100 Cosas innecesarias que te impiden comenzar una nueva vida

Consejos
hace 5 años

Apostamos a que en cualquier casa hay un montón de cosas innecesarias que no se usan, pero se conservan cuidadosamente durante años. Además, muchos ni siquiera se dan cuenta de que se trata de basura que debimos haber desechado desde hace tiempo.

Nuestro departamento se convierte en un depósito de chatarra que necesita limpieza casi todos los días, lo que a su vez influye en nuestro estado de ánimo. Rodeados de desorden, no tenemos ganas de hacer nada, nos sumergimos en pensamientos negativos e incluso nos enfermamos. ¿Hay alguna forma de salir de esta situación?

En Genial.guru hemos compilado una lista de 100 cosas inútiles que deben desecharse de inmediato para despertar tu vitalidad y cambiar tu vida.

1. Invitaciones y tarjetas postales viejas. Es poco probable que tengas ganas de leerlas todas las semanas y vuelvas a guardarlas cuidadosamente. Por desgracia, esto es solo un papel de desecho innecesario.

2. Bolígrafos gastados. Créeme, no va a acontecer un milagro: no volverán a escribir. ¡Deshazte de ellos!

3. Vestidos de noche viejos. Es poco probable que vuelvas a usar un vestido de gala después de 10 años. Véndelo o regálaselo a alguien.

4. Papeles innecesarios. Nunca volverás a leer el contrato de alquiler de un apartamento que rentaste hace 5 años, ni tampoco necesitarás la copia de una solicitud de vacaciones. Todo lo que no te sirve para nada — ¡a la basura!

5. Cosméticos viejos o casi agotados. Cualquier cosmético tiene su fecha de caducidad. Y si no lo has utilizado durante mucho tiempo, ¿por qué sigue ocupando espacio en tu estante?

6. Facturas innecesarias. Deshazte de ellas sin remordimientos.

7. Teléfono fijo. Si no puedes recordar cuándo lo usaste por última vez, ¿para qué va a seguir acumulando polvo?

8. Cables y cargadores misteriosos. En cualquier casa se pueden encontrar un montón de cables y cargadores de los dispositivos perdidos hace mucho tiempo.

9. Tarjetas de visita. A menudo almacenamos tarjetas de visita de personas y organizaciones que nunca vamos a necesitar.

10. Sostenes desgastados. Se verán mucho mejor en un contenedor de basura. Son feos y no cumplen con su propósito.

11. Juguetes de peluche viejos. Por desgracia, con el tiempo se convirtieron en recolectores de polvo y no hay nadie para jugar con ellos. Si los juguetes están en buenas condiciones, puedes regalarlos a alguien, si no, a la basura.

12. Regalos que no usas. Regálaselos a otra persona, o deséchalos sin ningún remordimiento de conciencia.

13. Ropa de cama desgastada. La ropa de cama desteñida o la ropa con agujeros destruye el ánimo y se ve completamente antiestética.

14. Calcetines agujereados. Si no quieres remendarlos, entonces ¡bótalos a la basura!

15. Música innecesaria en el teléfono o computadora. Déjala en el pasado que nunca volverá.

16. Botellas con los restos de productos de limpieza. Si por alguna razón no puedes gastar los restos de un producto de limpieza, no pierdas el tiempo y simplemente deséchalo.

17. Las prendas que te están pequeñas o las que no te gustan pueden ser donadas o enviadas a la caridad (a un orfanato, a un centro de acogida, etc.).

18. Champús, lociones, geles, cremas casi agotados. ¿Por qué conservas estos “tesoros”?

19. Recuerdos de viajes. Como regla general, complacen la vista solo la primera vez, y luego simplemente acumulan polvo. Regálaselos a alguien o bótalos a la basura.

20. Esmalte de uñas seco. Incluso si se diluye, no será lo mismo.

21. Los tester de cosméticos y perfume. Si el tester es nuevo y te gusta su contenido, úsalo. De lo contrario, ¡bótalo a la basura!

22. Prendas estropeadas. Desechar prendas favoritas que no se pueden reparar es doloroso, sin embargo, no hay otra solución.

23. Calzado viejo. Si es posible darle una segunda vida a estos zapatos, llévalos al zapatero; si no, ¡que descansen en la basura!

24. Bolsos y carteras desteñidos. Puedes donarlos a la caridad. Si están muy desgastados, entonces, habrá que reciclarlos.

25. Cortes de tejido innecesario. Préstalos a las mujeres que pueden convertirlos en una obra maestra o simplemente deséchalos.

26. Medicamentos vencidos. No puedes usarlos de todos modos, y además, pueden ser peligrosos si los confundes accidentalmente con otros medicamentos.

27. Alimentos caducados. Mucha gente suele almacenar comida hasta que se echa a perder. Pero no es por nada que en los envases está indicada la fecha de caducidad.

28. Especias y cereales viejos. Las especias tienen su fecha de vencimiento y los cereales pueden convertirse en el habitad de los “invitados” no deseados. Por lo tanto, directamente a la basura.

29. Utensilios de cocina que no uses. Deshazte de ellos o regálaselos a aquellos que realmente los necesitan.

30. Floreros innecesarios. A menos que te sirvan como decoración de interior, en caso contrario, véndelos o bótalos a la basura.

31. Perchas rotas o sobrantes. Créeme, ocupan mucho más espacio en tu armario de lo que merecen.

32. Decoraciones navideñas viejas. Si se trata de los adornos de vidrio para el árbol de Navidad agrietados o serpentinas enredadas, entonces su lugar está en un vertedero Si estos adornos de Navidad simplemente no te complacen, dónalos a un orfanato.

33. Tazas viejas. Las que se han agrietado deben desecharse. Aquellas que aún están en buen estado, llévalas al trabajo.

34. Dispositivos electrónicos y electrodomésticos dañados. Puedes regalarlos a alguien para ser despiezados o entregar en las tiendas de electrodomésticos para su reciclado.

35. Folletos y mapas de viaje. Estas cosas se hacen completamente inútiles tan pronto como regresas de tu viaje.

36. Folletos, cupones de descuento y cheques de ofertas vencidos. Ya no te sirven para obtener un descuento, y por lo tanto, ¡a la basura!

37. Periódicos y revistas. Envía estos montones coloridos y blancos y negros al reciclaje. Conclusión: menos polvo, más beneficios para la naturaleza.

38. Instrucciones de montaje de muebles. Lo más probable es que montes los muebles solo una vez. Pero, si de repente necesitas instrucciones, puedes encontrarlas fácilmente en Internet.

39. Agendas viejas. Es poco probable que contengan información importante, pero pueden ser recicladas.

40. Cajas de electrodomésticos. Muy a menudo, estas cosas sirven solo como recolectores de polvo inútiles. Llévalos al vertedero e inmediatamente tendrás mucho espacio libre.

41. Macetas viejas. Si no eres un cultivador apasionado, es poco probable que te sean útiles.

42. Accesorios para el smartphone. ¿La funda se gastó y compraste una nueva hace mucho tiempo? Entonces, ¿para qué necesitas la vieja?

43. CDs y DVDs viejos. Todas las películas y música que ya no te interesan solo ocupan espacio. Llévalos a reciclar.

44. Lazos y cintas de envoltura de regalos. Lo más probable es que ya hayan perdido su aspecto anterior y ahora solo sirven para acumular polvo.

45. Pilas o baterías usadas. En lugar de guardarlas, llévalas a puntos de reciclaje especiales.

46. ​​Juegos de mesa con detalles faltantes. La mayoría de las veces, ya no se pueden usar, y simplemente ocupan espacio adicional en el estante o en el armario.

47. Accesorios para el pelo innecesarios. ¿Goma estirada y horquillas estropeadas? Deshazte de ellas sin piedad.

48. Libros de texto y cuadernos. Todo lo que queda desde los tiempos de la escuela y la universidad se regala a quien lo necesita o se desecha.

49. Calendarios de años anteriores. El calendario expira el 31 de diciembre, después de esta fecha se convierte en basura innecesaria.

50. Botones de repuesto. Si tienes 10 botones diferentes y no se ajustan a ninguna de tus prendas, entonces tiene sentido deshacerse de ellos.

51. Bisutería vieja. Hay que deshacerse de adornos innecesarios, o llevárselos al joyero que sabrá rediseñarlos.

52. Frascos de perfume hermosos. Nos recuerdan a los perfumes que se han agotado hace mucho tiempo, además acumulan polvo. Sería mejor llevarlos a reciclar.

53. Trastos de los abuelos. Estas cosas pueden ser valiosas por el hecho de que, al mirarlas, recuerdas a tus familiares, pero en realidad son objetos absolutamente innecesarios.

54. Paraguas estropeado. ¿Realmente vas a arreglarlo? Si no, entonces fuera de la vista.

55. Cajitas de fósforos vacíos. ¿Para qué los necesitas? ¿Para guardar sal?

56. Cubiertos de diferentes conjuntos. A menos que te guste usar platos diferentes, regálalos a alguien quien más los necesita. O llévalos al contenedor de basura más cercano.

57. Baratijas. ¿Cuántas figuritas innecesarias, imanes y adornos sin sentido acumulan polvo en tus estantes? ¡Deshazte de ellos!

58. Toallas gastadas y agujereadas. Obviamente, es bastante desagradable secarse con ellas, y mucho menos ofrecerles a los invitados.

59. Cualquier papelería antigua y lápices. Ya no te sirven para nada, pero ocupan un montón de espacio.

60. Contenedores de comida viejos. Deshazte de ellos si ya no sirven para almacenar alimentos.

61. Platos desechables. ¿Por qué ocupan tanto espacio si utilizas cubiertos ordinarios?

62. Utensilios de cocina antiadherentes rayados. Es una pena desecharlos, pero ya no se pueden usar.

63. Guirnaldas fundidas. Es más fácil comprar unas nuevas que reparar las que te han servido durante varios años. Deshazte de ellas.

64. Lentes que no utilizas. ¿Tienes lentes de sol rayados o rajados o no te quedaron bien los que compraste en la farmacia? ¡Qué reciban su merecido “descanso”!

65. Latas y frascos. Si no los usas, entrégaselos a quienes los necesiten o deséchalos.

66. Almohadas viejas. Lo más probable es que ya sean incómodas y completamente llenas de polvo. Llévalas a un vertedero.

67. Las esponjas para el cuerpo o para lavar los platos deben cambiarse con bastante frecuencia para no convertirse en un caldo de cultivo para bacterias.

68. Las alfombras de baño desgastadas deben desecharse. Compra una hermosa alfombra nueva que será agradable de pisar.

69. Concentrado para mascotas que no se comieron. Con el tiempo, se llena de insectos. Es mejor que lo botes.

70. Medias y pantimedias con carreras. Si ya no es posible arreglarlas, entonces ¿para qué las guardas en tu guardarropa? ¿De recuerdo?

71. Libros que no vas a leer o releer. Es mejor que los regales a la biblioteca. Definitivamente, allí serán útiles.

72. Monedas sueltas. Recoge todas las monedas esparcidas por la casa y envíalas a... la alcancía.

73. Tornillos y tuercas misteriosos. A veces estas cosas simplemente aparecen por arte de magia en tu hogar. Por lo tanto, envíalos a la basura y no a las cajas para guardar los trastos.

74. Flores secas. Si no haces herbarios, entonces estas plantas simplemente acumulan polvo. Deberías ser más decidido y separarte de ellas.

75. Marcos de fotos agrietados. Son simplemente feos. Entrega los cristales en el punto de reciclaje, el resto, a la basura.

76. Artículos para el hogar que han caducado hace ya mucho tiempo. Cosas como un cepillo de dientes viejo o una jabonera rota no te servirán de nada.

77. Juguetes para mascotas que ya no les interesan. Si a tu mascota no le gusta el juguete, entonces no tienes por qué guardarlo.

78. Materiales para las manualidades. Si no has practicado el bordado o el macramé durante mucho tiempo, regala a alguien estos kits o simplemente deséchalos.

79. Bufandas que ya no usas. Regala o bota a la basura.

80. Aretes sin par. ¿Para qué guardas los aretes que no usas?

81. Contenido del buzón. Todo tipo de folletos publicitarios y periódicos innecesarios son excelentes para el reciclaje.

82. Artículos deportivos innecesarios. ¿Practicabas el boxeo hace 5 años y los guantes aún siguen acumulando polvo en el estante? Si no quieres botarlos a la basura, entonces regálaselos a alguien.

83. Entradas antiguas. Nadie te las va a pedir.

84. Cepillo de pelo estropeado. No seas tacaño y compra un nuevo accesorio para tu cabello.

85. Jeans rasgados. Si no eres fanático de la moda juvenil, deséchalos.

86. Software antiguo. Debes liberar el espacio no solo en el hogar, sino también en los dispositivos electrónicos.

87. Bicicleta averiada. Si la bicicleta no se puede reparar, pero ocupa todo tu balcón, pregúntate si la necesitas.

88. Envoltorios hermosos. A veces parecen tan hermosos que te da pena botarlos a la basura, pero en realidad es poco probable que vayas a necesitar esta “belleza”.

89. Envases de golosinas. Deséchalos sin duda alguna, incluso si tienen la forma de un corazón o un unicornio.

90. Dibujos infantiles. El valor de tales obras siempre se determina por su cantidad: cuanto menos tienes, más las valoras. Guarda algunos de los mejores.

91. Dientes caídos. A veces las personas guardan sus dientes de leche toda la vida. ¿Para qué?

92. Velas perfumadas. ¿Las compraste porque te gustó la forma y el color, pero no te gusta el olor? Regálaselas a alguien o deshazte de ellas para siempre.

93. Botellas de jugos o refrescos. Créeme, es poco probable que luego las llenes de agua potable y vayas de viaje con ellas.

94. Ropa infantil innecesaria. Podría ser útil para cualquier niño en un orfanato, pero en vez de ello acumula polvo en tu armario.

95. Trajes de baño viejos. Ya están desteñidos, debes admitir que nunca volverás a lucirlos en la playa.

96. Sitios innecesarios entre los marcadores del navegador. Elimina o cancela la suscripción a los sitios y grupos de los que estás cansado para que no te molesten y no ocupen tu espacio informativo.

97. Fotos duplicadas. Si ya tienes una foto en formato digital, no hay que imprimirla o guardar todas las que tienes. Elige solo las que realmente te gustan.

98. Joyas de oro y plata dañadas. Tales joyas son un peso muerto. Hay que arreglarlas, o venderlas en la casa de empeños.

99. Calzado incómodo. ¿Compraste un nuevo par de zapatos, pero enseguida te diste cuenta de que te aprietan y no puedes caminar con ellos? Regálaselos a alguien a quien le queden bien, o deséchalos.

100. Absolutamente todo lo que no te gusta. Recuerda, debes sentirte cómodo en tu hogar y, si no te gusta algo en tu entorno, te entristece o tal vez te causa malos recuerdos, debes deshacerte de ello sin pesares ni remordimientos.

¿También guardas esas cosas? ¿Por qué crees que mucha gente tiene esta pasión por acumular artículos u objetos innecesarios?

Comentarios

Recibir notificaciones

Pues yo guardo ropa que ahora no me vale por si adelgazo.

1
-
Responder

Lecturas relacionadas