Los psicólogos nombraron 7 mitos sobre la soledad en los que ya es hora de dejar de creer

En nuestro mundo, hay muchos estereotipos sobre la soledad: dicen que es una enfermedad de la sociedad moderna y que elegir vivir solo es como enterrarse vivo. Sin embargo, no todos los científicos comparten esa opinión. El neurólogo John Cacioppo está seguro de que la sensación de soledad es una habilidad adquirida, y el sociólogo Eric Klinenberg dice que el mundo moderno se ha hecho ideal para una vida en soledad.

En Genial.guru te contamos acerca de 7 mitos sobre la soledad en los que hace mucho deberíamos haber dejado de creer.

Mito 1. Nos sentimos solos solo estando lejos de la gente

Hay muchos libros y aún más películas que hablan acerca de lo fácil que es estar solo mientras estás rodeado de gente. La soledad no depende de lo que sucede alrededor de una persona. En primer lugar, esta es solo una condición mental. Entonces, viviendo solo, puedes no estar solo.

El estereotipo dice que el momento más pronunciado de la soledad es la vejez. Sin embargo, según los estudios de los psicólogos europeos, las personas se sienten más solitarias en la adolescencia, cuando hay mucha gente a su alrededor.

Mito 2. En el mundo actual hay una epidemia desenfrenada de soledad

Todos hemos escuchado que en el mundo ahora crece la soledad. Esto es parcialmente cierto: los jóvenes modernos a menudo no se apresuran a armar una familia.

Sin embargo, según un estudio realizado por Cristina Victor de la Universidad de Brunel en Londres, el porcentaje de personas mayores que experimentan soledad crónica sigue siendo el mismo que en los últimos 70 años (del 6 al 13% admitió sentirse solo siempre o la mayor parte su tiempo). Esto significa que la cantidad de personas que se sienten totalmente solas no ha aumentado con el tiempo.

Mito 3. La gente siempre ha sentido la sensación de soledad

El neurólogo John Cacioppo cree que una sensación de soledad es una habilidad adquirida. Se desarrolló para que las personas quieran mantener relaciones con los demás. Y surgió solo porque era mucho más fácil sobrevivir juntos.

Él compara este sentimiento con la sed. Cuando tienes ganas de beber, vas en busca de agua. Cuando estás solo, estás en busca de la compañía de otras personas. Y esto no es más que un mecanismo de supervivencia.

Ahora, cuando la vida no requiere que estemos en un grupo, esta habilidad bien puede convertirse en un rudimento que no se necesitará en el futuro.

Mito 4. Vivir solo significa sufrir

En el mundo moderno, donde tenemos un acceso ilimitado a la información y podemos comunicarnos en línea, cada vez hay más personas que no se sienten solas cuando viven solas durante mucho tiempo.

"Aquellas personas que no tienen un desarrollo completo de su personalidad, que no pueden empezar una relación con el mundo cara a cara, realmente sufren en la soledad. Pierden lazos con otras personas y no encuentran en ellas mismas un interlocutor digno, dice el psicólogo ruso Dmitry Leontiev. Mientras que las personas sobresalientes - maestros espirituales, escritores y artistas, científicos, comandantes - apreciaron la soledad como un recurso importante para la creatividad y el autodesarrollo".

Mito 5. No estamos adaptados para vivir solos

Hace uno o dos siglos, muy posiblemente, tal afirmación habría tenido sentido. Pero ahora, a causa de las revoluciones de género, tecnológica y sexual, esta afirmación se queda como arcaica.

Eric Klinenberg, el autor del libro Vivir solo ("Going Solo"), dice que la santidad de la familia ha estado condicionada durante siglos por los desafíos de la supervivencia. En su obra habla de 4 factores que contribuyeron al hecho de que la vida en soledad se haya vuelto cómoda.

1. Cambió el rol de la mujer: ahora puede trabajar y ganar lo mismo que un hombre y no tiene que pensar que su destino es armar una familia y procrearse.

2. La revolución en los medios de comunicación: el teléfono, la televisión y luego Internet, te permiten no sentirte aislado del mundo.

3. Urbanización masiva: sobrevivir sólo en una ciudad es mucho más fácil que en el campo.

4. Aumento de la esperanza de vida: muchas viudas y viudos de hoy no están apurados por contraer un nuevo matrimonio o mudarse junto con sus hijos y nietos, prefiriendo llevar una vida independiente activa.

Mito 6. Los solteros son inútiles para la sociedad

Las personas que viven solas más a menudo van a bares y museos y visitan eventos culturales. En ciudades donde hay muchas personas solteras, la vida es muy activa. Es gracias a ellos que la cultura urbana se vuelve más diversa: la gente de familia casi siempre se encierra en su celda social. Además, a menudo prevalecen los deseos y las necesidades de sus hijos.

"Hay muchas razones para afirmar que las personas que viven solas están compensando su condición mediante una mayor actividad social que excede la actividad de aquellos que viven en una relación", afirma Klinenberg.

Mito 7. Tememos quedarnos solos en la vejez

Por supuesto, hay tales personas, y son bastantes. Sin embargo, no hay que pensar que esta es una opinión única. Muchas de las personas mayores dicen que no quieren convertirse en una carga y un problema para sus hijos y sus familias. Les será mucho más fácil vivir solos o donde la sociedad corresponda a su edad.

Si en 1900 solo el 10% de las viudas y viudos de la tercera edad en los Estados Unidos vivían solos, en el 2000 ya eran notablemente más de la mitad (el 62%), también Klinenberg señala esto en su libro.

Sin embargo, no todos pueden ser felices viviendo solos. Depende del carácter de cada persona, su temperamento y muchos otros factores. Si una vida en soledad no te resulta cómoda, esto puede llevar a una serie de consecuencias negativas. Por ejemplo, un estudio de la Universidad de Chicago sugiere que el cerebro de las personas que experimentan un sentimiento de soledad responde más fuerte a los estímulos negativos. Sin embargo, todos tenemos el derecho de elegir, sufrir la soledad o disfrutarla.

¿Qué vida te resulta más cómoda? ¿Te ha pasado que la sociedad reprueba tu deseo de vivir solo?