Por qué y cómo elegir la cama adecuada para tu perro (incluso si él prefiere dormir en el suelo)

Para quienes amamos a nuestras mascotas, su salud, comodidad y descanso son muy importantes. Ellas son parte de nuestra familia y las adoramos por igual. Sin embargo, es posible que a la hora de comprar accesorios para su cuidado, no reparemos mucho en los productos que nos ofrecen en las tiendas. Algunas veces solemos comprar “el más bonito”, “el más económico” o “el que nos gustó”.

Sin embargo, en Genial.guru queremos darte las herramientas para saber escoger la próxima cama de tu perro, para que tu siguiente compra no solamente sea satisfactoria, sino también segura y una buena inversión para tu bolsillo.

1. Qué necesitan los perros

Quizá lo común sería pensar que cualquier cama para perro es mejor que únicamente el suelo. Esto tiene un poco de cierto, pues el frío del piso puede causar algunas lesiones en tu mascota, torsiones gástricas e incluso osteoporosis.

Para evitar una hospitalización o cirugía con el tiempo, lo mejor es darle confort y bienestar al perro con una cama adecuada, ubicada en un sitio íntimo y cálido, para asegurar que duerma sus 12 o 14 horas.

Tener una cama les da muchos beneficios a nuestras mascotas, como la sensación de protección y delimitación de espacio. Incluso les aporta tranquilidad en esos días en los que se sienten muy cansadas de ser tan adorables.

2. Selecciona el tamaño

Si el perro es aún cachorro, cualquier cama le quedará gigante, pero debemos pensar en el tamaño que alcanzará cuando sea adulto. Para ello es recomendable medir a nuestra mascota cuando esté durmiendo, así podremos constatar que ese es su tamaño real en la cama.

Recuerda que el tronco, cabeza y extremidades deben quedar dentro de la cama, no fuera de ella. Aun cuando duerma en diferentes posturas, siempre hay que tener en cuenta que su cuerpo completo y estirado es el tamaño real.

3. Ten cuidado con los materiales

Una buena cama para perro no solamente tiene materiales resistentes por fuera, sino también por dentro. Los canes suelen ser muy activos, pueden arañar o “amoldar” su cama en cualquier momento, sobre todo cuando son cachorros.

Para ello, los expertos recomiendan que elijas materiales transpirables, que tengan válvulas internas de aireación para mantener el interior de la cama fresco, y que sean fáciles de lavar o impermeables, para facilitar la limpieza y desinfección de la cama.

4. Considera las necesidades especiales de tu can

Además de procurarle la máxima comodidad, también debes observar qué necesidades necesita cubrir la cama para tu perro. Por ejemplo, si adoptas un cachorro, necesitarás una muy diferente a si optas por un adulto.

De la misma manera, debes poner atención a si tu perro tiene problemas de salud, como dolor en las articulaciones, desviación de cadera o molestias en la espalda. Si esto es así, entonces tendrás que conseguir una cama ortopédica.

5. Usa un kennel

Si tu problema es que no importa cuántas camas caras, especiales o suaves compres, tu perro muerde, destroza o ignora su lugar para dormir, entonces podrías utilizar una transportadora (kennel). Este método es bastante exitoso cuando enseñamos a los cachorros a controlar las ganas de hacer sus necesidades y esperar a ir en el lugar adecuado.

No se trata de castigarlo, sino de convertirlo en un espacio seguro. Puedes comenzar dándole sus comidas diarias dentro del kennel para que lo asocie con un lugar positivo que trae buenas consecuencias cuando está en él.

Deja el kennel dentro de casa en un lugar cómodo para todos, especialmente para tu mascota. La idea es que sea su sitio de recogimiento. Puedes colocar un cojín suave, de acuerdo con sus necesidades, en su interior para que se sienta más cómoda. Por supuesto, asegúrate también de que el kennel cumpla con el tamaño deseado.

¿Qué otras consideraciones tomas en cuenta a la hora de consentir a tu mascota?