Especialistas explican qué factores pueden influir en tus sueños
Los humanos convivimos con cientos de misterios que la ciencia ha investigado para ofrecernos algunas respuestas que, si bien no resuelven el misterio del todo, nos sirven para tener un mayor conocimiento. Diariamente dormimos y, sin embargo, el campo de los sueños sigue siendo un enigma. Gracias a los sueños, o por culpa de ellos, cada noche nos enfrentamos a imágenes que pueden ser celestiales, delirantes, grotescas o, incluso, aterradoras. Y aunque no podemos manejarlas del todo, hay modos de predisponerse a que la experiencia de soñar no sea negativa.
Genial.guru elaboró una lista de factores que, según distintos estudios científicos, pueden influir en nuestros sueños y que sería bueno tener en cuenta para dormir mejor. Al final, incluimos un bono con mitos y curiosidades que, creemos, te serán de ayuda.
1. El campo magnético de nuestro planeta puede influirnos a tener sueños más extraños
Seguramente, es la primera vez que muchos de nuestros lectores reciben noticias sobre esta extraña relación. Sin embargo, los científicos suelen ir más allá que la mayoría de los mortales, y por ese motivo siempre nos sorprenden. Darren Lipnicki, un psicólogo del Centro de Medicina Espacial (Berlín, Alemania) llevó adelante un estudio para el cual registró y analizó sus sueños durante 8 años. Según concluyó en su estudio, había relación entre la actividad geomagnética de la Tierra y sus sueños. Cuando esta era más baja, sus sueños eran más extraños. Cuando era mayor, en cambio, tenía sueños más “normales”.
2. Jugar videojuegos ayuda a controlar los sueños
La doctora Jayne Gackenbach, psicóloga de la Universidad Grant MacEwan, de Canadá, se propuso analizar la relación entre videojuegos y sueños, y publicó un artículo en el cual llegó a la conclusión de que, quienes juegan videojuegos, tienen más facilidad para controlar sus sueños. Es decir: tienen un mayor entrenamiento para manejarse en el ámbito onírico, lo cual les puede permitir tomar decisiones mientras sueñan, como si se tratara de un videojuego.
3. La televisión influye en nuestros sueños
Al parecer, el color de nuestros sueños tiene un responsable: la televisión. Por ejemplo, los jóvenes que han disfrutado siempre de televisor a color recuerdan haber soñado en blanco y negro el 4,4 % de las veces. Para quienes atravesaron el pasaje de TV blanco y negro a TV color, ese porcentaje es mayor: 7,3 %. Sin embargo, en aquellos adultos mayores que crecieron mirando solo TV en blanco y negro, el porcentaje alcanza el 25 %. Esta influencia de la televisión en nuestros sueños fue analizada por la psicóloga Eva Murzyn en un estudio.
4. Los medicamentos contra la hipertensión arterial son los que provocan pesadillas más frecuentemente
Esto afirma Juan Pareja Grande, responsable de la Unidad del Sueño del Hospital Universitario Quirónsalud Madrid (España), en una nota de la BBC. En dicha publicación, también se mencionan, como causantes de las pesadillas los medicamentos contra el párkinson, contra patologías neurodegenerativas o coronarias, los parches para dejar de fumar y el alcohol.
5. Hay alimentos que pueden causar pesadillas
En el año 2015, Tore Nielsen, de la Universidad de Montreal, y Russell A. Powell, de la Universidad Grant MacEwan de Canadá, encuestaron a 396 estudiantes acerca de sus costumbres alimenticias y los sueños que solían tener. Sobre la base de esa encuesta, llegaron a algunas conclusiones que publicaron luego en un estudio que denominaron Dreams of the Rarebit Fiend: food and diet as instigators of bizarre and disturbing dreams. Según este estudio, algunos de los alimentos que suelen provocar pesadillas son los siguientes:
- Productos lácteos: el 43,8 % de los encuestados dijo haber tenido pesadillas después de consumir productos lácteos.
- Queso: el 12,5 % de los estudiantes manifestó haber tenido pesadillas después de cenar comidas que contenían queso.
- Pasta: el porcentaje es el mismo que con el queso. El 12,5 % de los encuestados informó haber sufrido pesadillas luego de cenar pastas.
- Carne: mismo porcentaje (12,5 %) para quienes comieron carne o sus derivados.
- Pizza: en este caso, el porcentaje de encuestados que adjudicó las pesadillas a haber comido pizza es del 9,4 %.
- Comida picante: al igual que con la pizza, el porcentaje de encuestados que relacionó las pesadillas con el consumo de comida picante durante la cena es del 9,4 %.
Este mismo estudio diferenció pesadillas de “sueños bizarros”. Los alimentos que suelen provocar este tipo de sueños son:
- Productos lácteos: el 38,5 de los encuestado dijo haber tenido sueños bizarros después de consumir productos lácteos.
- Azúcar, dulces, caramelos: el 19,2 % de los encuestados adjudicó a estos productos sus sueños bizarros.
- Pizza: el porcentaje que culpó a la pizza de sus sueños bizarros es de 11,5 %.
- La carne y la comida picante tienen el mismo porcentaje de responsabilidad en cuanto a los sueños bizarros: 3,8 %.
Bono: mitos y curiosidades sobre el sueño
- Una creencia popular en muchas culturas afirma que consumir queso provoca pesadillas. Al parecer, la culpa de esto la tiene la tiramina, una monoamina presente, en mayor medida, en los quesos maduros. Sin embargo, no podemos darle valor científico a esa afirmación, ya que otros alimentos poseen las mismas proporciones de tiramina y no son relacionados con las pesadillas.
- Existe un banco de sueños. William Domhoff, psicólogo de la Universidad de California en Santa Cruz, se dedica desde hace muchos años a la investigación de los sueños. Con ese fin, elaboró junto con su colega Adam Schneider un sitio web en donde han recopilado más de 20 000 sueños con el propósito de investigar patrones en común y otros factores que permitan entender mejor los sueños.
- Existe un pequeño grupo de seres humanos catalogados como “soñadores lúcidos”. Son personas que pueden controlar sus sueños. No solo pueden decidir qué caminos tomar mientras sueñan, sino que además pueden decidir qué soñar. Incluso, algunos especialistas sugieren técnicas para poder controlar los sueños.
- ¿Es posible soñar en un idioma que no aprendimos a hablar? Algunas personas recuerdan haber soñado en lenguas que no hablaban, pero ¿es eso posible? La respuesta es que los sueños no tienen un lenguaje específico, y se arman con imágenes, asociaciones, ideas que no suelen estar unidas por un sentido claro. Tomando esto en cuenta, es probable que creamos haber soñado en otro idioma, por ejemplo, alemán, pero nada puede probarnos que ese idioma soñado sea realmente el idioma alemán.
- Seguramente, muchos, al despertarse, suelen experimentar una suerte de torpeza, como si hubiéramos perdido la precisión que exige movernos en el mundo real. Este fenómeno tiene un nombre, “inercia del sueño” y ha sido investigado por la ciencia.
¿Hay alguna comida que sepas que te causa malos sueños? ¿Tienes alguna costumbre que te resulta efectiva para no tener pesadillas? Por favor, cuéntanos en los comentarios.