10 Situaciones inverosímiles que suceden en cualquier película romántica (¿nadie se dio cuenta?)

A muchos nos encantan las historias románticas. Por eso el cine produce un montón de películas sobre el amor hermoso y sincero. Cuanto más ves filmes con ese argumento, más a menudo empiezas a notar los clichés que pasan de una película a otra. A veces son tan ridículos que dan ganas de taparse la cara con las manos. Hemos preparado toda una lista de plantillas de guiones que nos provocan emociones contradictorias.

1. Él es un hombre rico y exitoso y ella es pobre

A los guionistas de películas románticas les gusta jugar con el contraste de la desigualdad social entre los personajes principales. La chica de una historia de ese tipo no solo vive sin un centavo, sino que además tiene muchos otros problemas a sus espaldas. En medio de su complicada vida cotidiana, aparece en su vida un hombre rico y noble que se enamora de ella, sin importarle las diferencias de clase, y convierte su vida en un cuento de Cenicienta.

2. La protagonista se despierta perfectamente maquillada y su pareja no escatima besos en los labios

Este cliché puede verse en casi todas las películas románticas. Cuando los protagonistas se despiertan por la mañana y se besan tranquilamente, olvidándose de la pasta y el cepillo de dientes. Y en esta imagen ideal del mundo, la chica parece que acaba de volver del salón de belleza. Basta recordar Pecado original con Angelina Jolie o la película Cuestión de tiempo para convencerse una vez más de la magia de la mañana de un melodrama de amor.

3. La chica se pone una camisa de hombre

Hablando de besos dormidos, no hay que olvidarse de la aparición de una chica por la mañana en la camisa de su elegido. Los cineastas recurren muy a menudo a este truco en las historias de amor para aumentar aún más el grado de romanticismo en la pantalla.

La primera mañana “conjunta” de Anastasia Steele y Christian Grey en Cincuenta sombras de Grey es un ejemplo de ello. Jane Fonda en Descalzos en el parque es una de las pruebas más claras de que el cliché de la camisa masculina ha sido utilizado por los cineastas durante mucho tiempo.

4. Los enamorados bailan como si fueran profesionales

En las historias de amor, todo tiene que ser perfecto. Las dotes de baile de los protagonistas no se salvaron de esta regla. Abby y Mike de La cruda verdad trabajaban en los medios de comunicación, pero eso no les impidió eclipsar a todos en la pista de baile con melodías latinoamericanas. El personaje de Sandra Bullock en La Ciudad Perdida es escritora, arqueóloga y toda una torpeza en persona, por lo que su magnífico baile con el personaje de Channing Tatum fue toda una sorpresa para nosotros.

5. La protagonista tiene un aspecto impecable, incluso cuando llora

En aras de una bella imagen, los creadores de películas románticas recurren a menudo a este cliché. El aspecto de la protagonista sigue siendo perfecto incluso después de un sollozo o un desastre natural, como si fuera una ninfa del bosque en lugar de una persona de carne y hueso. Basta recordar cualquier drama amoroso con Angelina Jolie o Cameron Diaz. Sus lágrimas son un verdadero regalo para los ojos del público, pero no tiene nada que ver con la realidad.

6. Se odiaban y luego acabaron estando juntos

Un tropo muy común en las historias de amor, en las que los personajes al principio se enemistan, luego surge una chispa entre ellos y finalmente crece para convertirse en un sentimiento fuerte.

Joe Fox y Kathleen Kaley en Tienes un e-mail eran rivales en los negocios, pero en medio de sus disputas mutuas, poco a poco empezaron a acercarse. Y ni siquiera el cierre de la librería de la chica impidió que acabaran juntos. En Las leyes de atracción los protagonistas son abogados rivales. En la película Los juegos del destino, los personajes de Jennifer Lawrence y Bradley Cooper tampoco estaban encantados al principio en la compañía del otro.

7. Un ex tóxico aparece y trae confusión a la relación de los enamorados

A los guionistas les gusta incluir este cliché en la trama cuando los enamorados ya se han juntado o estaban a punto de hacerlo. En ese momento, como con un reloj suizo, aparece el ex (o la ex) y propone volver a empezar de nuevo, por lo que lo más habitual es que los protagonistas rompan o tengan una gran discusión.

Esto es lo que hizo Daniel Cleaver en El diario de Bridget Jones cuando apareció sin invitación en la cena de cumpleaños de Bridget, provocando un conflicto con Darcy. Este cliché también se puede encontrar en las películas El descanso y Una cuestión de fe.

8. Un enamorado escribe una carta en papel en la era de las nuevas tecnologías

Uno de los miembros de la pareja escribe una carta de amor al otro, hablándole de sus sentimientos o pidiéndole perdón. Es un gesto bonito, pero no del todo relevante para la realidad moderna, donde la gente no se separa de sus dispositivos electrónicos.

En la película Tengo ganas de ti, H., en lugar de decírselo todo con palabras a su amada, se limita a quedarse de pie junto a ella y esperar a que termine de leer su carta. En la película After: aquí empieza todo también hay una escena similar.

9. La protagonista llega a un evento con un atuendo elegante, su admirador gira inmediatamente la cabeza y la contempla con admiración

Según la ley del género, en uno de los eventos la protagonista debe acudir con un nuevo atuendo despampanante. En cuanto entra en el vestíbulo o baja las escaleras, su pretendiente no tiene más que girarse y verla. ¿Existe una conexión mental entre los enamorados?

10. La trama enfrenta a los protagonistas y uno de ellos decide rendirse ante el otro

A menudo, en una historia, los personajes se ven obligados a enfrentarse entre sí, lo quieran o no. Si una historia tiene este tipo de conflicto interno, está destinada a alcanzar un clímax. Debe haber una escena emotiva entre los personajes, de la que solo uno saldrá victorioso.

Aquí es donde recordamos el cliché cuando uno de los protagonistas está dispuesto a sacrificarse en una batalla contra su persona favorita. Peeta, de Los juegos del hambre, quería hacer vencedora a Katniss a costa de su vida, pero la chica, por supuesto, no estaba de acuerdo con su decisión. Porque, según las reglas de este cliché, el amor siempre resulta ser más fuerte que todos los obstáculos.