10 Mitos sobre la comida que no merecen nuestros “me gusta”
La actitud responsable hacia su propia salud es el rasgo distintivo del hombre moderno. Todos los días aparecen nuevas reglas y restricciones para aquellos que quieren comer sano. Pero ¿todo es tan estricto como lo vemos?
Genial.guru ha estudiado la opinión de la ciencia oficial con respecto a 10 historias de terror alimentarias, y ahora no les tenemos miedo. Tú tampoco deberías tenerlo.
Mito # 1: Puedes tomar café solo antes del almuerzo para no afectar el sueño
Refutación: el efecto vigorizante del café es una reacción puramente individual. Depende de la actividad del gen CYP1A2, responsable del metabolismo de la cafeína. Es la cantidad de enzima producida por este gen que nos divide a todos en 3 grupos: con sensibilidad alta, habitual y baja a la cafeína.
El grupo más numeroso es, por supuesto, el habitual: se aconseja a esas personas que no tomen café 6 horas antes de acostarse. Las personas de alta sensibilidad pueden sufrir de insomnio por una taza de café tomada por la mañana, pero si perteneces al tercer grupo, una taza de café justo antes de acostarte no afectará tu sueño.
Mito # 2: Necesitas comer una súper fruta rica en antioxidantes para combatir los radicales libres
Refutación: todas las plantas se ven obligadas a combatir oxidantes, es decir, todas ellas, sin excepción, son ricas en antioxidantes. Es cierto que la mayoría de los estudios de la actividad antioxidante de las plantas se llevaron a cabo en condiciones de laboratorio, mientras que para evaluar su efecto en el cuerpo humano, son necesarias las observaciones in vivo, pero todavía su cantidad es insuficiente.
Es decir, hay suficientes antioxidantes (incluso en las papas), pero todavía no se sabe si son útiles para nosotros.
Mito # 3: La miel no se puede calentar ya que en este caso se genera un carcinógeno potencialmente mortal: hidroximetilfurfural
Refutación: hidroximetilfurfural (HMF) está en la composición de cualquier miel. De hecho, cuando se calienta, su concentración aumenta. Pero, en primer lugar, el HMF se encuentra en muchos alimentos y en cantidades mucho más grandes que en la miel (incluso si se hierve). Y en segundo lugar, no hay un solo estudio que confirme el peligro del HMF para los humanos. Al menos hasta 30 mg de HMF por día es completamente seguro para nosotros, pero no vas a poder comer tanta miel.
Mito # 4: El dióxido de carbono en las bebidas causa gastritis y otras enfermedades del tracto gastrointestinal, destruye el tejido óseo
Refutación: como demuestran los estudios, el dióxido de carbono en sí mismo no daña el tracto gastrointestinal sano, sino que alivia algunos problemas de salud como la dispepsia y el estreñimiento. Además, no se encontró ninguna relación entre el agua con gas y la osteoporosis. Se produjo un efecto negativo solo en los grupos que consumieron refrescos carbonatados, lo que sugiere que la raíz del problema no está en el gas, sino en el azúcar y el ácido fosfórico.
Así que puedes beber agua con gas con calma. Por cierto, tiene una gran ventaja: ayuda a perder peso, creando la sensación de estómago lleno.
Mito # 5: Nuestro cuerpo acumula toxinas y necesita una limpieza regular
Refutación: en 2009, un grupo de científicos pidió a los fabricantes de 15 productos de desintoxicación populares que aclararan de qué toxinas específicas les estaban liberando a sus consumidores y proporcionaran documentación comprobatoria. Después de que ninguno de los encuestados pudo dar una respuesta, quedó claro que la desintoxicación era nada más que una estrategia de marketing.
Según Edzard Ernst, Profesor Honorario de Medicina Complementaria de la Universidad de Exeter, una persona común (no expuesta a sustancias narcóticas, altamente tóxicas o tóxicas) tiene suficientes recursos en su propio cuerpo para la limpieza regular.
Mito # 6: La sal de mesa (obtenida por evaporación) es un veneno para el cuerpo, hay que reemplazarla con alguna sal exótica
Refutación: se ofrece sal marina, del Himalaya, iraní, negra y varios otros tipos de sal como sustituto de la sal de mesa común. Pero las diferencias en su composición, son tan insignificantes que tendrás que comer kilogramos de esta sal para obtener los beneficios prometidos.
Lo único en lo que difieren seriamente es el contenido de yodo, y aquí gana la sal de mesa, que se yoda industrialmente para combatir la deficiencia de yodo y sus consecuencias. Según la OMS, alrededor de un tercio de la población mundial consume una cantidad insuficiente de yodo, e incluso vivir en la costa no soluciona el problema. Entonces, ¿vale la pena rechazar la sal de mesa?
Mito # 7: La carne roja y procesada causa cáncer intestinal, por lo que debe excluirse de la dieta
Refutación: para empezar, vamos a determinar la terminología. La carne roja, incluso térmicamente procesada, no se considera procesada. Esta designación solo se aplica a los productos cárnicos de preservación a largo plazo.
La Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC) clasifica la carne roja en el grupo 2A (“probablemente cancerígena”). En otras palabras, los investigadores no tienen pruebas concluyentes de la carcinogenicidad de la carne roja, aunque existe una cierta correlación.
Sin embargo, los médicos recomiendan no consumir más de 70 gramos de carne roja por día, además, si es posible, dejar de consumir la carne procesada.
Mito # 8: La levadura es un producto sintético creado artificialmente
Refutación: la especie de levadura Saccharomyces cerevisiae utilizada en la industria alimentaria surgió de forma natural y se cultivó durante una domesticación de 4 000 años, pero nunca fue creada por los humanos.
Una enorme lista de elementos químicos en la composición de las levaduras modernas, que asusta a los neófitos de la alimentación sana, son solo las sustancias utilizadas en el proceso de cultivo y purificación de levadura en cantidades industriales. El cuajo, que se ofrece como una alternativa a la levadura, es la misma levadura, simplemente cultivada de forma artificial.
Mito # 9: La mayonesa es “una bomba de colesterol” para el cuerpo y el enemigo de los que quieren perder peso
Refutación: la mayonesa es realmente un producto muy graso. Pero el consejo de reemplazar la mayonesa en una ensalada de verduras (por supuesto, con aceite de oliva o sésamo) provoca una sonrisa, ya que el contenido de grasa de la mayonesa es de 50 a 80%, y cualquier aceite vegetal contiene de 95 a 99% de grasa.
La fuente de colesterol en la mayonesa es el huevo, su contenido es insignificante y el mito sobre los peligros del colesterol en los huevos ha sido reiteradamente refutado. En cuanto al conservante E200, añadido a la mayonesa en la producción industrial, es seguro para los humanos, pero puede causar alergias.
Por lo tanto, si quieres perder peso es mejor aderezar las ensaladas con yogur, si eres alérgico es mejor que prepares la mayonesa casera, y todos los demás no tienen nada de qué preocuparse.
Mito # 10: La piel es el componente más dañino del ave y debe excluirse de la dieta
Refutación: por lo general, la piel del pollo (y en general del ave) se acusa de contener mucho colesterol y mucha grasa. Sin embargo, no se tiene en cuenta que los lípidos de la piel del pollo consisten principalmente en ácidos grasos insaturados, favoritos de los nutricionistas, los que reducen el nivel de colesterol malo y aumentan el bueno.
Además, la piel de pollo es una fuente valiosa de colágeno que, a su vez, tiene un efecto positivo en el estado del tejido muscular, la piel y las articulaciones.
¿Te has sorprendido? ¿Cambiarás tus hábitos alimenticios después de haber leído este artículo? ¿O tal vez nunca te han preocupado todas estas reglas antes? Comparte tu opinión sobre la alimentación sana en los comentarios.