10 Errores que cometemos al ayudar a una mascota que pueden hacer de algo pequeño un gran problema

Si fuera necesario, seríamos capaces de correr hasta la luna y luego regresar con tal de ver bien a nuestra mascota. Sin embargo, aunque nuestras intenciones sean las mejores, no siempre sabemos cuál es la mejor forma de ayudarlas cuando tienen un problema. Por ejemplo, si se les clavó una espina en una pata o queremos saber cómo proceder ante alguna emergencia. Por suerte, con un poco de información podemos estar preparados para los imprevistos; al menos hasta que podamos consultar con un especialista.

1. Sacar las garrapatas

Puede que al ver a este bicho molesto aferrado a nuestra mascota, nuestro primer impulso sea intentar sacarlo lo antes posible. Sin embargo, antes de que corras por tus pinzas para las cejas, es importante que sepas que si no se utilizan los instrumentos adecuados y bien limpios, existe el riesgo de que se genere una infección y de que parte del parásito quede dentro de la piel.

Por lo tanto, si no hay otro remedio que hacer esta tarea en casa, es imprescindible contar con un gancho especial para quitar las garrapatas enteras y de manera segura. Por otro lado, no es recomendable aplicar vaselina, alcohol u otro producto casero en la zona, ya que se terminará irritando aún más la piel, lo que incrementa el riesgo de transmisión de enfermedades.

2. Limpiar las heridas con agua oxigenada

Aunque el agua oxigenada es excelente para desinfectar las heridas en los humanos, no se la recomienda para los animales. Este producto, de hecho, puede hacerle más daño que bien a nuestra mascota, porque daña el tejido de alrededor y demora el proceso de curación natural, lo que podría volver a la herida más susceptible a las infecciones. Por otra parte, el champú, los jabones y el alcohol isopropílico tampoco son aconsejables.

3. Abrazarlo si está herido o enfermo

¿Cómo resistirse a abrazar a un perrito con ojos tristes? Sin embargo, no siempre es lo mejor. Un animal dolorido o con miedo es impredecible, y nuestro contacto podría causarle aún más dolor o aumentar su ansiedad. Cuando se siente inseguro o vulnerable, incluso el perro más dócil es capaz de defenderse.

Si nuestra mascota no se siente bien, no es necesario acercarnos demasiado para reconfortarla: intenta hablarle con tranquilidad, o simplemente ofrécele tu compañía a una distancia que no le genere estrés.

4. Ponerle un collar de limones

Es mejor olvidar este viejo truco de la abuelita para tratar el moquillo. Aunque se cree que usando este collar el perro inhalará el cítrico y, en consecuencia, este combatirá la enfermedad, hay que recordar que en este caso la vitamina C no tiene un papel importante, como lo tiene con la gripe en los humanos. El único método eficiente es visitar al veterinario lo más pronto posible.

5. No mantenerlo tranquilo después de una operación

Puede que nos alegre ver a nuestra mascota con el ánimo de correr y jugar después de una operación, pues podemos tener la impresión de que no siente nada. Pero, en realidad, los caninos suelen ignorar la incomodidad para hacer lo que acostumbran. Sin embargo, es crucial que descansen para sanar adecuadamente.

Aunque parezca un reto mantener en paz a un perro que quiere jugar, hay formas de intentarlo. Por ejemplo, puedes llevarlo al baño usando una correa corta, tenerlo en reposo en un cuarto con vista al exterior para que se entretenga y comprarle juguetes interactivos que ejerciten su mente sin necesidad de corretear por ahí.

6. Transportarlo sin seguridad

Otro error es transportar a un animal lastimado sin ningún tipo de protección. Para reducir el riesgo de que se haga más daño, no hay que olvidar la transportadora o usar una caja (con suficiente ventilación). En el caso de los perros grandes, puedes poner una manta que actúe como una camilla que te ayude a moverlo sin tocarlo demasiado.

7. Dejar que se rasque las heridas

En el caso de las heridas, a veces se suele pensar que no tiene nada de malo dejar que nuestra mascota se lama o se rasque un poco, pero esto puede infectar la herida y demorar la cicatrización. Por eso, hay que prestar especial atención en los casos en que los animalitos sienten la necesidad de tocar la zona lastimada:

• Cuando les está creciendo el pelo rapado luego de un procedimiento médico.
• Además de las heridas, en caso de esguinces y fracturas.
• Al estar al aire libre, pues al entrar aire en la herida, esta cicatriza más rápido, pero también pica más.

8. Arrancar las espinas de las patas

La hora del paseo suele ser un momento feliz hasta que nuestro perro empieza a cojear a causa de una espina enterrada o una astilla. Aunque deseemos quitar el objeto enseguida, hay que cuidar la higiene para no hacer más grande el problema, y asegurarse de extraerlo una vez que la zona esté bien limpia.

Sin embargo, si la astilla está enterrada en una articulación, es mejor que la extraiga un veterinario, ya que podría infectarse si se ha incrustado en una cápsula articular.

9. Enfriarlo muy rápido en caso de calor

Si a nuestro perro le da un golpe de calor, es muy importante ayudarlo a que baje su temperatura corporal gradualmente. Para ello, puedes intentar hacer lo siguiente:

• Moverlo a un área sombreada y fresca.
• Mojarlo con agua fresca, no fría, evitando la cabeza.
• Puedes colocar toallas frescas debajo de tu perro, pero no sobre él, para evitar atrapar el calor.
• Dejarlo beber pequeñas cantidades de agua fresca y seguir vertiendo agua sobre él.

10. Darle medicina para humanos

Que algo sea bueno para un humano no quiere decir que también lo sea para un perro o un gato. Aunque al verlos enfermos sea tentador darles un poco del medicamento que nosotros tomamos, hay que recordar que las mascotas lo metabolizarán de forma distinta. Esto puede terminar enfermando gravemente a nuestro peludo.

Incluso en el caso de los medicamentos que son seguros para las mascotas, el veterinario debe indicar la dosis, ya que los animales necesitan una cantidad distinta a la que usaría una persona. Pasarse de la dosis indicada también puede provocarle complicaciones de salud.