Cada familia suele pasar por períodos de crisis de diferentes intensidades. Algunas parejas se divorcian después de 2-3 años de matrimonio, mientras que otras permanecen casadas por muchos años. Y no es una cuestión de suerte, sino que una pareja feliz conoce una verdad sencilla: puedes hacer frente a todos los problemas en tu vida familiar.
Genial.guru ha compilado una lista de los principales problemas que pueden enfrentar incluso las familias más felices. Sin embargo, resultó que todos ellos tienen solución.
1. Sobrepeso
La mayoría de las parejas que se casan ganan peso significativamente. Científicos de la Universidad de Glasgow emprendieron un estudio importante y llegaron a la conclusión de que, durante el primer año de la vida conjunta, la pareja gana un promedio de 1,5-2 kg cada uno. En general, las personas casadas pesan 6 kg más que las personas solteras. El aumento de peso a menudo se asocia con el estado de bienestar psicológico: los cónyuges confían uno en el otro, y por lo tanto, se pueden permitir el lujo de relajarse un poco.
¿Qué deberían hacer? Perder peso juntos es más fácil de lo que parece, porque siempre tendrás a tu lado una persona que comparta tu deseo de llevar una vida saludable. Sin embargo, los nutricionistas advierten: los hombres pierden peso más rápido, lo que puede decepcionar a la mujer. Una excelente manera de poner en orden la figura: ciclismo, montañismo e incluso paseos antes de acostarse.
2. El nacimiento de los hijos causa una crisis financiera
El nacimiento de niños causa problemas financieros en una familia joven. Las encuestas realizadas por NerdWallet, mostraron que los padres casi nunca están preparados para la aparición de los herederos, y esto no depende del bienestar: las familias de clase media y las parejas con recursos más modestos sufren de la falta de dinero.
¿Qué deberían hacer? Comiencen a ahorrar dinero mucho antes del nacimiento del primer hijo y reduzcan los gastos innecesarios: la carriola, la cuna y algo de ropa se puede comprar de segunda mano, además, pueden prescindir de mochila portabebés, andador y móvil musical para la cuña.
3. Conflictos con la suegra
Las relaciones con la suegra más de una vez fueron el objeto de los chistes y las comedias. Los psicólogos afirman que tales relaciones pueden ser muy dramáticas y, a menudo, incluso dañar la salud de ambas partes.
Las pasiones son especialmente fuertes en las relaciones entre la suegra y la nuera. Un estudio realizado en 1954 demostró que ya 2/3 de las suegras no están contentas con las esposas de sus hijos, y las nueras en respuesta, son hostiles a las madres de sus maridos. Los científicos japoneses han descubierto que las mujeres que viven con su suegra tienen más probabilidades de sufrir una cardiopatía isquémica.
¿Qué deberían hacer? La manera más segura de evitar conflictos con tu suegra es vivir separadamente. Quizás, al principio, la vida independiente será más cara, pero vale la pena. Sin embargo, si no tienen la posibilidad de vivir por separado, tendrás que utilizar todas tus habilidades diplomáticas y explicar tranquilamente a tu marido lo molestas que son las peleas con su madre.
4. Gastan dinero de diferentes maneras
Según las estadísticas, una de las primeras cosas en la lista de causas de divorcio son los conflictos por dinero. Después de la boda, los fondos personales de repente se vuelven comunes, y para la mayoría, este estado de cosas resulta ser un verdadero estrés, especialmente si uno de los cónyuges gana mucho más que el otro. Desafortunadamente, debido a la generosidad imaginaria, las parejas intentan evitar hablar de las finanzas.
¿Qué deberían hacer? Los expertos financieros recomiendan discutir problemas de dinero sin sentirse avergonzados. Es necesario establecer prioridades y decidir si su familia va a ahorrar o va a invertir su dinero, si el año que viene van de viaje o remodelan su departamento. Las respuestas a estas y otras preguntas les ayudarán a determinar la estrategia financiera de la familia para los años venideros.
5. Te molestan los hábitos de tu pareja
Después de varios meses de matrimonio, algunos hábitos y particularidades de la segunda mitad realmente comienzan a molestar. Los psicólogos están seguros: esto sucede con la mayoría de las parejas y no significa que el amor haya terminado. Sorprendentemente, esos hábitos que te atraen de tu pareja, después de un tiempo comienzan a molestar terriblemente. El amor por los deportes, la lectura, la popularidad entre amigos: todo esto y mucho más entra en la lista de los hábitos más molestos.
¿Qué deberían hacer? Confórmate. En serio. Debes recordar con más frecuencia que los caprichos de tu pareja la hacen única: después de todo, te enamoraste de esta persona. Pero si te molestan los detalles de poca importancia, dedica más tiempo al trabajo y a tus amigos para empezar a extrañar a tu cónyuge.
6. Olvidar las fechas importantes
La falta de memoria de tu compañero puede provocar muchos momentos amargos ya que a veces se percibe como un insulto personal. ¿Cómo puede un ser querido olvidar la fecha de su boda, el cumpleaños de su querida abuela o la hora exacta del primer beso? Resulta que incluso las personas casi ideales a veces se olvidan de cosas importantes: tal vez trabajan mucho o son generalmente distraídas por su naturaleza. Sucede que para un cónyuge todas estas fechas no son tan importantes, y, en parte, esto es justo, porque lo principal en la vida familiar no son los números en el calendario, sino sus relaciones.
¿Qué deberían hacer? Recuérdale a tu pareja acerca de fechas y eventos importantes en su vida familiar. De este modo, evitarás la decepción y la pareja no tendrá que sentir vergüenza por su distracción.
7. Se aburren
El primer año de matrimonio no siempre es una continuación de la luna de miel mágica. Contrariamente a las expectativas, las flores, las noches románticas y las conversaciones de corazón a corazón terminan tarde o temprano, y lo que queda es una rutina aburrida. En parte, esta decepción puede explicarse por las expectativas sobreestimadas de los cónyuges, y en parte por la falta de experiencia vital. Pero la mayoría de las parejas enfrentan cambios similares en la relación.
¿Qué deberían hacer? Las prioridades de las personas casadas son diferentes a las prioridades de los amantes: ahora ustedes tienen un hogar común, una hipoteca y, posiblemente, hijos, y la hora para las citas románticas y otros eventos importantes debe ser establecida con antelación. Los psicólogos aseguran que esto no tiene nada inusual: la vida familiar está asociada con el cumplimiento de un cierto cronograma y distribución de responsabilidades. Planeen citas románticas, visitas al cine y al teatro, entonces la chispa de amor no desaparecerá de su vida familiar.
8. Están juntos 24/7, y es molesto
Existe la opinión de que los cónyuges deben pasar todo su tiempo libre juntos, ya que fortalece la relación y promueve el surgimiento de intereses comunes. Sin embargo, en algunas parejas, después de un par de años de tal vida, se acumula la molestia.
¿Qué deberían hacer? Cada uno de los cónyuges debe tener sus propios pasatiempos que pueden ser de poco interés para el otro (por supuesto, siempre que no sean destructivos). No hay nada de qué preocuparse por pasar el fin de semana por separado: esto ayuda a fortalecer la relación.
9. Malos amigos
Después de la boda, los cónyuges adquieren no solo nuevos familiares, sino también nuevos amigos. A menudo, los amigos del esposo o esposa no son bienvenidos en la casa. A los recién casados les parece que los amigos ocupan demasiado espacio en la vida de la familia y ejercen malas influencias en la pareja.
¿Qué deberían hacer? Deja que tu media naranja tenga un mejor amigo aparte de ti. Esta idea puede ser difícil de aceptar, pero tu pareja realmente necesita comunicarse con otras personas. El profesor de la Universidad de Maryland, el Dr. Jeffrey Greif, está seguro de que los amigos son importantes para las relaciones dentro de la familia, no solo los comunes, sino también los “de toda la vida” que conocen a tu pareja desde hace muchos años.
No critiques a un amigo que te parece desagradable: critica las acciones (si las hay). Trata de establecer relaciones con amigos o al menos cambiar tu actitud hacia ellos: recuerda, la primera impresión a menudo es errónea. Finalmente, permite que tu compañero tenga amigos “fuera del hogar”, porque, de todas maneras, no podrás controlar todos los aspectos de su vida.
10. Tienen diferentes hábitos de sueño
En los años 70 del siglo XX, los científicos estudiaron a fondo los ritmos circadianos y descubrieron que existen las denominadas "alondras"1, que se despiertan temprano en la mañana descansadas y listas para hazañas laborales, y hay lechuzas que son más activas por la noche. ¿Qué pasa si un representante de las alondras y una lechuza se encuentran y deciden formar una familia? Después de todo, tal alianza puede causar algunos inconvenientes e incluso ser perjudicial para la salud.
¿Qué deberían hacer? De hecho, los diferentes ritmos biológicos de ninguna manera impiden un matrimonio feliz, pero para aquellas personas que pueden ceder. Por ejemplo, mientras el cónyuge está dormido, puedes realizar muchas tareas que beneficiarán a la familia.
11. El trabajo doméstico ahora es tu única área de responsabilidad
A pesar del hecho de que vivimos en el siglo XXI, entre las parejas siguen siendo fuertes los estereotipos sobre la división del trabajo por género: las mujeres deben mantener la comodidad del hogar (incluso si trabaja desde el anochecer hasta el amanecer), y el hombre está obligado a mantener a su familia. Este estado de las cosas puede ofender y causar desacuerdo.
¿Qué deberían hacer? Discutan el asunto de la distribución del trabajo doméstico antes del matrimonio. Y, por supuesto, utilicen al máximo los beneficios del progreso científico y tecnológico: lavavajillas, horno de hacer pan u olla multifunción puede resolver muchos problemas cotidianos. Además, con el pago automático de los servicios públicos, no habrá más disputas sobre el pago de las facturas. Para la alegría de los cónyuges modernos, los conceptos antiguos pierden su influencia: las mujeres pueden administrar las corporaciones, y los hombres recurren a la baja por paternidad para cuidar los niños en común.
12. Discuten por nada
Los psicólogos aseguran que todos los matrimonios pasan por las crisis: los momentos en que la insatisfacción de los cónyuges llega a su punto máximo. Sin embargo, las crisis tienen su propio encanto: es una oportunidad para renovar las relaciones y transferirlas a un nuevo nivel. ¿Tu pareja cordial y tranquila se convirtió en furia que discute sobre cualquier cosa, y la casa se convirtió en un campo de batalla? Nos apresuramos a decepcionarte: lo más probable es que tu comportamiento tampoco sea el ideal.
¿Qué deberían hacer? No intentes cambiar a tu pareja: tales intentos solo provocan indignación. En lugar de eso, debes aprender a escuchar su posición. Desafortunadamente, las personas cercanas pueden lastimarse uno al otro de manera realmente dolorosa, ya que conocen todas las vulnerabilidades de su pareja. Es por eso que la paciencia y el respeto por los sentimientos de la otra persona son esas mismas cosas que llevarán al matrimonio a la salida de la crisis.
13. Él se fija en otras mujeres
Entonces, tu compañero comenzó a mostrar un interés inequívoco por alguien más. ¿Es una buena razón para montar un escándalo o su interés debería pasar desapercibido? No existe una respuesta clara a esta pregunta: hay quienes sostienen que las preocupaciones acerca de las miradas casuales es el problema de la persona preocupada por estas miradas, otros creen que es una señal de la crisis que se está aproximando a la relación. Los hombres tienen un punto de vista diferente: los representantes del sexo masculino no ven nada negativo en estas miradas evolutivas argumentando que no tienen nada que ver con el deseo de traicionar a su esposa.
¿Qué deberían hacer? No te calles, cuéntale a tu pareja sobre tu descontento. Quizás él realmente no pensó en nada malo, y se trata de la falta de confianza en ti misma.
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