Un explorador polar ruso comparte sus experiencias de la vida y trabajo a temperaturas muy bajas

La estación antártica “Vostok” (Estación Oriental) fue construida en 1957 y es la única estación sin litoral de Rusia. Los exploradores polares viven y trabajan allí en condiciones duras, parecidas al espacio, casi completamente aislados del mundo en el invierno. Uno de ellos, Zakhar Akulov, nos contó sobre el “Vostok” mucho más de lo que está escrito en “Wikipedia”. En esto fue ayudado por sus colegas: Yuriy, Vitalik y Dima.

En Genial.guru quedamos impresionados por las historias informativas y divertidas sobre “Vostok”, y fue una pena que se acabaran rápidamente. ¿Estás listo para descubrir un mundo completamente diferente?

1. Cómo se comporta el equipo fotográfico

Hice la foto de arriba a —75 °C. La cámara Canon EOS 600D a esta temperatura aguanta unos 40 minutos, un poco más que el fotógrafo. Según nuestra experiencia, a —30 °C no hay ningún problema para hacer sesiones de fotos.

Hay que encender la cámara mientras estás en el interior, ya que expuesta al frío no se prende. Es inútil abrir un trípode: el metal se encoge en el frío y las abrazaderas simplemente no lo sostienen. Después de 10 minutos, la cabeza del trípode se congela completamente y la cámara gira junto con esta parte del trípode.

Es posible acercarse a la cámara solo conteniendo la respiración, ya que la humedad del aire exhalado congela inmediatamente la óptica. Además, los botones de control de la cámara no están diseñados para guantes, a menudo tienes que quitártelos corriendo el riesgo de congelarte los dedos para ajustar el modo de la cámara.

2. Agua potable en la Antártida

Cuando nos quedamos sin reservas de agua, se elige un lugar con nieve más densa en los alrededores de la estación. Dos personas desenrollan y enderezan el cable de extensión para que no se rompa por el frío. Luego cortamos la nieve, por muy extraño que parezca, con una sierra eléctrica. Y poco a poco arrastramos las piezas sueltas utilizando los guantes de nieve especiales. Son de color blanco y no se utilizan para otras labores excepto el aserrado de la nieve.

Por cierto, la nieve en la Antártida continental es completamente diferente a la de Rusia central. No es esponjosa. Incluso la nieve recién caída es poco profunda, espinosa y se convierte muy rápidamente en hielo.

4 personas tardan alrededor de 2-3 horas para hacer este trabajo. Parece que hemos aserrado poca nieve, pero estamos en “Vostok”. La estación se ubica a una altitud de más de 3 km, y la falta de humedad y oxígeno afecta a una persona como en las montañas, cuando estás por encima de 5 km. Por lo tanto, tienes que trabajar de tal manera que no se produzca dificultad para respirar, de lo contrario corres el riesgo de congelar tus pulmones y contraer neumonía.

Al día siguiente, el almacén de nieve se llena con lo que hemos aserrado hoy. Ahora la persona que está de guardia puede llenar tranquilamente nuestra máquina derretidora: se consume aproximadamente la mitad del tanque por día. Y durante un mes necesitamos unos 7,5 m3 de agua, sin tomar en consideración el agua para el baño.

Lo que bebemos es casi agua destilada, incluso por esta razón la estación se mantiene perfectamente limpia; ya que cualquier basura terminará en nuestros tanques de agua. El cuerpo compensa la falta de minerales, extrayéndolos de los huesos. La fuerza ósea disminuye, pueden surgir problemas en los dientes. Además, constantemente tienes una sensación de sed insaciable.

3. Maquinaria antártica

En la estación tenemos 3 vehículos todoterreno “Kharkovchanka -II”: 2 de ellos sirven para el mando y el estado mayor y 1 sirve para el alojamiento de personal. A veces se usan, pero hay que moverlos a la estación “Progress”.

Su interior está diseñado para 3 personas, una gran cantidad de espacio está ocupado por armarios y cajones. Hay una estufa de gas, termo-calderas de aeronaves, un generador diesel autónomo y un baño relativamente cómodo.

La maquinaria nueva de “Vostok” consiste en un solo buldócer y una moto de nieve. En general, la maquinaria principal utilizada actualmente en la mayoría de las estaciones antárticas (las Rusas y las de otros países) son los snowcats “Kasbor”. Gracias a las potentes orugas anchas, pueden trabajar moviéndose a través de la nieve en las duras condiciones invernales.

4. Internet

Internet es lenta por alguna razón solo aquí (la velocidad de descarga promedio es de aproximadamente 6.6 Kbps). En otras estaciones, incluso puedes mantener una conversación por Skype.

5. Edificios antárticos

La única estación belga es “Princesa Isabel”, de la que están orgullosos todos los ecologistas. Se presenta como una referencia a lo que debería ser una estación antártica moderna que se abastece completamente de energías renovables.

Pero ninguno de estos ecologistas te dirá cuántas emisiones dañinas se generaron durante la producción de elementos de tecnologías “amigables con el medio ambiente” y cuánta energía se gastó en la construcción de este milagro tecnológico. El agua en esta estación se recicla hasta 5 veces. Es decir, te lavas la cara por la mañana, luego utilizas la misma agua para lavar la ropa y por la noche te espera la sopa cocinada a base de esta agua.

La estación alemana “Neumayer III” y la inglesa “Halley” se ven hermosas, no lo discuto. Solo que son estaciones en alta mar, es decir, no están montadas en tierra dura o incluso en tierra firme, sino en una pieza de hielo de tamaño increíble que se está deslizando lentamente hacia el mar. “Neumayer” fue reconstruida 3 veces; “Halley”, hasta 6 veces. Por razones obvias, corrían el riesgo de convertirse en un momento dado en estaciones a la deriva.

Como resultado, los ingenieros proporcionaron a estas estaciones la posibilidad de movimiento, de ahí el diseño mega-futurista y los espacios interiores modestos. El personal de invernada de “Halley” vive de dos en dos en unas habitaciones del tamaño de un compartimiento de ferrocarril. Mi habitación en la antigua estación “Vostok” es 6 veces más grande, y no la comparto con nadie.

Estación "Progress", el edificio principal.

Durante siglos, los rusos adquirieron experiencia en la construcción de estructuras para condiciones climáticas severas en las regiones de Kola, Arkhangelsk, Yamalo-Nenets y otras zonas de tundra y taiga. Son muy conscientes del “principio de suficiencia razonable” y construyen sus edificios en la Antártida en total conformidad con este principio. La suficiencia razonable es cuando un baño no se construye utilizando el proyecto de un edificio entero, para el servicio de entrega a domicilio de pizza no se utiliza un camión con un semirremolque, etc.

Por lo tanto, los paneles de emparedado se fijan en el marco de acero, es barato y eficaz. El edificio cuenta con salas de estar, un salón, una sala de radio, una cocina, almacenes de alimentos y laboratorios. La sala de radio es bastante moderna. Independientemente del edificio principal hay un almacén de combustible. Por el costo de un segmento de “Halley” se puede construir un par de estaciones rusas.

Ya llegó la hora de reconstruir la estación “Vostok” (y hay planes para esto), pero en mi cuarto tengo 4 computadoras, 3 microcomputadoras, instrumentos científicos, etc., que funcionan constantemente. ¿No es esto tecnología moderna?

La estación india “Bharathi” cerca de “Progress”. El diseño de la estación por alguna razón me recuerda a un supermercado. “El supermercado” está fabricado con unos ciento cincuenta contenedores marítimos. Es de mucha tecnología, pero creo que aún le falta algo a su diseño.

Aquí está “Kunlun”, la estación continental china. Los chinos están aprendiendo y absorbiendo todo lo mejor: construyen edificios con una estructura de acero, igual que los rusos.

6. Hora

En la Antártida (en el Polo Sur), convergen todos los meridianos, por lo tanto, en teoría, allí deben estar presentes todas las zonas horarias. Pero en la práctica, cuando la duración del día y la noche es de 24 horas, todo depende del país y de la ubicación de la estación. Incluso en las estaciones-vecinas de diferentes países, los relojes marcan las horas diferentes. La estación rusa “Vostok” está en la zona horaria UTC + 06: 00, igual que la región de Omsk, parte de Kazajstán, Kirguistán o Bangladesh.

7. Cómo se adaptan los recién llegados

Durante mi primera estadía en la estación “Vostok”, descargábamos un container. Entonces, intenté levantar un saco de azúcar de 50 kg y entiendí que no podía cargarlo sobre mis frágiles hombros, como lo hacía en casa. Ni siquiera podía moverlo. Todavía no entendía cuál era el problema. Ya sabes, son dos cosas muy diferentes escuchar lo que cuenta la gente y aprender por experiencia propia.

Seguí luchando con este saco -¡al fin y al cabo soy un hombre!-, intenté moverlo para un lado, luego para el otro. Al final pude con él, lo puse en un trineo y lo arrastré hasta el almacén. Después de descargarlo, intenté recuperar la respiración. Tenía la respiración aumentada, la sensación de ardor en los pulmones, la vista se me puso borrosa, respiraba, pero me faltaba el aliento. En este estado me encontró mi jefe. Me echó una bronca y me llevó a la estación para que me recuperara. Menos mal que aquel día hacía “calor”, un poco por debajo de —40 °C, y no tuve tiempo de quemarme ni los bronquios ni los pulmones.

8. Trabajadores estacionales

Hay un presagio polar que dice: con la llegada de los trabajadores estacionales, la invernada está llegando a su fin. También llega a su fin nuestra vida tranquila. Hace poco, disfrutamos de la paz y la tranquilidad, pero ahora tenemos que ir corriendo a la pista de aterrizaje.

La tripulación del “Basler” es canadiense, pero el avión en sí pertenece a los alemanes. Fue construido en 1943, pero tiene dispositivos modernos, igual que los motores y la pintura... vuela de maravilla. Rusia no tiene aviación polar, fue destruida por completo y ahora estamos usando la de otros países, además muy usada.

Descargamos el equipaje de los recién llegados. Los mismos trabajadores estacionales se bajan lentamente y, a juzgar por sus labios azules, sufriendo una hipoxia, van sobre las piernas rígidas a sus camas para acostarse y pasar un rato sin hacer nada. Así es el proceso de adaptación.

9. Sueldo

Los empleados de oficinas en las capitales cobran más, gané mucho más trabajando en el gasoducto.

10. Expedición motorizada (tren): los preparativos

Los preparativos de la expedición a la estación “Progress” se llevan a cabo cerca del aeródromo. Anteriormente, el centro de la logística antártica se encontraba en la estación “Mirniy”, pero desde allí el camino a “Vostok” es extremadamente peligroso debido a las muchas grietas en el hielo. Desde “Progress”, el camino pasa prácticamente por una cúpula monolítica, lo que minimiza el riesgo de caer en una grieta. Dependiendo de la maquinaria, una expedición dura de 2 semanas a 2-3 meses.

Los bienes materiales se trasladan al aeródromo con un helicóptero. Una persona especialmente entrenada en un traje de color llamativo de mayor resistencia al viento se mueve frenéticamente por la pista intentando indicar con banderas el lugar para aterrizar el contenedor, además procurando no caer debajo de él.

Su trabajo en realidad no es fácil. Es necesario verificar a tiempo que el piloto entendió dónde colocar la carga. Luego, abandonar el lugar de descarga, para no ser arrastrado por el flujo de aire y, acurrucado como una bola, regresar al contenedor para desengancharlo y dar la orden de despegar. Las últimas acciones se realizan casi a ciegas debido a una nube de nieve y polvo. Una vez fui arrastrado por el flujo de aire de un helicóptero que despegaba, y ahora soy escéptico acerca de las escenas cinematográficas en las que los personajes hablan bajo las aspas del helicóptero.

Un poco más tarde el contenedor se descarga y los productos congelados se colocan en un hoyo excavado en la nieve. En la superficie del glaciar, por extraño que parezca, la temperatura está por encima de cero, por lo que los alimentos congelados en el momento del inicio de la expedición pueden echarse a perder. Lo más importante es recordar el lugar del hoyo.

Bueno, no se puede imaginar la vida en la estación costera sin págalos grandes. Estas aves pesan como un buen ganso, y están armadas con todo tipo de espigas y anzuelos. Son insolentes y audaces.

Cargábamos productos del hoyo en el trineo. Acabo de comenzar a colocar la segunda caja, y en la primera ya apareció un págalo tratando de picar el pollo. El pollo estaba congelado, por lo que el ave no pudo con él, pero sí que era persistente. Tuvimos que espantarlo, y tapar los alimentos con tableros de contrachapado. En cuanto el cocinero abre la caja con salchichas, enseguida aparecen los págalos.

Los objetos y los productos que no se congelan se cargan en un remolque-almacén con calefacción.

Los patines de los remolques (y trineos) son pesados. Su superficie inferior está cubierta con algún tipo de plástico para que no se peguen a la nieve. Sin embargo, se quedan congelados, por lo que los conductores siempre advierten sobre el comienzo de la marcha por la radio. El personal dentro de los remolques residenciales agarra lo que sea para sujetarse, y la expedición comienza.

El espacio interior del remolque residencial no impresionará a aquellos que tuvieron experiencia de viajar en segunda clase de los ferrocarriles rusos. En la entrada de cada remolque residencial hay un generador diésel. Está equipado con un lavabo, urinario y baño portátil.

11. Expedición motorizada. Llegada a “Vostok”

Ya llegamos. El personal libre de guardia y trabajos espera con impaciencia. En la caja hay sándwiches congelados, y Dima tiene preparada una botella de cava que estaba calentando con el calor de su cuerpo.

Las máquinas se aparcan en paralelo. ¡Y empiezan los abrazos! Por fin, después de pasar tanto tiempo rodeados de exploradores polares, vemos rostros humanos.

La expedición trajo combustible para motores diesel, queroseno para aeronaves, algunos bienes materiales, saludos y paquetes de “Progrés” y “Zhongshan” china, así como nuevos probióticos para nuestra inmunidad debilitada.

Además, ahora tenemos cebollas frescas y manzanas. Un poco más tarde, servimos las cebollas “de postre” y distribuimos las manzanas entre todos: 2 para cada uno. Ahora lo principal es no guardarlas hasta el último momento. Si no, pasará lo mismo que pasó con mi última naranja: la tenía guardada para más tarde, hasta que descubrí que se secó y endureció.

Las ceremonias son cortas: un poquito de cava y la estación, junto con la expedición, se sumerge en un pánico laboral organizado. Tenemos poco tiempo y hay mucho trabajo: la expedición va a estar ocupada las 24 horas. Y después del trabajo, vamos al sauna tan esperado, lo calentamos desde ayer.

12. Los extraterrestres y la caza de meteoritos

Es bien sabido que la Antártida está llena de alienígenas, сthulhus y otras criaturas fantásticas. Están por todos lados. Ahora les contaré sobre uno de esos encuentros.

Vitalik, nuestro meteorólogo, como de costumbre, fue a revisar sus instrumentos. Era una noche polar estelar, —65 °C, es decir, como de costumbre. Vitalik quitó la nieve de la cabina psicrométrica, evaluó la nubosidad, midió las precipitaciones diarias y estaba a punto de regresar cuando vio la luz de una linterna en el otro lado del campo de las antenas.

Por curiosidad, Vitalk utilizó su radio para preguntar quién era, todos los que abandonan la base deben llevarla consigo haciendo una entrada en el diario, pero no le contestaron. El meteorólogo se quedó esperando: arregló todos sus asuntos de aquel día, solo le quedaba enviar información al instituto.

La criatura humanoide se desplazaba lentamente, moviendo sus extremidades con notable dificultad. Obviamente, las condiciones de la Antártida eran muy diferentes del planeta de origen de la criatura, y tuvo que hacer un gran esfuerzo para seguir. Vitalik alumbró al extraterrestre con su linterna. La criatura se detuvo, produjo varios sonidos extraños y dirigió la luz de su linterna sobre el meteorólogo.

Con un esfuerzo increíble, Vitalik tomó el control y la pala en sus manos. El humanoide se acercó, haciendo sonidos que se parecían cada vez más al habla humana. Y solo cuando estaba al alcance de la pala, Vitalik logró entender lo que era.

Vitalik soltó tantas palabrotas en la radio que se habría podido encender un cigarro con su antena. Sin embargo, a Yuriy, quien regresaba luciendo un traje “limpio” con su cosecha de meteoritos (para no infectar a sus trofeos con polvo normal), no le dolió en absoluto: se le olvidó encender su radio.

El meteorólogo siguió con la pala en manos hasta que regresó a la estación. Por si acaso.

13. Prendas de vestir de exploradores polares

Con la ayuda de Yuriy, hacemos las maletas para viajar a la Antártida y veremos cómo están equipados los exploradores polares rusos.

Yuriy tiene puesta la llamada ropa interior térmica. No me gusta, así que llevo ropa interior de algodón.

Seguimos vistiendo a Yuriy. Traje polar, pantalón de entretiempo y chaqueta. Es posible que la chaqueta de entretiempo recibiera su nombre erróneamente, ya que es bastante cómoda a —60 °C, si, por supuesto, no te la pones sobre el cuerpo desnudo. Yuri tapa su cara con el cuello aislante de vellón. Tiene un pasamontañas especial, pero suele ignorarlo.

Así es como Yuriy se ve de cuerpo entero. Debajo de la capucha, un gorro de piel artificial. Fíjate en la ranura para los ojos entre el gorro y el elemento que cubre la parte inferior de la cara: cuanto más estrecha sea, más caliente te sentirás. De esta manera evitas que se congele la mucosa nasal, convirtiéndose en hielo y no se congelen los ojos, no estoy hablando ni de las mejillas, ni de la frente, ni de los pómulos, sino de los ojos.

Los lentes pueden ayudar, pero el vidrio se congela por respiración lo suficientemente pronto, y después de 5 a 10 minutos el explorador polar ve solo un poco más que nada. No se pueden usar hasta que el sol esté bajo. Pero cuando se eleva, los lentes se convierten en una necesidad.

Nunca me puse el gorro que me entregaron ya que no tengo esta necesidad. Por encima de la máscara me pongo un gorro y una bufanda que me regaló una amable abuela alemana de Bremerhaven. En esta ciudad portuaria de Alemania hay un grupo de abuelas y no tan abuelas que tejen gorros y bufandas y los llevan a la misión marítima para distribuirlos entre los marineros. Me quedé con uno de estos conjuntos.

El conjunto de invierno es ligero e increíblemente cálido. Si lo tienes puesto, al parecer, puedes dormir en la calle. En la etiqueta pone: “Hecho en Rusia”, los modelos anteriores (de entretiempo e invierno) fueron fabricados en Vietnam.

Calzado:

1. Yuriy calza las botas de fieltro, y en la foto puedes ver las mías. No hay alternativa a las botas de fieltro en nuestras condiciones. Son cálidas, duraderas y se secan rápidamente (por la escasa humedad, todo se seca rápidamente). Periódicamente hay que restaurar la suela ya que se desgasta. Acabo de encontrar otro par, unas tallas más grande, e hice chanclas.
2. Además de las botas de fieltro nos entregan las botas altas. Son adecuadas en algún lugar del centro de Rusia para la pesca de invierno o para trabajar en el campo petrolífero. Las llevamos solo durante el verano antártico, cuando la temperatura se sube a —25 °C. Debido a que a —30 ° C tus pies comienzan a sentirse fríos, a —40 ° C este milagro de la industria ligera se convierte en patines, y a —60 ° C simplemente se parten. Una vez nuestro meteorólogo decidió ir a comprobar sus instrumentos luciendo estas botas; regresó descalzo.

3. Las mukluks. Me gustan mucho, me las pondría todo el tiempo. Pero la suela está hecha de goma que se rompe por el frío, y la caña es suave, por lo que un explorador polar tiene que agacharse para ajustarla. Bueno, no pasa nada si tienes que hacerlo un par de veces al día, ¡pero durante el día necesito salir cada hora a revisar mis dispositivos! Precisamente por eso prefiero las botas de fieltro, pongo mis pies dentro y ya está.

El escudo en el pecho de la chaqueta se borda en el proceso de producción, por lo que sus costuras no dañan el forro. Entonces, si encuentras a una persona que luce una chaqueta con este escudo, deberías saber: es muy probable que la chaqueta venga desde ALLÍ. Es decir, desde aquí, desde la Antártida.

¿Por qué los exploradores polares rusos no usan su uniforme cuando regresan al continente? Porque todas las prendas entregadas durante la expedición deben devolverse al final de la misma. Solo puedes quedarte una chaqueta, reembolsando su valor, por supuesto. Pero las chaquetas son hermosas, son geniales para usar en casa. Bueno, son un gran recuerdo. Un explorador con experiencia tiene muchos recuerdos de este tipo. En cada estación, donde planea regresar, hay una bolsa firmada con sus prendas, o incluso más de una.

14. ¿Cómo encontrar empleo en la Antártida?

Si quieres participar en una expedición altamente especializada, ponte en contacto con algún instituto de investigación o intenta encontrar empleo en el Instituto de Investigación del Ártico y la Antártida, elabora un programa y consigue una subvención. Y solo después podrás formar parte de la expedición antártica rusa. Por cierto, actualmente tienen las vacantes abiertas para el puesto de médico, administrador de sistemas y especialista en información satelital, pero son para hombres. Por regla general, las mujeres no se contratan para pasar el invierno allí, la excepción es la expedición alemana. El resto de las expediciones consideran que la Antártida no es para el cuerpo femenino.

Además, existen viajes “económicos” a la Antártida y mucho más caros para el Polo Norte en el rompehielos nuclear “50 años de Victoria”.

Después de escribir este artículo, el autor de Genial.guru sueña con visitar al menos uno de los polos de la Tierra. ¿Qué te impresionó más? Comparte con nosotros en los comentarios.