es tan poderosa, así que es un combo de desventajas. Usar un enchufe eléctrico y no un puerto USB es una opción bastante segura, a menos que tenga algún desperfecto. Si lo único que te preocupa son esos mensajes que quieres leer, pero que no quieres abrir, prueba este truco. Funciona en WhatsApp y en Telegram. Abre la aplicación y busca la conversación que necesitas leer. Mantenla presionada: ¡verás que asoma una ventana! Podrás leer el mensaje y no se marcará como leído para la otra persona. Pero solo funciona con celulares iPhone.

Si la pantalla de tu teléfono se rompió por accidente, reemplázala por una nueva en cuanto puedas. Tal vez no parezca un problema porque la pantalla táctil aún funciona, pero la grasa y el polvo se meterán por las grietas. Con el tiempo, eso dañará el interior, ¡así que apresúrate! La piel de la cara es sensible, y tu celular es casi siete veces más sucio que un asiento de retrete. Mmm. Imagina frotar tu cara contra un retrete. Es tu mejilla, no la mía. Sí... Así que mejor intenta no apoyar el teléfono en la cara, y siempre limpia la pantalla.

La humedad es probablemente la peor enemiga de tu celular. No lo dejes junto al lavabo mientras te duchas, la humedad se acumulará en su interior. También hay un ejército de gérmenes listos para caer sobre él. Tirar de la cadena esparce bacterias a un radio de 1 m, ¿entendido? Pero, si te gusta revisar las redes sociales en el trono, ¡recuerde que no solo debe desinfectar sus manos, sino también su teléfono, su alteza! Tu iPhone tiene un indicador que muestra si ha estado o no en contacto con agua.

Abre la bandeja de la tarjeta SIM. Debajo del número de serie, verás la calcomanía con el indicador del daño por agua. Es una pequeña línea. Si es blanca, el teléfono nunca ha estado en contacto con agua. Si es roja, significa que el celular fue dañado por el H2O. A veces, la luz azul, el brillo y el tamaño de la letra pueden traerte dolores de cabeza. Ve a Ajustes y activa el filtro de luz azul. Se llama Night Shift en los iPhone, y Eye Saver o Eye Comfort en los Android. Cuando estés en un auto, no dejes tu teléfono en la guantera. Su temperatura depende de la estación, así que ten cuidado con el calor y el frío: ¡pueden arruinar tu batería y reducir la vida útil de tu celular!

¡Ten cuidado al usar el teléfono en la playa! No lo dejes sobre la toalla y bajo el sol. Tal vez no necesite protector solar ni pueda quemarse, pero los rayos abrasadores pueden dañarlo severamente. Las baterías de litio son como los humanos: su rango de temperatura óptimo está entre los 15 y los 35 grados. No cargues tu celular si hace más de 35 °C, podrías dañar la batería. E intenta no cargarlo con la funda puesta, sabemos que los teléfonos no lo disfrutan. El calor queda atrapado dentro y puede arruinar la batería. Y mejor no intentes enfriarlo en el congelador: las baterías de litio tampoco son fanáticas del frío. Si tu enchufe está casi al nivel del suelo y no quieres apoyarlo ahí, usa un champú. Lo único que necesitas es una botella vacía. Corta la tapa y haz un agujero atrás para que pase el cable. ¡Mete el teléfono, conéctalo y cuelga la botella en el enchufe!

Los cargadores de marcas no oficiales no son la mejor elección. No solo dañan tu batería, también existe el riesgo de una explosión. No uses el celular mientras está cargándose. Y aléjate de las cargas USB, ¡son famosas por su lentitud! La multitarea no agotará tu batería, siempre que las aplicaciones de fondo no estén funcionando, a diferencia de algunas que rastrean tu ubicación o de cualquier reproductor de música. Si por alguna razón no quieres cerrar las aplicaciones en segundo plano, no está mal dejarlas abiertas.

Tu teléfono podría funcionar mal no solo por problemas en la batería. Los datos innecesarios pueden ralentizarlo, así que reinícialo una vez a la semana. El exceso de fotos y documentos tampoco hará que funcione del todo bien. Si almacenas la información importante en la nube, también tendrás acceso a ella desde cualquier dispositivo. No hace falta que llegues a cero antes de volver a cargar el celular: este mito es bastante viejo, y no funciona en la mayoría de las baterías modernas. La mejor manera de encarar el asunto es con una descarga parcial; por ejemplo, puedes mantener la carga entre el 40 y el 80 %. Tal vez sea más complicado, pero estabilizará el uso de la batería.

Si quieres dejar de usar el celular por un tiempo, cárgalo hasta el 50 % y apágalo. Se dice que este nivel es el más saludable para una batería de ion de litio. No olvides encenderlo pasados unos meses y recargarlo hasta ese valor. Si no bloqueas el teléfono cuando no lo usas, podría consumir demasiada batería. Los celulares suelen bloquearse automáticamente después de unos 2 minutos, y a veces eso es demasiado. Configurarlo para 1 minuto o incluso 30 segundos puede hacer que tu batería dure más. Usar el tema oscuro también ayudará a ahorrar carga.

Los bolsillos son uno de los peores lugares para llevar el celular, especialmente los bolsillos traseros. Puedes perderlo o sentarte sobre él por accidente y romper la pantalla. Además, los celulares tienen todo un conjunto de señales que podrían no ser buenas para tu salud: datos móviles, Bluetooth, wifi, NFC... todos ellos están en la lista. Por cierto, no uses una red de wifi pública si no quieres exponer tu información personal. Si quieres tener el celular en el bolsillo, al menos activa el modo avión. También existen escudos protectores que pueden ser de utilidad: al dejar el teléfono en ellos, reducirás la radiación casi siete veces si la comparas con tenerlo directamente en el bolsillo.

No olvides liberar la memoria RAM del iPhone de vez en cuando, puede ayudarlo a funcionar mejor y más rápido. Para eso, debes ir a Configuración, Accesibilidad, Tocar, AssistiveTouch y activarlo. Presiona el botón de más, luego el de menos, y por último el de bloqueo. Verás la barra de apagado. Presiona el botón de asistencia y mantén presionado el botón de inicio. ¡La memoria RAM ya se liberó! ¡Si ves la notificación de “Ingrese contraseña” una vez hecho esto, significa que lo hiciste bien! Para liberar la memoria RAM de tu Android, ve a Cuidado del dispositivo y selecciona “Liberar” en la pestaña de Memoria.