15 Relatos que muestran lo distinto que es el mundo para padres e hijos

Padres e hijos son como dos mundos distintos que a veces resultan difíciles de conectar. En la era de las computadoras y los teléfonos inteligentes, la brecha generacional se hace aún más evidente, convirtiendo incluso las conversaciones más simples en un verdadero desafío. A veces, estas diferencias de perspectiva provocan malentendidos que, a su vez, dan lugar a situaciones divertidas e incluso curiosas.

Y en la sección del bono, descubrirás que los adolescentes no siempre tienen prisa por crecer, ¡y muchas veces eso es algo positivo!

• Fui a recoger a mi hija a la escuela. Estaba esperando en el pasillo frente a su salón. Las clases ya habían terminado y los niños comenzaban a salir. Mi hija seguía conversando con la maestra, así que me quedé esperando. De repente, vi a una de sus compañeras salir llorando. Dos minutos después, mi hija salió y nos fuimos a casa. En el camino, le pregunté por qué su compañera estaba llorando de esa manera. Mi hija me respondió: "Terminó con su novio". ¡Dios mío! ¡Las niñas ahora lloran por sus novios a los 11 años! A su edad, yo lloraba por la escena de Simba y su padre. © Mamdarinka / VK
• Mi hija de 18 meses me quitó el teléfono de las manos, buscó su caricatura favorita en la sección de "vistos recientemente" y la reprodujo. Los niños de hoy aprenden a manejar la tecnología increíblemente rápido. © Anna Voronina / VK
• Una noche, mi esposo y yo nos despertamos por unos ruidos extraños que venían del baño. Lo empujé y le dije: "¡Ve a ver qué es!". Pero él me respondió: "¡No, tengo miedo!". De repente, nuestro hijo de 6 años se despertó, se levantó sin decir una palabra y se adentró en la oscuridad. En ese momento, nos quedamos con la boca abierta. El niño espantó al gato, que era el culpable del alboroto, y luego regresó a dormir tranquilamente. Resulta que nuestro hijo es más valiente que sus padres. © Mamdarinka / VK

• Un día, mi padre empezó de nuevo a regañarme por pasar tanto tiempo en la computadora. Me dijo que, cuando tenía mi edad, ayudaba a su padre en el campo y no tenía tiempo para divertirse. Intenté responderle con calma: "Papá, aquí no hay campos, y tú tampoco tuviste dispositivos que te hicieran adicto a ellos. Además, ¿por qué debería gastar mi tiempo en otra cosa si puedo dedicarlo a lo que realmente me gusta?". Pero él siguió discutiendo, repitiendo que los niños de ahora solo contradicen a los adultos. Sin decir nada más, apagué la computadora y me fui a la cama. No tenía sentido seguir debatiendo. © Sidharth Sabat / Quora
• Llevo cuatro años trabajando de manera independiente. Gano casi 40 mil dólares al año operando en la bolsa y tocando la guitarra para obtener propinas. Y aun así, mi padre insiste en que consiga un "trabajo de verdad". Actualmente, gano más que él. © Unknown author / Reddit
• Mi esposa se encontró en la calle con una vecina mayor de 88 años. La señora le preguntó:
  — ¿Por qué tu esposo anda en bicicleta si tiene carro?
  — Le gusta andar en bicicleta, pasa mucho tiempo sentado en el trabajo.
  — ¿Se le descompuso el carro?
  — No, está en perfectas condiciones.
  — Ya veo, está ahorrando dinero.
  Diferentes generaciones, diferentes maneras de ver el mundo. © PolAnd1234 / Pikabu

• Trabajo como maestro en una escuela. He notado que los niños de hoy en día, incluso los de secundaria, no saben leer la hora en un reloj analógico. Cuando les digo, por ejemplo, "las nueve y media", no entienden. Solo reconocen los números digitales de un teléfono móvil. Mientras escriben un examen, levantan la cabeza cada minuto y preguntan: "¿Cuánto tiempo queda?". Les señalo el reloj de pared y simplemente se encogen de hombros diciendo: "No entendemos estos relojes". Es algo realmente extraño. © Overheard / Ideer
• Mi hijo tiene 10 años. El otro día lo vi navegando por los mapas en la laptop de mi esposo, moviéndose de un lado a otro. No estaba explorando algún país lejano ni otra ciudad, sino la nuestra, donde ha vivido desde que nació. Me acerqué y le pregunté qué estaba haciendo. Me respondió: "Mamá, estoy dando un paseo". Si mi madre escuchara que "pasear" significa esto, me habría mandado afuera de inmediato. Pero mi hijo solo estaba viendo cómo se veía la ciudad antes de su nacimiento, ya que las últimas fotos en los mapas eran de 2013. © Mamdarinka / VK
• Tengo 42 años y mi hijo menor tiene 6. Nunca he sentido la necesidad de tener un teléfono caro o sofisticado. Para mí, el teléfono solo es para comunicarme, y tengo una laptop para el trabajo. En mi cumpleaños, mi esposo me regaló un teléfono nuevo. Apenas lo encendí, me quedé en shock... no sabía ni dónde presionar. Mi esposo trató de ayudarme, pero en algunos momentos él tampoco sabía qué hacer. Entonces, nuestro hijo menor se unió a nosotros. Resultó ser un experto en tecnología. Nos ayudó a descargar las aplicaciones necesarias y nos enseñó cómo usarlas. Nos sorprendió lo mucho que sabía sobre dispositivos modernos. © Mamdarinka / VK

• Era un día hermoso. A pesar de la nevada reciente, la temperatura era de unos agradables 12 °C y el sol brillaba. El aire estaba cálido y fresco a la vez; los pájaros volaban. Yo manejaba de regreso a casa después de pasar el día afuera con mis hijos. Íbamos a unos 90 km/h cuando mi hijo menor, de casi 5 años, me pidió que bajara la ventana. ¡Por supuesto! Hacía un clima maravilloso y el aire se sentía increíble. Menos de 30 segundos después, mi hijo mayor hizo un ruido extraño y me llamó. Miré rápidamente por el espejo retrovisor y supe de inmediato que algo andaba mal. La tableta había desaparecido. Lo más probable es que ya estuviera hecha pedazos en el asfalto. Y, por obra de los ángeles, los autos que venían detrás de nosotros no sufrieron ningún accidente ni hubo heridos. Entre la vergüenza y el miedo de que me atropellaran, decidí no detenerme a recogerla del camino. © SnooSuggestions6185 / Reddit
• Cuando era niño, veía muchos programas sobre ovnis en la televisión. Hablaban sobre círculos en los cultivos y sobre cómo los extraterrestres secuestraban a personas en la noche. Después de ver esos programas, me daba miedo salir de la cama. Hace poco, vi a mi hija de 6 años viendo un programa similar en la televisión. Le pregunté: "Anna, ¿no te dará miedo? Tal vez sea mejor no verlo". Pero ella, con una seguridad absoluta, me respondió: "¡Mamá, son cuentos! Los ovnis no existen, los inventaron para engañar a los tontos". © Mamdarinka / VK
• Mis amigos educan a su hijo bajo dos principios: decir siempre la verdad y ser educado. Esta combinación de valores a veces genera resultados inesperados. Ayer, mis amigos vinieron de visita. Su hijo se sentó con nosotros a la mesa y cenó. Cuando terminó de comer, dijo con toda naturalidad: "Muchas gracias, estaba delicioso... pero no me gustó". ¡Una buena educación siempre da sus frutos! © The Situation / VK

• Tengo un hijo de 7 años. Recientemente, mi esposo y yo le regalamos una tableta. Toma clases de español y hace muchas tareas en línea. Sin embargo, la mayor parte del tiempo la usa para ver videos y jugar. Establecimos una regla: puede usarla 3 horas al día para entretenimiento y 1 hora para sus clases de español. Al principio, respetaba exactamente el tiempo acordado. Pero luego descubrimos su estrategia. Mi hijo tomaba la tableta conmigo, jugaba un rato y me la devolvía. Luego, aproximadamente una hora después, se la pedía a su papá. Decidimos no castigarlo por su truco, más bien nos pareció una jugada bastante creativa. © Mamdarinka / VK
• ¡Los niños de hoy me sorprenden! Mi hermana tiene 8 años y juega a organizar eventos y a publicar revistas. Le pregunté al hijo de unos amigos, de 9 años: "¿Qué caricatura veremos?". Y él, con total seriedad, me respondió: "¿Tienes juegos de mesa?". Mi sobrino tiene 2 años y, tras mojar sus pantalones, con la calma de un atleta olímpico, me indicó dónde estaba la bolsa con su ropa de cambio en el cajón, mientras yo corría de un lado a otro con un trapo. ¿De dónde salen estos niños? Recuerdo cuando tenía 7 u 8 años. Sí, leía a Julio Verne y Stevenson, pero mis juegos se limitaban a tocar en una escuela de música imaginaria y a jugar a las atrapadas. Con asombro y un poco de temor, me pregunto en qué se convertirán estos niños cuando crezcan. © Overheard / Ideer
• Mis padres me pidieron que cuidara a mi hermano menor, que tiene 5 años. Recordé cuánto me gustaba Tom y Jerry cuando era niño, así que le puse la caricatura y me fui a darme un baño. Cuando volví, unos 30 minutos después, encontré a mi hermano llorando. Le pregunté qué pasaba y, entre lágrimas, me respondió: "Me da lástima el gato, el ratón lo está lastimando". Lo consolé y le compré un helado. Así de sensibles son los niños de hoy en día. © Overheard / Ideer

Bono: "Mientras otras chicas de 16 años van a bailes y salen con chicos, mi hija hace esto…"

• ¡Es increíble! No se burlen de ella. © FigaroNeptune / Reddit

Y aquí algunos consejos y trucos sobre cómo convertirte en un modelo a seguir para tus hijos.