10 Cosas a evitar si no queremos tener a un bully como hijo en el futuro

A veces, sin saberlo, estamos criando a un futuro bully. Y es que la manera en la que educamos a nuestros hijos puede tener un impacto positivo, pero también podría pasar todo lo contrario. Para que no te sorprenda la devastadora noticia de que tu hijo trata mal a otros niños, lo mejor es evitar ciertas cosas que pueden ser detonadores para este tipo de comportamiento.

1. Apoyar y participar en sus intereses

Es importante que tus hijos sepan que estás ahí para ellos. Trata de hacer tiempo para estar en familia, compartir momentos, que vean que quieres conocerlos y ser una parte activa en sus intereses. Tal vez haya momentos en los que el trabajo y demás te impidan estar al cien por ciento, pero siempre podrás hacer un espacio para hablar con ellos o incluso darles un beso o abrazo que muestren apoyo.

2. Evitar decir frases que generan odio

Tal vez, sin saberlo, estamos actuando de manera agresiva con nuestros hijos. Algunos padres podrían estar insultando a sus hijos para sacar sus propias frustraciones o levantarse un poco el ego ellos mismos, llamándolos flojos o comentando sobre su apariencia física e, incluso, haciendo comparaciones negativas. Esto hace que el niño dude de su valor y lo marca de por vida. También podría ocasionar que imite esas acciones con otros.

3. Enseñar sobre otras culturas

Hay muchas ventajas al viajar, una de ellas es que desarrollamos más empatía al visitar y conocer personas diferentes. Los niños que viajan pueden aprender herramientas para desarrollar relaciones significativas y ver las similitudes que tenemos todos como personas.

No es necesario tomar un avión o auto para viajar, los niños pueden aprender de otras culturas con libros y películas. Podrán ver distintos idiomas, tradiciones y apariencias físicas. Es de gran ayuda educarlos sobre las diferencias que hay, enseñarles que está bien ser distinto, en vez de pasar el tema y no hablarlo para nada.

4. Felicitarlos cuando ayuden a los demás

Una educación basada en comentarios positivos puede ser más poderosa que una disciplina basada en la negatividad. Si ves que tu hijo, sin importar su edad, hace alguna buena acción y es gentil con otras personas, no te quedes callado. Felicítalo, hazle saber lo bien que estuvo. Este detalle podrá parecer insignificante, pero en realidad es muy valioso.

5. Conocer a los amigos de tu hijo

Una cosa muy importante para prevenir que tus hijos sean bullies es conocer a sus amigos. Incluso, muchos opinan que este paso es una prioridad. No solo por el dicho “dime con quién te juntas y te diré cómo eres”, que indica que podemos ver si hay alguna mala influencia entre sus amigos; también porque muestra que estamos involucrados en la vida de los niños, que es fundamental para prevenir el bullying.

6. No ignorar la agresión entre hermanos

De vez en cuando, los hermanos pelean, es completamente normal. Pero cuando la pelea pasa a un comportamiento más agresivo, tanto verbal o físico, es mejor prestar atención. La mayoría de los casos de bullying en la escuela empiezan con los hermanos, mientras que en otras ocasiones, el hermano al que agreden puede pasar esas tendencias agresivas que aprendió en casa a la escuela.

7. Practicar yoga y meditación

El yoga puede ir más allá de ser solamente un ejercicio, también es una práctica que abarca la atención plena, o mindfulness, y esta tiene muchos beneficios; entre ellos autocontrol, tolerancia afectiva, concentración, inteligencia emocional y la capacidad de relacionarse con los demás.

Janice Houlihan, de la Universidad de Massachusetts, dijo: “Las prácticas de atención plena ayudan al acosador, la víctima y cualquier testigo involucrado a desarrollar una conciencia más profunda de sí mismos, resiliencia, compasión y una mayor capacidad para regular sus respuestas emocionales”. Más escuelas han implementado el yoga y han visto resultados, como un aumento de la autoestima y rendimiento académico, una reducción del estrés, entre otros.

8. Enseñar con el ejemplo

Seamos honestos, los niños generalmente copian lo que ven. Debemos prestar atención a si hay alguna actitud agresiva dentro de casa que el niño esté copiando. Identificarlas es el primer paso para eliminarlas y cambiar a un ambiente más ameno y sin señales de bullying.

9. Tener mascotas

En muchas escuelas se han aplicado programas en los que el salón de clases tiene una mascota que cuidan juntos. Esto se comenzó con la idea de empoderar a los niños para que hablen y cambien las cosas para ellos mismos y para los demás, también porque cuidar en conjunto a animales genera empatía, compasión y sentido de comunidad.

Estos programas comenzaron a principios del 2000 y han sido un éxito, tanto que muchas otras escuelas los han replicado. Así que, ya sea en la escuela o en casa, tener mascotas trae muchos beneficios y puede hacer a los niños y adultos más empáticos.

10. Dejarlos jugar con otros niños

Cada vez es más raro ver a los niños jugar afuera, interactuando con otros niños. El juego en esa etapa es muy importante; no solo es diversión, también enseña a tener sentido de pertenencia, habilidades sociales y físicas y a pensar de manera creativa para resolver problemas. Además, les enseña a poner límites, el trabajo en equipo y a tener empatía. De hecho, los niños que juegan de esta manera muestran mucha más empatía que los que no.

¿Qué es lo que haces tú o hicieron tus papás para dar una educación con buenos ejemplos? ¿Qué crees que ha detonado el bullying en las escuelas y en las redes sociales?