Para criar un niño saludable, los pediatras recomiendan respetar solo unas pocas reglas simples
Con la llegada de un hijo, cada padre se vuelve un poco loco. Y no se trata solo de las noches sin poder dormir. Uno de los principales temores de padres y madres es que algo ande mal con sus hijos. Cada suspiro de un niño se evalúa de "parece normal" a "¿qué fue eso?" a "¡llamen una ambulancia!". Sin embargo, cualquier buen pediatra dirá que la gran mayoría de los niños crecen y se desarrollan de manera absolutamente normal. Y la tarea de los padres es controlarse y hacer los mínimo necesario para criar a una persona sana y feliz.
En Genial.guru consultamos a los pediatras y recopilamos los 5 datos más importantes sobre la salud de los niños que todos los padres deberían saber, sin excepción.
1. No elegir un medicamento por tu cuenta
Bajo ninguna circunstancia puedes dar medicamentos a tu hijo sin una prescripción médica. Incluso si al hijo del vecino que tenía síntomas similares le ayudó, incluso si la abuela "sabe exactamente lo que se necesita". Pocas personas piensan que incluso las simples gotas nasales pueden hacer más daño que bien. Si la situación no es crítica y no requiere una ambulancia, solo puedes usar los productos más seguros antes de una cita con el médico, por ejemplo, solución salina para lavarse la nariz en caso de secreción nasal.
2. Fortalecer la inmunidad
Para que un niño crezca sano y pueda resistir los factores desfavorables que lo rodean, es necesario crear las condiciones más cómodas para el desarrollo de su inmunidad. Para hacer esto necesitas:
- tratar de seguir con lactancia materna al menos hasta los 6 meses;
- crear buenas condiciones en casa (temperatura del aire de no más de 22 °C, humedad de no menos del 50%, ventilación regular incluso en presencia del niño);
- pasear al aire libre todos los días;
- hacer deporte;
- asegurar un buen sueño.
3. Ser paciente
Algunos de los problemas de salud de los niños que enfrentan sus padres pueden desaparecer por sí solos a medida que el niño crece. Por ejemplo, cólico o intolerancia a ciertos alimentos.
4. Vacunar
El movimiento de controversia de las vacunas que está ganando popularidad en los últimos tiempos confunde a muchos padres. Pero el hecho es que, hace unas pocas décadas, miles de niños morían de poliomielitis, tétanos y difteria. Y la tuberculosis sigue siendo un problema grave para muchos países. Ningún médico calificado aconsejaría a su paciente que rechace la vacunación. Y ningún padre, si entiende completamente este problema, expondría a su hijo al peligro innecesario de enfermarse de algo contra lo que sus compañeros están vacunados.
5. Recordar los síntomas
Y, sin embargo, a pesar del cuidado, los niños a veces se enferman. Esto es normal: así es como se forma la inmunidad. Pero cada padre debe conocer los síntomas de las enfermedades más comunes que requieren atención médica inmediata.
- Neumonía: dificultad para respirar, palidez, pérdida del apetito, excitabilidad excesiva o aletargamiento, fiebre (puede aparecer al final).
- Rotavirus: pérdida de apetito, aletargamiento, nerviosismo, fiebre, vómitos y diarrea, también puede ocurrir la secreción nasal, tos, retracción de la fontanela (en niños menores de un año).
- Bronquitis y bronquiolitis: fiebre, dificultad para respirar, tos, debilidad, pérdida de apetito, dolor de cabeza y dolor penetrante en el pecho, aumento de la sudoración, decoloración de la piel a azul o gris.
Pero lo principal es mantener la calma y no entrar en pánico por cualquier motivo.