Los niños asiáticos están entre los más sanos del mundo, y esta es la razón

Después de saber que existen estudios que afirman que los niños japoneses son de los más sanos del mundo, todos deberíamos echarles un vistazo para saber cómo hacen para mantenerse tan saludables e incorporar sus hábitos en nuestras propias rutinas. De hecho, muchas normas culturales desarrolladas en otros países asiáticos han resultado extremadamente útiles a la hora de mantener a los niños sanos, a menudo en formas que nunca hubiéramos imaginado.

Genial.guru te revelará algunos de los hábitos de los niños asiáticos para que puedas darles a tus hijos una vida más saludable y feliz. No te olvides de consultar nuestro bono, el cual demuestra que mantener a los niños a salvo puede ser mucho más divertido de lo que pensábamos.

1. Evitar que los niños lean muy de cerca

En muchas escuelas chinas se instalan barras diseñadas para ayudar a que los ojos de los niños se mantengan saludables. Acercarse demasiado a los libros mientras se lee puede ocasionar problemas en la visión, por lo que, con este sistema, se mantiene a los niños a una distancia saludable. Además, las barras también pueden ayudarlos a desarrollar una buena postura.

2. Realización de ejercicios oculares

En China continental se instruye a los estudiantes de primaria y secundaria para que realicen ejercicios para los ojos con el objetivo de mejorar la circulación sanguínea y relajar los músculos oculares. Estos involucran 6 sesiones, las cuales incluyen frotar diferentes áreas alrededor de los ojos. Generalmente se practican dos veces al día.

3. Realizar pruebas en el exterior

A lo largo de los años, realizar exámenes al aire libre es una costumbre que se ha adoptado en toda China. Esta práctica tiene la intención de evitar que los estudiantes hagan trampa, ya que se pueden ubicar más separados, contrario a lo que pasaría en una sala con un espacio más limitado. Pero existen otros beneficios de esta práctica para la salud, los cuales no se ven a simple vista. No solo les brindan a los estudiantes una exposición ocasional al aire fresco y a la luz solar, sino que esto también puede ayudarlos a aliviar el estrés.

4. Usar mascarillas quirúrgicas

Las personas tienen más probabilidades de enfermarse durante el invierno, debido a que el frío las obliga a permanecer en áreas cerradas, lo que hace que se expongan más fácilmente a los gérmenes de otros sujetos. En Japón es común que aquellos que se sienten enfermos o tienen alergias usen máscaras quirúrgicas, las cuales ayudan a disminuir la cantidad de gérmenes que se encuentran en el aire e ingresan a nuestro organismo. Las ventas de las mascarillas aumentan durante los brotes de gripes o resfriados, entre otros problemas de salud.

5. Clases transmitidas por Internet

Cuando el clima impide ir a clases, algunos maestros chinos se ponen creativos y simplemente transmiten sus lecciones en vivo, desde sus aulas vacías. Los niños aprenden desde la comodidad segura de sus hogares, lo que puede ser especialmente útil cuando las escuelas deciden no cerrar a pesar del mal tiempo. Esto también ayuda a los estudiantes que viven en áreas remotas, los cuales no tendrían acceso a la educación de no ser por esta idea.

6. Servir porciones más pequeñas en lugar de platos completos

El programa de almuerzo escolar japonés se desarrolló para ayudar a los niños hambrientos después de la Segunda Guerra Mundial, pero su contraparte moderna no ha cambiado mucho a los largo de los anos. Estas comidas generalmente no tienen un plato principal, al menos en el sentido occidental. Estas, en cambio, se dividen en partes moderadas, generalmente arroz, verduras, miso y pescado o carne. Además, se toman medidas para que los estudiantes consuman alimentos cultivados localmente.

7. Disfrutar del aire libre

Pasar tiempo al aire libre se considera cada vez más importante en Corea del Sur. Las actividades como el senderismo e ir de campamento se están volviendo cada vez más populares. Incluso se sabe que las personas que están acostumbradas a una forma de vida urbana toman un descanso yendo a acampar de vez en cuando. Estos programas también ponen un gran énfasis en el descanso y la concientización acerca de cuestiones relacionadas con la salud mental.

8. Caminar para moverse de un lado a otro

En muchos países asiáticos, la gente pone un gran énfasis en caminar para desplazarse de un lugar a otro en lugar de usar vehículos o transporte público. En Corea del Sur, los dispositivos que ayudan a las personas a contar la cantidad de pasos que dan a diario se están volviendo cada vez más populares. Además, en muchos países asiáticos se espera que los niños caminen a su escuela local en lugar de tomar el autobús, especialmente en áreas urbanas.

9. Monitorear la dependencia del Internet

En todo el mundo, ver a los niños pegados a los dispositivos electrónicos es cada vez más común. En Corea del Sur, esto no es una rareza, pero se han tomado acciones para combatir la dependencia del Internet en el país. Hay varios campamentos, centros de rehabilitación y tratamientos destinados a ayudar a jóvenes que se han vuelto adictos a la red. El gobierno ha implementado incluso leyes que impiden que los niños menores de 16 años tengan acceso a Internet después de la medianoche.

10. Dar a los niños más responsabilidad

En Japón se espera que los niños hagan muchas actividades por su cuenta, lo cual no sucedería con los chicos en otros países. Se desea que los infantes vayan a la escuela solos, hagan encargos familiares e incluso ayuden a limpiar sus propias aulas en lugar de recurrir a los conserjes. Esto ayuda a los pequeños a desarrollar independencia y responsabilidad, lo que a su vez les permite aprender cómo cuidarse mejor a sí mismos.

Bono: hacer que la hora de la comida sea lo más saludable posible

Muchos países asiáticos encuentran diferentes maneras de hacer que las comidas sean saludables para los niños. En Japón, por ejemplo, las verduras son el platillo principal a la hora de comer, dando menor énfasis a la carne, la grasa, los lácteos o el azúcar. La sopa también es un alimento básico en muchas dietas asiáticas, ya que los chinos usualmente utilizan productos saludables como las bayas de goji, la hierba de limón y el jengibre para darle a ese platillo un sabor especial.

En muchos países asiáticos, incluidos China y Japón, se considera normal que los niños tomen té. Esta bebida no solo es una alternativa más saludable a los refrescos, sino que también puede aportar sorprendentes beneficios para la salud, como ayudar de una manera saludable a la visión del pequeño.

¿Conoces algunas normas extranjeras sobre la crianza de los niños que otros países usen para mejorar la salud de los infantes? ¡Cuéntanos qué opinas sobre todos estos hábitos en los comentarios!