11 Cosas que no nos enseñaron en la escuela, pero son reales

“Yo solo sé que no sé nada” es una frase atribuida a Sócrates, la cual nos recuerda que sabemos muy poco de lo que nos rodea. ¿Sabías que al menos el 50 % del oxígeno que respiramos proviene del océano? Cada día aprendemos algo nuevo de las cosas cotidianas, lo cual desafía las leyes de lo que creíamos lógico y nos deja sin palabras.

En Genial.guru recopilamos una lista de hechos científicos que parecen demasiado increíbles para ser verdad, pero que demuestran lo poco que conocemos sobre el espacio, la Tierra y hasta nuestros propios cuerpos.

1. Tu ojo genera sombras, pero el cerebro las filtra

El ojo humano es una maravilla de la naturaleza, pero su diseño no es perfecto. Para llevar sangre a la pupila existen pequeños vasos sanguíneos que se encargan de irrigarla. Esas venas obstruyen el paso de la luz y crean sombras, pero nuestro cerebro las filtra y se ajusta automáticamente para que no veamos esas “telarañas”.

Se pueden ver esos vasos sanguíneos con la ayuda de una lámpara de bolsillo.

2. Hay neuronas trabajando en tu estómago

Según un estudio, en tu intestino hay más de 100 millones de neuronas trabajando activamente. Ellas se encargan de comunicarse con el cerebro a través de la liberación de hormonas en el torrente sanguíneo. También se ha descubierto que hay un “circuito nervioso” o “nervio vago” que conecta el intestino con el cerebro para enviar otro tipo de mensajes inmediatos. Estudiar este sistema de comunicación puede arrojar luz acerca de algunos trastornos alimenticios y ayudarnos con el tratamiento de ciertas enfermedades.

3. Hay un tipo de moho que tiene memoria

Se ha descubierto que una especie de moho, a pesar de no tener neuronas o cerebro, puede retener información importante y usarla para tomar decisiones. Cuando este tipo de moho, que generalmente encontramos en el piso, el césped y el suelo del bosque, detecta alimento, rápidamente reorganiza su estructura tubular alargando ciertas partes y achicando otras. De esta forma, se empieza a dirigir hacia la fuente de comida. Aunque se haya comido todo el alimento disponible, esta estructura interna permanece latente para la siguiente búsqueda.

4. Las orugas se convierten en líquido antes de volverse mariposas

Solíamos pensar que cuando una oruga formaba un capullo para convertirse en mariposa, su cuerpo sufría algunas transformaciones, pero no imaginábamos qué tan radical era esa metamorfosis.

Ahora se sabe que para que la oruga se transforme, primero tiene que disolverse a sí misma, deshaciendo todos sus tejidos. Para ello libera enzimas que convierten su cuerpo en una “sopa”, con la excepción de unos pequeños discos que proporcionan a ese caldo la información necesaria para ir armando las piezas de la mariposa.

5. Puedes fundir metal sin fuego en el espacio

El fenómeno conocido como “soldadura en frío” se descubrió en 1940 y consiste en la unión permanente de dos metales similares a través del contacto, aplicando vacío y la presión apropiada. Esto es muy útil para los astronautas, quienes, aprovechando el vacío del espacio, pueden hacer reparaciones exteriores a su nave sin la necesidad de derretir metales.

6. La Voyager 1 ha viajado por el espacio por casi 45 años

La Voyager 1 comenzó su misión en mayo de 1977. En su largo recorrido ha brindado información de los planetas del sistema solar como nunca ha existido en toda la historia de la astronomía.

En agosto de 2021 superó la distancia de 23 mil millones de kilómetros. En todo este tiempo, solo ha estado aproximadamente a 21 horas luz de nuestro planeta.

7. Existe un continente submarino llamado Zelandia

Desde hace años, geólogos de todo el mundo han estado discutiendo la existencia de un continente sumergido, justo debajo de la actual Nueva Zelanda. Según las mediciones, consiste en una región de 4 millones 900 mil kilómetros cuadrados, pero aún no ha sido nombrada por una institución oficial como tal. Es más grande que Groenlandia y la India. Se hundió después de separarse de Asia hace 60 millones de años.

Por su extensión y características, puede ser considerado un continente por sí mismo, muy útil para investigar cómo se formaron las masas continentales.

8. La luna está a la distancia perfecta para crear eclipses

Los eclipses han sido motivo de curiosidad desde tiempos antiguos. Antes se creía que anunciaban algún suceso importante o, más que nada, alguna tragedia. Es un fenómeno que aún nos tiene intrigados.

Para que un eclipse total de sol se pueda dar, la luna se interpone entre la Tierra y el sol, pero para que esto ocurra, el satélite debe tener el tamaño preciso y estar a la distancia adecuada. Nuestra luna cumple con estas dos condiciones.

9. Los osos polares son casi invisibles a las cámaras infrarrojas

Ahora sabemos que el pelaje de los osos polares tiene un centro hueco que previene la emisión infrarroja o de calor. Es por eso por lo que si colocas a uno de estos animales frente a una cámara sensible al calor, será relativamente invisible.

Esto es posible porque su pelaje está hecho para no dejar escapar el calor corporal, protegiéndolos de esta forma del frío intenso del polo norte.

10. Los saltamontes escuchan con sus estómagos

Los saltamontes son animales fascinantes. Existen más de 11 mil especies de estos insectos por todo el mundo, la mayoría en los bosques tropicales.

Sorprendentemente, no tienen oídos como los demás animales. Ellos usan unos órganos llamados tympana para escuchar, unas membranas circulares que se encuentran en su abdomen junto a la base de sus patas. Además, también tienen 5 ojos; dos son grandes y visibles, y los otros 3 están en sus antenas. Los científicos aún no saben para qué sirven.

11. Los chimpancés y otros grandes simios en cautiverio son indiferentes a la música

Se ha dicho que la música calma a las bestias, pero un estudio con chimpancés en cautiverio demostró que ellos son indiferentes a esta. Les da igual tener música de fondo que estar en completo silencio. A ellos simplemente no les interesa.

¿Qué otros datos increíbles conoces? Compártelos en los comentarios.